Por: Roberto A. Valenciano Capín
Bajo la premisa de ofrecer una serie de canciones que "creemos y que tienen una razón de ser", así definió su presentación en estas capital potosina, uno de los más fuertes representantes del son arribeño, Guillermo Velázquez y sus Leones de la Sierra de Xichú, en conjunción con el proyecto de reggae queretano de Las Prodigiosas con el concierto “De la valona al rap y de la palabra al son”.
Con un espacio muy propicio para la “huapangueada” como la pequeña explanada-escalinatas- del Coloso de Villerías, se propagó su tradicional y peculiar estilo de,Guillermo Velázquez y Los Leones de la Sierra de Xichú quienes a través de la palabra bien fundamentada y la afinidad de esa oralidad contemporánea basada en un sólido molde mucho más antiguo como es el son arribeño, cuestionan los decires de la vida y su gente.
De ahí que como trovador le preocupa "el hacer sentir que una tradición como la nuestra, tan antigua y tan vigente también, no tiene un prejuicio en dialogar con algo que es muy juvenil como es el rap, así como ser responsable que la palabra tiene que ser verdadera, tiene que ser lo más poderosa posible. Ya que como poeta hay que preocuparse por sustanciar la palabras, más en estos tiempos de tanto manoseo y de tanta oscuridad y de tanta confusión."
Ya que la palabra en la tradición del huapango arribeño es definitoria, la palabra es decisiva, la palabra es el peso específico de la tradición como ninguna en nuestro país. En ningún género la palabra del poeta tiene el peso específico que tiene en el huapango arribeño".
En esta ocasión compartieron el escenario con la banda queretana de La Prodigiosa Roots, una alquimia de reggae, Hip-hop, reggae, rocksteady, jazz, funk y huapango retratan en sus letras tratan de reflejar la realidad de lo que pasa y lo que tiene que cambiar ante la existencia de un sistema dominante que nos sofoca.
Al ofrecernos en esta tarde rolitas de nueva creación como: -corres, -caminos de sal-vámonos, quien además compartieron el micrófono a Don Guillermo Velázquez para crear en el momento la delicia de las décimas que caracterizan al son abajeño con esta alquimia musical que ofrece esta banda queretana.
A través de un selecto recorrido de las más 100 canciones, cientos de poesías decimales y compilador de libros publicados sobre la tradición del huapango arribeño del trovador de la Sierra de Xichú , cautivaron al público presente, ya sea sentados en las escalinatas del Teatro de la Paz o, parados escuchaban con atención, reían ante las singulares pero cautivantes parodias a través de la décima, donde sin más entra la sutileza misma de provocarte viajar a través de la frondosidad y la certeza de la palabra que pocos son los dichosos en hacerlo.
Al ser más de tres décadas que Guillermo Velázquez y los Leones de la Sierra de Xichú decidieron tomar la ruta de la poesía y la crónica popular mediante el huapango, que en sus palabras es" uno de los factores de referencia identidaria más poderosos", al ser arropado por la experiencia y sensibilidad de los viejos músicos y trovadores, y empujados por el deseo de manifestar musicalmente sus preocupaciones por las problemáticas sociales, políticas y culturales no solo del país sino mundialmente.
Reconoció que este tipo de música sigue teniendo un lugar dentro del gusto de algunos jóvenes, " porque habrá a otros que les gustará más el movimiento alterado, que es lo más estúpido que puede haber en este momento".
Así como recordar a aquellos que ya no están presentes en los escenarios, pero que si están en nuestros corazones, reza el trovador a sus maestros y amigos que se han adelantado en el camino, como : Don Antonio García, Andrés Turrubiartes, Chapo Méndez, Ramón Gómez, Toño Escalante por citar algunos.
Una forma de transformar el presente, "ya que las tradiciones sin ser eternas, casi solas se revitalizan, precisamente porque son seres vivos. Yo no comparto esa angustia metafísica o antropológica, ya que desde que he empezado a tocar vengo oyendo que el rescate y que están en peligro de extinguirse y que están agónicas. No es cierto, cosas como estas de juntar el rap con la valona arribeña , revitaliza a las dos cosas" asevero el trovador de la Sierra de Xichú.
De ahí que el arte cuando es verdadero, lo es de por si, al conjuntarse a través de la evocación y a la vez decirse muy emocionado por este concierto memorable y entrañable, al agradecer a todos los ahí presentes por estar apoyándolos y demostrar que el son arribeño sigue muy vivo.
Para despedirse con una interesante pieza titulada -Rosauro, el pregonero-siendo su primera parte dentro del tradicional son arribeño, para después fusionarse con la sonoridad del ska de la Prodigiosa Roots y volverse una versión de topada que provocó que el ahí respetable aplaudieran y agradeciera.
Con un ¡quieren otra, si quieren aquí nos amanecemos, por nosotros no hay problemas! para arrancarse con un tradicional son arribeño para invitar a que la gente bailará y encadenarlos con dos piezas más y así dar por concluida esta topada muy singular.
Dentro de su extensa discografía, se encuentra su más reciente producción que se titula " Porque México esta en pie", de ahí que lo experimental fue el juntar la poesía decimal con la música sinfónica creada por Jorge Pichardo, ex- integrante de Zazhil a través de una cantata basada en el son arribeño y que gira entorno al bicentenerio, sobre la que Guillermo Velázquez se baso en una serie de relato sobre la independencia y revolución y, hacer una versión para el rancho de esta cantata. Al incluir también dos canciones sinfónicas: -canción de batalla- y una basada en un jarabe arribeño.
De esta manera contribuyen que en el escucha que "la lírica decimal junto con la música sinfónica pueden producir emociones inéditas y la vez invitar a la posibilidad y las ganas y la decisión de hacer fiesta, de sentirnos vivos, de trascender los tiempos oscuros que vivimos y entre todos como familia y como país que ya no vivamos más desarticulados, dispersos y que seamos capaces de tomar decisiones juntos para que algo suceda en este país que deberás les de un vuelco a las cosas".
Aunque lo han hecho tasajo, México en su corazón es otra revolución que ya crece desde abajo".
