Opera prima Danza

Por: Héctor Garay

Este fin de semana inicia una segunda temporada del programa de televisión Opera Prima de Canal 22, en esta ocasión dedicado a la danza y en especial al ballet. Su intención es descubrir y promover nuevos talentos del ballet, difundir su práctica y formar nuevos públicos. Grandes responsabilidades para una emisión de televisión, propósitos que deberían caer en una política cultural más amplia. Veamos por partes, empecemos por el último propósito, el más ambicioso y por tal más complejo.

Parece ser que como consecuencia de los resultados de la Encuesta Nacional de Hábitos y Consumo Culturales, toda actividades de las instituciones culturales se expresa en tono de "formación de públicos" y eventos populares para aumentar las estadísticas. Tener mucho público no significa formar públicos; que miles de espectadores miren una emisión televisiva de ballet, no asegura que se conviertan en aficionados, conozcan la cultura de esta disciplina ni que quieran practicarla.

Además de dar a conocer la disciplina artística es necesario una serie de mediaciones y de posibilidades para poder practicar y disfrutar la danza. Sabemos el ballet necesita de ciertas condiciones para su acceso. Aunque los cubanos ya demostraron las posibilidades de su masificación.

Entonces es más viable que Opera prima Danza sirva para descubrir talentos, que ya fueron avizorados por Cuauhtémoc Nájera, director artístico del programa, que con buen ojo clínico y profesional, vio en las audiciones mucho talento. Un factor extra que se trató de jóvenes provenientes de todo el país, lo que confirma el

El problema llega en la incorporación a escuelas y compañías profesionales. Destacadas maestras ya han señalado un sistema limitado de enseñanza y promoción de este arte, que no innova y que perpetua práctica de hace décadas.

En fin, no exijamos demasiado a un programa que tiene la virtud de dar otra mirada a los reality show, que permite un vistazo a la vida cotidiana del artista, en este caso el bailarín para desacralizarlo y así poder llamar la atención de las personas.

Y la otra ventaja es que la T.V. dedique un programa a la danza. Muy a menudo utilizadas las imágenes de bailarines como cortinilla, como fondo y escenografía por los medios de comunicación, pero pocas veces como el tema principal de una emisión.

Buena suerte y todo el éxito a los participantes y organizadores de Opera Prima Danza ya de por sí una acertada iniciativa que ojalá despierte interés en los televidentes. www.hectorgaray.wordpress.com