Por: Roberto A. Valenciano Capín
Sin lugar la unión hace la fuerza, al tomar el escenario del Coloso de Villerías y de esta manera dejar a un lado toda esa algarabía y derroche entorno de los festejos tanto del Bicentenario y Centenario de la independencia y la revolución, respectivamente.
Eso si, nos invitaron e inventaron una fiesta... con canciones insurgentes y ritmos aleatorios. Simplemente LA OTRA forma de ser independientes.
De esta manera se gestó una contracorriente de bandas potosinas bajo el atractivo y a la vez alentador denominativo de colectivo "la otra escena", el cual ha sido respaldado por la sapiencia y la fraternidad del Arcano Mayor, David Soraiz.
Sin más, un hecho histórico dentro del devenir de la escena musical potosina, al afrontar con aplomo y exponer bajo la formalidad y profesionalismo sus propuestas en este importante escenario potosino.
En palabras del cantautor sonorense-potosino, el Mtro. Soraiz se busca a través de este proyecto gestar en las bandas se integran a este colectivo, aunado a encontrar los espacios para presentarse a los habituales, además de mostrar la calidad de sus propuestas y a la vez buscar también nuevos públicos. Claro, sin dejar de echar su desmadre y presentarnos un show de mucha calidad.
Dieron la bienvenida bajo la sonoridad del Sound System consciente; Real Stylo bajo el soport de Stret Roots y Lion-zila " este es el real sonido cultural, venimos acá con una gran energía y que sienta la energía del fuego" comenta el aguerrido promotor de la música consiente hecha reggae.
Para ceder el espacio a una banda antañera y que sus letras representan muy bien esa época de retratar bajo el rubro de la crónica de denuncia, hablamos de Sigue la Mata son, al destacar su participación de ser parte de este colectivo y este evento, al regalarnos para los nostálgicos rolas sustanciales que le dieron pauta de ser parte de la historia de esta otra escena potosina, al interpretar muy a su estilo unas rolitas de David Soraiz.
Posteriormente, más allá de ser homenajeado, fue el responsable mediato de esta venturosa aventura, quien sin más tomó su lugar en el escenario, el mismísimo procenio, junto con su guitarra, un sombrero de teja y su picardía y una peculiar manera de platicar con su público e interpretar varias canciones que retratan cabalmente su percepción de la vida misma, al destacar una canción dedicada a las bellas personas que habitan en esos caminos de nubes, como identifica a los zapatistas y dedicar una canción que le hubiera gustado mucho a la Mtra. Amparo Ochoa.
Entre el grito de un expontáneo a manera de petición " el albañil" y responderle Soraiz bajo el mismo tono, "mejor les canto unas nuevas" entre el cobijo por el pùblico mayormente joven.
Una de las complicidades fue la presencia de un respetuoso admirador y seguidor del trabajo creativo hecha canción del "José Alfredo Jimenez potosino", como lo describió el soledense del Sax, quien acompañó a Soraiz con su saxofón, deleitándonos con una serie de sonoridades y de esta forma se iba develando una velada que aun traería muchas sorpresas, como fue en su momento la participación de Dante en los teclados.
Entre los preludios del acomodo de instrumentos estuvo la selecta de Street Roots, para dar la bienvenida a esta querida caterva de músicos como los nombra cariñosamente el Mtro. Soraiz, no solo va para los Pamalanga con su world music que hicieron con propuesta el aumentar la emoción de los presentes, aunado con los aplausos y una sabrosa vibra en este Coloso de Villerías. Quienes nos ofrecieron un set de rolitas de su propia creación, así como una del Mtro. Soraiz y un cover a su estilo de Perfume de Gardenias.
Retoma nuevamente el escenario David Soraiz e invitó a "otro honor", nos referimos al cantautor del Barrio de San Miguelito, Carlos "Carlitos" Hernández quien junto con Carolina Foyo interpretaron una rolita de su propia autoría dedicada a su hija, así como una de David Soraiz.
Cerró la velada, la banda de reggae-dub, Pachamama, para detentar una cadencia, energía y un punch de música consciente que incidió en invitar al final a todos los músicos que participaron, claro sin la inevitable participación de David.
Un escenario que irradiaba una fraternidad que pocas veces se puede apreciar, donde fuimos testigos los asistentes de esta buena energía que se gestó en este bello e histórico espacio.
Un David Soraiz emocionado, agradecido tanto por la respuesta de las bandas que integran este colectivo, así como el público, por su apoyo y confianza en ser parte de este proyecto muy sustentable y dejar que el protagonismo sea por si misma la música misma.
Para culminar con una emotiva porra al Arcano Mayor, quien sencillamente agradece y no deja de hacerlo para cerrarse el telón de este Coloso de Villerías.
Desde acá, solamente gracias a la Otra escena por degustar este manjar musical y esperemos se disemine a otras partes no solo de nuestro estado, sino más allende de...
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