Por: Roberto A. Valenciano Capín
Una sonrisa que se hace extensiva a esas miradas de complicidad que inciden en una conversación entre tres amigos musicales, bajo la pauta del jazz fusión propuesto por la banda de Héctor Zarate Trío en el Museo Nacional de la Máscara potosino.
Allí estaban Eduardo García sonriendo desde la batería, con Héctor Zárate en la guitarra y Luis Ariel Cárdenas en el bajo en este lobby de dicho recinto cultural.
La cual de ipso facto se convirtió en una amena charla hecha no solo de notas, sino de la vitalidad de sus integrantes fundamentada en una parte sustancial como es la alegría de tocar y a la vez compartir su música originario de Saltillo, Coahuila.
Todo bajo el ipso facto detonador del jazz fusión al explicar su creador que simplemente es volverlo un estado gozoso, " pasa una cosa, la gente piensa en jazz y piensa en algo muy formal, de gente rica e intelectuales y realmente yo pienso que la gente no se ha dado cuenta que le gusta el jazz porque desafortunadamente hay que buscar la música honesta y autentica, porque los medios te dan algo que aparece como jazz o te lo vende como jazz".
"Esto que hicimos, lo hicimos pensando en ser felices y hacernos felices dentro de la banda, después de esto yo creo que por rebote disfrutas tu como espectador" comenta.
Al volverse un acto premeditado o no de o " lanzarte al vacío sin red, tienes que resolver de la manera mas feliz posibles las cosas y eso es un ejercicio que hacemos continuamente en el trío".
Sin olvidar que el jazz es un viaje introspectivo, es cerrar los ojos y mirar hacia adentro y sacar lo que encuentras ahí.
Al refrendarlo y como lo refirió en su momento el gran Ornette Coleman: " La música existe, nosotros somos solo un conducto nada mas y de algún modo interpretamos".
Zarate aspira en un momento dado realizar conciertos completos como lo hace Keith Jarret o Ornette Coleman, con improvisación libre, "eso es una locura y mi objetivo".
Aunque reconoce que él no nació en el Bronx de Nueva York, su formación fue otra; a través del bolero y todo lo que ha escuchado a lo largo de su vida, viene a volcarse en el jazz, un género en el que impactan sufrimiento, ritmo, intimidad e intensidad.
A pesar de esta dualidad que lo converge: el espíritu afable como creador y esa chispa que responde al saberse que el jazz ha sido una de las mas intervenidos, sin embargo para Héctor Zarate esta preserva una esencia que simplemente lo trasmina a través de la improvisación, como el lo llama " la creación súbita del jazz".
Destaco que a pesar de que no estar acuerdo con darle una entidad geográfica al jazz pero si reconoce que si podría haber cierta personalidad, al comentar que " a mi todavía no me acaba de cuajar esta parte que lo hacia la anterior generación que son muy buenos músicos, excelentes compositores y excelentes interpretes como Eugenio Toussaint, Enrique Nery que desarrollaron un estilo como de jazz mexicano, como que se marco una pauta. Lo que me gusta ahorita es que se esta diversificando el jazz en México.
Así como resaltó esta valentía de esta generación que va de los 22 hasta los 3O años que a lo mejor un poco por su inconsciencia de la edad o de la generación misma van a dejar cosas muy interesantes en el paso. "Nosotros estamos entre lo tradicional y lo de reciente creación".
De ahí que se cumple esta premisa de esta magia de hacer interesante a la música es siempre ir atrás de algo.
En donde el público fue testigo y cómplice al encontrar esos momentos de gran emoción y la sensibilidad con un fuerte sentido del swing bajo el pretexto del funk y lo que fluya en el momento.
Al ofrecer una travesía que transito por estándar muy al feeling de este joven trío de jazz coahuilenses y la plena improvisación: -All Blues- de Miles Davis, -Noruega Woods- de The Beatles, - Jam basado en la improvisación de la batucada que se dejaba escuchar afuera del Museo, - Canon-de Charles Mingus, - Take Five de Paul Desmond, - Improvisación bajo el let motiv de Chicken de Pastorius en donde se tuvo como invitado al buen bajista y amigo de la banda César Cuevas y terminar esta sesión jazzística con -Everybody Party- de John Scofield.
En cuanto a tanto los retos que conllevaron a la grabación de su primer trabajo discográfico realizado en el 2011 de título homónimo-fue el aprender a hacer un disco y en lo musical fue mas bien como el recopilar composiciones que se fueron generando y que le fueron gustando a lo largo de los últimos trece años para dar como resultado este primer disco y ser distribuido por la disquera regiomontana Asenath Recording, especializado en el metal.
