viernes, 19 de agosto de 2011

Voces narrativa y poética: "Sábato. En esos instantes" y "la Muerte tiene los días contados", fueron presentados en estas tierras potosinas



Por: Roberto A. Valenciano Capín

A partir de narrar desde un lugar sin reserva alguna, arriban dos escritores a estas tierras potosinas, unas voces que se trazan desde la novela de ficción -Sábato.En esos instantes-y desde la poesía misma-la muerte tiene los días contados- en la pluma de Esteban Ascencio y Mario Meléndez, respectivamente.

De esta manera prosigue con éxito el ciclo- la palabra tiene la palabra- que organiza el departamento de literatura del IPBA que coordina el escritor José Humberto Chávez. En esta ocasión se tuvo la presentación de estos dos proyectos literarios bajo la cordialidad de Chile y México.

Al tener en esta sesión literaria, los pertinentes comentarios corrieron a cargo de los escritores; Félix Barbosa y Saúl Castro en torno a las obras presentadas en esta noche en la galería Antonio Rocha Cordero del IPBA.

Un -Sábato. En esos instantes-. Un libro en el que observa y detecta muy bien Félix Barbosa la grandeza de este escritor sudamericano, al definirlo como uno de los principales escritores de la lengua castellana del siglo XX, aún cuando "el apellido aun en sí resulta una sentencia y aunado al nombre del título se trona un objeto cautivador el de encontrarse con los acontecimientos uno a uno que fueron haciendo crecer una figura muy grande como es Ernesto Sábato".

Así como también reflexiona en torno a este libro de largo aliento contenida en treinta y cinco capítulos "crece sobre una estructura lineal con una capacidad metatextual que no solo consigue recrear sino también involucrar al lector con la principal caracteristica del personaje central , la búsqueda constante de si mismo y cuya preocupación principal es el de sondear en su alma de la humanidad y sus laberintos".

Así como trazar en un dibujo preciso a este real personaje o ficcionado u ficcionadamente real " aunque la definición en sí produzca una situación paradójica pero necesaria para comprender las obsesiones y pasiones de uno de los escritores más importantes de la lengua castellana del siglo XX".

De ahí que una de las virtudes de este libro de Asencio es para el comentarista, "el encarar al lector con el Sábato maravillado por las pequeñas expresiones de la vida o, el que intrigado incursione en las habitación oscura del hombre, en donde los sentimientos tienen rostros que ni la imaginación más clara es capaz de delinear, es decir, al Sábato escritor y también al humano; al Sábato artista pero también al individuo cuya conciencia social lo motivo a lograr la tipificación de todos esos interéses y hasta forjarlos en el desarollo peculiar de su obra literaria".

El acierto de Asencio de conducirnos hacia los caminos que el escritor recorre primero por la Plata, para proseguir por Buenos Aires más tarde o, incluso, hacia las motivaciones de Sábato para asumirse como creador o un escritor comprometido con su tiempo.

Por lo cual, Sábato cumple con creces que el lector viva con suma cercanía como es su figura, así como también agregaría " afortunadamente la novela ofrece de manera generosa la profundidad de un ser humano talento, complejo e imprevisible; ahora en estos instantes de modernidad en donde en medio de tantos reality shows el alma humana ya puede ser un elemento más del decorado parte de la utilería.

Entre la satisfacción y el asombro del escritor por haber captado muy bien la esencia de su libro y el recomendar leer este texto muy bien escrito, "porque ahora lo escucharon, pero ahora tienen que leerlo" sentencia de buena fé.

Al recomendar el leer un dossier sobre Sábato que saldrá proximamente en la revista-Casa del Tiempo- que publica la UAM, en el cual se incluyen críticas que se hacen a la novela, además de interesantes artículos sobre este escritor trazados por excelentes textos.

"Así como no quiero pasar por alto, yo siempre compartó mis lecturas, este libro muy generoso -Melmoth el errabundo del escritor irlandés Charles Maturin-, lo consideró como uno de los mejores libros que he leído y que ha sido escrito. Porque nos ofrece a todos aquellos que quieran seguir esta carrera tortuosa de la literatura nos ofrece varios estilos de narrativa; pasa de los tiempos presentes a los futuros."


En su intervención, el maestro Saúl Castro comentó puntualmente el poemario " la muerte tiene los días contados" del escritor chileno Mario Meléndez.

Confesó que se llevó una grata sorpresa en su primer acercamiento con el trabajo de este poeta chileno, al encontrar una gama y torrentes de imágenes, así como encuentras una gama impresionante de alegorías.

De ahí que el responsable del área de literatura en el Centro de las Artes de forma inmediata da fé de su encuentro de la muerte, "generalmente cuando alguien habla de la muerte tienes que pensar que debe de ser solemne, debe ser triste o tiene que ser una pérdida, lo cual es todo lo contrario".

"Generalmente hay escritores, siendo Fernando Vallejo uno de ellos que menciona a la muerte de una forma muy coloquial y hay dos páginas que habría que buscar y en donde se dedica a citar todos los nombres de la muerte y habla de la fría, del frío, de la levantada, el levantado, dando un compendio más o menos ochenta o noventa nombres que se le conoce en Colombia".

Mario Meléndez retoma la muerte o el acontecimiento de la muerte desde su parte popular, esta parte de la cultura urbana que conocemos es y como cultura como tal es muy visual, "de hecho la muerte en el libro de Mario Meléndez es un personaje".

Por lo tanto, podemos disfrutar que estos poemas brindan al lector esa posibilidad de imaginar escenas, imaginar perfiles psicológicos, imaginarnos de pronto la muerte empieza a dialogar con alguien e incluso con una carga fuerte de sarcasmo.

La muerte como personaje en algunos poemas se vuelve la vecina fiestera, en otros casos es la mujer celosa, la amante, es la desquiciada, es el ápostol y es el Dante.

"De esta manera no hay que malentender el sentido de los poemas de Mario Meléndez, no es un libro de teca, te causa cierto humor ya que es el vehículo que utiliza perfectamente, no es big bang literario, sino esto nos habla de que en realidad el humor en Mario Meléndez es el vehículo para encontrar y explorar el tema de la muerte y lo descubre de una manera obviamente profundo"

"De ahí que el humor devela lo que somos, lo que pensamos y lo que queremos ser.Así como también los poemas desacralizan las figuras de autoridad, encontramos por ejemplo poetas, políticos, encontramos santos y encontramos incluso telenovelas venezolanas".

Para ceder el micrófono para el poeta chileno, en conjunción de que - al final de la gramática empieza el arte- como decía Enrique Sureña, en su propia voz traza sus poemas que se desgranan de sus poemarios presentado y de El circo de papel: -la muerte lloró a los pies de Jesús-, -la muerte robó los zapatos de Dios",- la muerte quiso ser Salomé-,-la muerte perdió la razón-, -la muerte habló con Michael Jackson- y cerró esta sesión con- mi gato quiere ser poeta-.

LA MUERTE TIENE LOS DÍAS CONTADOS
Mario Meléndez

La muerte pidió que la cremaran
y esparcieran sus cenizas
sobre todos los vivos

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