miércoles, 21 de noviembre de 2007

Irrumpió con su peculiar sentido del corrido; Pancho Madrigal en tierras zacatecanas.


Por: Roberto A. Valenciano Capín.

Un honor estar de nueva cuenta con un pionero de la canción contemporánea, a sus tantos años de talachearle. Hablamos de Pancho Madrigal, quien no se cansa de cantar y disfrutar a la vieja usanza sus corridos y demás canciones. Autor de éxitos como: “Jacinto Cenobio”, “Roberto el albañil”, “La niña huichol”, “Los niños que nada tienen” y “Julia de los caminos” por nombrar algunos.
Al presentarse con mucho éxito en la Plaza Gotilla, un espacio donde el espectador es presa de atención al rudimento de la voz y a las cinco cuerdas pulsadas que las valsean, desgañitan, el interprete redactando, con su lirismo, un panfleto de disidencia en contra de los poderes opresores de la razón y su maquinaria patética y con prisa desbarajustada en esta XXI edición del Festival Cultural Zacatecas 2007
Es importante comentar que el corrido siempre ha sido un manifiesto, siempre ha sido un documento que relata realidad, que relata lo que sucede en un momento socialmente, hasta el narcocorrido tiene actualmente una función social que nos esta saturando y nos esta diciendo que estamos viviendo en una época totalmente saturada de narcotráfico y que se ha convertido en una negocio para muchas gentes el hacer narcocorridos.
De ahí que para el compositor jalisciense todas sus canciones también estén basadas en las formas tradicionales de la canción mexicana, fundamentadas en diferentes tipos como son el son, el jarabe y claro el corrido tradicional.
A pesar del exhaustivo trabajo creativo y de difusión del corrido tradicional comento el Maestro Madrigal que no hay mucho público para este tipo de canciones. “Realmente el público es mayor-de edad-, ya que los jóvenes están más abocados a lo que es la trova, la nueva canción y otros tipos de cosas, sin hacer dejo la mayoría a la banda y la onda grupera”.
“Pero dentro de lo que hacemos nosotros si como que tiene más pegue lo que es la trova, lógicamente porque es lo más cercano a la chaviza”.
De ahí que esto-corrido- sea más para gente que ya esta a acostumbrada a escuchar los géneros tradicionales, quien ha tenido la fortuna de ser interpretadas sus canciones por Guadalupe Pineda, Amparo Ochoa, Alfredo Zitarrosa, Caíto y Oscar Chávez.
Aunque aclaro que nunca ha faltado cierto número de jóvenes que les gusta este tipo de música. Para Pancho Madrigal escribir es un ejercicio para sí mismo, aunque “de carambola, le gusta a los demás”. De ahí que no sea precisamente un reto escribirlas, “sino más bien es fácil llegar si quieres hacer cosas, de ahí que mi interés es seguir haciendo lo que siempre he hecho y lógicamente ya no esta en lo que es lo moderno”.
No hay que olvidar que el corrido tiene un encanto muy especial como siempre lo va a tener el cuento corto, la narración, la narrativa es muy especial, siendo para Madrigal “Yo me divierto mucho con lo que hago, la gente que ya sabe a lo que va a escuchar también se divierte”.
En cuanto a la creación de una escuela o simplemente el acercamiento de jóvenes interesados en este género musical comento que en Guadalajara se esta haciendo mucho pero lamentablemente no en la cuestión de los corridos, porque es un género que no es nada fácil, “porque hay que manejar el humor, un humor que hay que tener mucho cuidado para que no caiga en lo vulgar, el pastelazo, la cosa facilota o el albur”. De ahí que hay que mantener un humorismo más o menos fino, inteligente sin hacer ofender a la gente.
Aunque desconoce de cuantas personas-jóvenes-actualmente hacen corrido enfatizo que el corrido es algo que nunca va a pasar, “porque es una manifestación muy popular pero se sigue haciendo mucho corrido, pero desgraciadamente más fuerte es el narcocorrido obviamente el porque les deja lana y nunca va a ser prohibido como tal, al ser un reflejo de la realidad, además de ser una de las características importantes del corrido.
Aunque aclaro que se esta abusando demasiado de él, “porque deja lana a los compositores”.
No hace el compositor jalisciense dejo de poder hacer también narcocorridos, para el jalisciense lo descarta al no gustarle caer en lo fácil y seguir la corriente. “Para el compositor su gran reto sigue siendo pues hacer reír a la gente, porque durante un tiempo hice llorar a la gente con canciones muy serias y dramáticas, de mucho contenido social que los preocupaba, los hacía pensar y reflexionar, pero me gusta hacerlos más reír”.
Aclaro que el corrido que hace va más directo en el hacer reír. “Mientras yo vea la permanente sonrisa en la cara de la gente soy feliz”. Además de ser una oportunidad para conocer a la gente que trabaja con la guitarra y que su oficio es entonar la historia.
A partir de su última visita a tierras potosinas hace dos años, comento que ha hecho dos discos-uno de corridos y otro llamado de relatos de vela- pero esta muy entusiasmado porque en este año realizara otro de corridos, así como el inicio de un viejo y anhelado proyecto con su amigo de años, Oscar Chávez para hacer un disco y cantar como dueto.
“Es una amistad de 30 años con Oscar Chávez, pero desde hace 15 años traían la idea del proyecto de hacer un disco, el cual ha cambiado como diez veces el concepto del disco, de ahí que acabamos en hacer canciones de amor-románticas-de forma compartidas, en cuanto al arreglo musical lo va a ser del músico yucateco Jorge Buenfil”.
Total que para Pancho Madrigal hay muchos proyectos por ahí. Además de seguir pintando. El trabajar para el Colegio de Jalisco con sus investigaciones y por ahí continúa con un taller de historietas.
Por último agrego que tiene muchas ganas de venir nuevamente a estas tierras huachichilas, no más esta en la espera de que sea invitado para disfrutar y compartir su excelente humor y vitalidad de este sencillo y humilde compositor jalisciense.
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Solamente basta leer los peculiares títulos de sus corridos, para dar cuenta de su incomparable humor: “Corrido del temible y nunca visto acontecimiento del duelo de miradas, manotazos y aguantadas de resueños de dos valientes borrachos” o “Corrido de lo que andaba pasando la vez que no paso nada, pero que tal si pasa”.

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