Por. Roberto A. Valenciano Capín
Al hablar de la banda potosina de los Santeros, es un referente mediato de lo que ha ocurrido en la escena local. De una constante inestabilidad de las diversas generaciones de bandas, al no existir un real compromiso por ser un proyecto que vaya más allá del simple hecho de tocar y el respeto al aspecto musical, por lo tanto, de ahí que la creación no trascienda por sí mismo.
Pero con lo citado anteriormente, han logrado afrontar sus propias viscitudes al ser muy afortunados de estar en espacios y abrirles a bandas tan importantes en el quehacer nacional como internacional: Festival de la ciudad de San Luis, Miguel Barragán, Feria de Irapuato, etc., así como el abrir a las bandas como Salón Victoria, Nana Pancha, Panteón Rococó. Pero con el infortunio de no ir más allá de...
Una banda que se afronta actualmente la posible fractura de esta banda potosina, a pesar de la perseverancia de algunos de sus integrantes por seguirle dando vida artificial a este desgastado proyecto que empezó con una divertida y hasta interesante fusión de ritmos, recayendo el peso en un ska achilangado, pero con el contrapeso de unas letras que van desde el sentido de denuncia social, el desmadre y el humor.
Una banda que llegó ante su propia sorpresa a disputar la final del primer concurso de bandas que organizo el Brixton Pub, para quedar en quinto lugar, de ahí que hayan sido invitados por el “Buda”, gerente del mismo para exponer su trabajo y nuevamente toman posesión del único espacio de alternancia musical para presentar ante la banda que se dio cita de su repertorio de canciones que los ha distinguido en estos casi seis años de hacer música, como son: “La fuga de Jackson”, “guantes blancos”, “revolución”, “la noche que dijiste adiós”, “el mensaje”, “salsanteros” y muchas más.
Quienes en esta ocasión el querer es poder, al escucharse mas ensayados, poder apreciarse más compactos, con más cuerpo en los metales a pesar de las desafinaciones que se dieron por ahí, así como la inclusión o invitación sea el caso de Miguel en los teclados, dándole el sabor y frescura versátil a la banda. Preparándose para presentar este 29 de Noviembre tres nuevas rolas en su aparición dentro del concierto con Panteón Rococó y Salón Victoria, el cual puede ser un hecho circunstancial en el devenir de esta banda tunera.
Este proyecto que tiene sus inicios en el 2002, se gesto este proyecto en épocas de pujanza creativa, con la inquietud y el deseo de hacer un grupo musical diferente que lograra mantener una fusión universal, teniendo como único medio de expresión la música; utilizando recursos musicales ilimitados y tratando de hacer y mantener vanguardia creativa en San Luis Potosí. Quienes han tenido como meta principal en sus presentaciones de hacer sonar bajo "el ritmo que cura las penas".
Al hablar de la banda potosina de los Santeros, es un referente mediato de lo que ha ocurrido en la escena local. De una constante inestabilidad de las diversas generaciones de bandas, al no existir un real compromiso por ser un proyecto que vaya más allá del simple hecho de tocar y el respeto al aspecto musical, por lo tanto, de ahí que la creación no trascienda por sí mismo.
Pero con lo citado anteriormente, han logrado afrontar sus propias viscitudes al ser muy afortunados de estar en espacios y abrirles a bandas tan importantes en el quehacer nacional como internacional: Festival de la ciudad de San Luis, Miguel Barragán, Feria de Irapuato, etc., así como el abrir a las bandas como Salón Victoria, Nana Pancha, Panteón Rococó. Pero con el infortunio de no ir más allá de...
Una banda que se afronta actualmente la posible fractura de esta banda potosina, a pesar de la perseverancia de algunos de sus integrantes por seguirle dando vida artificial a este desgastado proyecto que empezó con una divertida y hasta interesante fusión de ritmos, recayendo el peso en un ska achilangado, pero con el contrapeso de unas letras que van desde el sentido de denuncia social, el desmadre y el humor.
Una banda que llegó ante su propia sorpresa a disputar la final del primer concurso de bandas que organizo el Brixton Pub, para quedar en quinto lugar, de ahí que hayan sido invitados por el “Buda”, gerente del mismo para exponer su trabajo y nuevamente toman posesión del único espacio de alternancia musical para presentar ante la banda que se dio cita de su repertorio de canciones que los ha distinguido en estos casi seis años de hacer música, como son: “La fuga de Jackson”, “guantes blancos”, “revolución”, “la noche que dijiste adiós”, “el mensaje”, “salsanteros” y muchas más.
Quienes en esta ocasión el querer es poder, al escucharse mas ensayados, poder apreciarse más compactos, con más cuerpo en los metales a pesar de las desafinaciones que se dieron por ahí, así como la inclusión o invitación sea el caso de Miguel en los teclados, dándole el sabor y frescura versátil a la banda. Preparándose para presentar este 29 de Noviembre tres nuevas rolas en su aparición dentro del concierto con Panteón Rococó y Salón Victoria, el cual puede ser un hecho circunstancial en el devenir de esta banda tunera.
Este proyecto que tiene sus inicios en el 2002, se gesto este proyecto en épocas de pujanza creativa, con la inquietud y el deseo de hacer un grupo musical diferente que lograra mantener una fusión universal, teniendo como único medio de expresión la música; utilizando recursos musicales ilimitados y tratando de hacer y mantener vanguardia creativa en San Luis Potosí. Quienes han tenido como meta principal en sus presentaciones de hacer sonar bajo "el ritmo que cura las penas".
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