miércoles, 24 de junio de 2015

Crean foros alternativos


La limitada oferta cultural en algunos estados del País propició el surgimiento de espacios independientes autogestivos.

Así, en 20 años, el modelo que antes se concentraba en la Ciudad de México, se ha extendido a toda la República.

Ahora existen espacios de exhibición organizados por artistas, como El Rastro, en Hermosillo; TJinChina, en Tijuana; Terminal Santorini, en Chihuahua, y también talleres-escuela como La Curtiduría, en Oaxaca.

Otros son proyectos liderados por curadores-artistas, aunque no tienen espacio de exhibición, como Anatema, de Guadalajara, o sitios que invitan a realizar residencias de curadores y artistas, como La Compañía, en Monterrey.

En los años 90 existían La Quiñonera, La Panadería y Temístocles 44, fundados por Néstor Quiñones, Yoshua Okón,

Damián Ortega y Abraham Cruzvillegas, respectivamente, quienes buscaban plataformas para mostrar su trabajo en lugares que se convirtieron en centros de reu-nión de la comunidad artística en el Distrito Federal.

El caso de El Rastro es la respuesta a una problemática recurrente en estados en donde el arte contemporáneo es escaso y no hay lugares donde exponer. Su director, Oliver Yocupicio, de 24 años, señaló que en Hermosillo prácticamente no hay galerías comerciales y sólo existen dos espacios gubernamentales de exhibición.

Desde marzo de 2014, se abrió el foro en un departamento del centro de la ciudad y ya llevan ocho exposiciones.

TJinChina arrancó en 2011 como proyecto expositivo y curatorial en China, pero se mudó a Tijuana al año siguiente. Se trata de un espacio de exhibición que lideran los artistas Daniel Ruanova y Mely Barragán.

Al principio, todo el financiamiento fue de su bolsa. Luego recibieron una beca del Fonca, que ya terminó. El renacer de la actividad cultural en Tijuana ha propiciado que a sus inauguraciones lleguen, mínimo, 300 personas.

El Chanate, en la Comarca Lagunera, es un taller de grabado que surgió de una iniciativa gubernamental hace 13 años a petición del pintor Arturo Rivera. Tras un abandono de 4 años, el proyecto fue retomado por una asociación civil que privilegia talleres para jóvenes.

Su coordinador, Norberto Treviño, dijo que, tras la ola violenta que azotó a Torreón, desarrollaron proyectos con impacto social, como El Chanate Móvil, un taller sobre ruedas que llevan a colonias conflictivas.

La Curtiduría es uno de los espacios más antiguos de esta nueva ola. Fue fundado en 2006 por Demián Flores en Oaxaca.

"Se ha transformado en una sede para el diálogo, el intercambio, la educación y la producción artística contemporánea", destacó Flores.

En 2012 se le unió Laboratorio Oaxaca, una bodega acondicionada para recibir artistas internacionales en residencia, y en 2013, abrió La Cebada, en Xochimilco, que se enfoca a proyectos de vinculación entre el arte y la comunidad.

 
 
 




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