"Me gusta porque tiene un poco el sentido de las influencias que tuve en ese tiempo que van desde el bossa nova, el funk, el rock, el blues, el progresivo, el cool jazz y claro sin olvidar el jazz clásico.
Entre los proyectos para este trio se encuentran trabajando en la profundidad de la música, más interiores en el sentido de este estudio a conciencia de los grandes maestros del jazz.
De ahí generar este juego con las composiciones establecidas y a partir de ellas darles la oportunidad a lo que se integran o convoque a este proyecto para que sea su aportación en ese momento.
Para más información pueden checar en: Facebook: Héctor Zarate Trío, en reverbnation.
"Esto que hicimos, lo hicimos pensando en ser felices y hacernos felices dentro de la banda, después de esto yo creo que por rebote disfrutas tu como espectador" comenta.
Al volverse un acto premeditado o no de o " lanzarte al vacío sin red, tienes que resolver de la manera mas feliz posibles las cosas y eso es un ejercicio que hacemos continuamente en el trío".
Sin olvidar que el jazz es un viaje introspectivo, es cerrar los ojos y mirar hacia adentro y sacar lo que encuentras ahí.
Al refrendarlo y como lo refirió en su momento el gran Ornette Coleman: " La música existe, nosotros somos solo un conducto nada mas y de algún modo interpretamos".
Zarate aspira en un momento dado realizar conciertos completos como lo hace Keith Jarret o Ornette Coleman, con improvisación libre, "eso es una locura y mi objetivo".
Aunque reconoce que él no nació en el Bronx de Nueva York, su formación fue otra; a través del bolero y todo lo que ha escuchado a lo largo de su vida, viene a volcarse en el jazz, un género en el que impactan sufrimiento, ritmo, intimidad e intensidad.
A pesar de esta dualidad que lo converge: el espíritu afable como creador y esa chispa que responde al saberse que el jazz ha sido una de las mas intervenidos, sin embargo para Héctor Zarate esta preserva una esencia que simplemente lo trasmina a través de la improvisación, como el lo llama " la creación súbita del jazz".
Destaco que a pesar de que no estar acuerdo con darle una entidad geográfica al jazz pero si reconoce que si podría haber cierta personalidad, al comentar que " a mi todavía no me acaba de cuajar esta parte que lo hacia la anterior generación que son muy buenos músicos, excelentes compositores y excelentes interpretes como Eugenio Toussaint, Enrique Nery que desarrollaron un estilo como de jazz mexicano, como que se marco una pauta. Lo que me gusta ahorita es que se esta diversificando el jazz en México.
Así como resaltó esta valentía de esta generación que va de los 22 hasta los 3O años que a lo mejor un poco por su inconsciencia de la edad o de la generación misma van a dejar cosas muy interesantes en el paso. "Nosotros estamos entre lo tradicional y lo de reciente creación".
De ahí que se cumple esta premisa de esta magia de hacer interesante a la música es siempre ir atrás de algo.
En donde el público fue testigo y cómplice al encontrar esos momentos de gran emoción y la sensibilidad con un fuerte sentido del swing bajo el pretexto del funk y lo que fluya en el momento.
Al ofrecer una travesía que transito por estándar muy al feeling de este joven trío de jazz coahuilenses y la plena improvisación: -All Blues- de Miles Davis, -Noruega Woods- de The Beatles, - Jam basado en la improvisación de la batucada que se dejaba escuchar afuera del Museo, - Canon-de Charles Mingus, - Take Five de Paul Desmond, - Improvisación bajo el let motiv de Chicken de Pastorius en donde se tuvo como invitado al buen bajista y amigo de la banda César Cuevas y terminar esta sesión jazzística con -Everybody Party- de John Scofield.
En cuanto a tanto los retos que conllevaron a la grabación de su primer trabajo discográfico realizado en el 2011 de título homónimo-fue el aprender a hacer un disco y en lo musical fue mas bien como el recopilar composiciones que se fueron generando y que le fueron gustando a lo largo de los últimos trece años para dar como resultado este primer disco y ser distribuido por la disquera regiomontana Asenath Recording, especializado en el metal.
"Me gusta porque tiene un poco el sentido de las influencias que tuve en ese tiempo que van desde el bossa nova, el funk, el rock, el blues, el progresivo, el cool jazz y claro sin olvidar el jazz clásico.
Entre los proyectos para este trio se encuentran trabajando en la profundidad de la música, más interiores en el sentido de este estudio a conciencia de los grandes maestros del jazz.
De ahí generar este juego con las composiciones establecidas y a partir de ellas darles la oportunidad a lo que se integran o convoque a este proyecto para que sea su aportación en ese momento.
Para más información pueden checar en: Facebook: Héctor Zarate Trío, en reverbnation.
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