Por: Roberto A. Valenciano Capín
Sin lugar a dudas, un gran cierre de la corta temporada de “NRDA Navideño: Nos reservamos el derecho de admisión” por la compañía de teatro Colonche Cabaret en las instalaciones del espacio escénico de Mexland.
Una infalible consecuencia de la consistencia de esta joven compañía que le apuesta con todo a hacer un importante ejercicio, pocas veces abordado en estas tierras potosinas, como es el teatro de cabaret, en donde queda de manifiesto esta conjugación de puntos neurales como es esta trilogía: la critica social, el teatro y la música, la cual es abordada y entremezclada con la vida cotidiana que se suscita no solo en esta capital potosina sino mas allende de...
Colonche Cabaret, un grupo independiente que produce, escribe y actúa, quienes buscan sin cortapisas posicionar este género entre el público potosino, el cual esta integrado por los actores Ricardo Moreno, Susana Arocha, Aldo Resendiz y Eloísa Zapata.
Al ofrecer una exitosa primera temporada, la cual fue aprovechando estos tiempos para lanzar con igual recepción /aceptación del público potosino bajo esta versión navideña.
“NRDA: Nos reservamos el derecho de admisión” navideño es una serie de sketches hilados perfectamente bajo el pretexto de estas fiestas navideñas.
En forma de bienvenida, realizan una singular forma de pedir posada, a partir de ésta le apuestan sus integrantes a que el espectador se vuelva parte de la misma y por lo tanto se involucre a tal grado en los cinco sketches que la comprenden.
Una obra en donde potencializan esta combinación perfecta del sarcasmo, el humor y un bien velado trasfondo de nuestra realidad y ante todo, lo principal, como es reírse de uno mismo, es lo que se oferta en esta obra, la cual va desde el sueño de uno de los Reyes Magos por tener una Italika a pesar de sus infalibles encargo ordenados por su jefe Jesús, hasta el contraponer el rol femenino y este asumirlo el hombre, esta imprescindible tía-abuela-vecina de “buenas costumbres, sin faltar estos niños recatados que nos invitan a una clase de coro en su escuela con el sacerdote más “bueno de la ciudad”.
Una obra en donde potencializan esta combinación perfecta del sarcasmo, el humor y un bien velado trasfondo de nuestra realidad y ante todo, lo principal, como es reírse de uno mismo, es lo que se oferta en esta obra, la cual va desde el sueño de uno de los Reyes Magos por tener una Italika a pesar de sus infalibles encargo ordenados por su jefe Jesús, hasta el contraponer el rol femenino y este asumirlo el hombre, esta imprescindible tía-abuela-vecina de “buenas costumbres, sin faltar estos niños recatados que nos invitan a una clase de coro en su escuela con el sacerdote más “bueno de la ciudad”.
A pesar del poco tiempo de conformada esta compañía detentan de una dramaturgia bien construida, congruente y siendo fortalecida por la buena y disposición de asumir este hecho escénico con una confortante actuación, aunado a la versatilidad y una capacidad para la improvisación a través de estos personajes de toque norteño, para dejar en claro lo que proponen sobre el escenario.
En ese sentido, simplemente una alegoría del colonche-, sabe bien, sabe dulce, sabe de a poco, y sin más, en un segundo estás tumbado en el suelo por sus efectos, es lo que ofrecieron en esta primeras probadas, quienes comentan que ya están en proceso de presentar otro espectáculo en el primer trimestre del 2005.
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