Dan respiro a foro

 

 

El edificio que alberga al teatro está catalogado por el INBA por su valor artístico. Foto: Héctor García

Por: Francisco Morales V.

 

 

A los pies del vitral de Manuel Felguérez que corona el Teatro Casa de la Paz, desde la cara de adentro, se contempla una extraña ofrenda: boca arriba, el cuerpo de un ratoncito descansa, en el suelo, sobre una cama de polvo y los camerinos acumulan escombro.

 Todo es un paisaje ruinoso. La butaquería se ha ido, el escenario está desnudo, sin maquinaria teatral ni telones y los camerinos acumulan escombro.

 

 

Han pasado más de tres años desde que el teatro cerró sus puertas por los riesgos que su avejentada estructura, en caso de sismo, ocasionaba a sus espectadores.

En marzo de 2012, un temblor de 7.8 grados Richter dañó al edificio que ha estado en poder de la UAM por decreto presidencial desde 1980, pero que ha sido teatro desde 1965. Antes de eso, fue el ya mítico Cine Condesa, fundado en los años 20.

Hoy, el foro de la Roma Norte recibe una segunda oportunidad, con miras a una reapertura al público el segundo semestre de 2017.

 

La UAM consiguió un recurso por 20 millones de pesos, a través de los etiquetados de la Cámara de Diputados, que habrá de servir para su rehabilitación.

 

Actualmente, sólo se espera un visto bueno del INBA, que debe velar por el vitral de Felguérez, y una escultura de Manuel Larrosa, para comenzar con las licitaciones que den inicio a los trabajos.

 

De acuerdo con el proyecto de la universidad, titulado "Teatro Casa de la Paz; modernización y reapertura de un foro cultural representativo de la Ciudad de México", el dinero que se tiene actualmente representa un 33 por ciento de lo necesario para que el lugar pueda reabrir sus puertas.

Ésta, no obstante, es una cantidad provisional hasta que se licite un proyecto ejecutivo que permita saber el monto real para reparar la estructura del edificio, remodelar algunos aspectos de su arquitectura y modernizar su lobby y mecánica teatral.

 

El trabajo es titánico, pero el Teatro Casa de la Paz nunca ha estado más cerca de su reapertura. 

 

 

En 2014 perdió un recurso etiquetado para el foro por 5 millones de pesos, cuyo registro consta en el Presupuesto de Egresos de la Federación.

 

 A decir de la UAM, ese dinero para el teatro fue gestionado a través de una fundación de ex alumnos, que no dio el seguimiento adecuado al recurso, mismo que, aseguran, jamás llegó a la institución.

 

 "No considero que se pueda hablar de omisión de la institución", considera David Díaz, su director de Comunicación Social. "Hablar de recursos implica procesos. Adicionalmente al teatro, que es un foco rojo, tenemos asuntos en paralelo, como la Unidad Lerma y Cuajimalpa, que tienen alumnos".

 

 De acuerdo con Díaz, el cierre del teatro en 2012 propició que la UAM hiciera una revisión de las estructuras en todos sus planteles, encontrando así edificios necesitados de intervenciones. A estos otros trabajos, relata, se les dio prioridad, pues eran espacios que recibían alumnos.

 

 "Aquí requeríamos una alianza estratégica", dice sobre la colaboración con la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, que está detrás de la gestión de recursos.

 

 Al respecto, la crítica teatral Luz Emilia Aguilar, quien forma parte de un sector de la comunidad que se ha pronunciado enérgicamente por revivir el foro, celebró la voluntad para superar el impasse para conseguir recursos.

 

 "Aquí yo tendría una mirada optimista", refirió. "Lo que veo es que, cuando las instituciones dialogan, cuando distintas fuentes de presupuesto y de impulso a la cultura se ponen de acuerdo, sí se logran recursos".

 

 Asimismo, dio un voto de confianza por que la UAM y la Secretaría de Cultura capitalina podrán recabar los recursos adicionales a los 20 millones de pesos.

 

 En el convenio firmado en diciembre entre ambas instituciones, del que este diario posee una copia, la UAM está obligada a utilizar cada centavo en el teatro y debe reportar continuamente los gastos a la Secretaría, dependencia que, por su parte, podrá tener programación de su sistema de teatros en dicho foro y está obligada a ayudar con la difusión de todas sus obras.Podría, sin embargo, terminar el acuerdo si hubiese una reestructura fuerte de sus programas.

 

En un recorrido por el inmueble, el director de obras de la UAM, Javier Palomas, enumeró los estudios que se le han realizado al edificio y el procedimiento a seguir para rehabilitarlo.

 

Actualmente, la universidad espera que el despacho Colinas de Buen S. A. de C. V. entregue una nueva batería de estudios, solicitados por la Dirección de Arquitectura y Conservación del Patrimonio Artístico Inmueble del INBA, que deberá autorizar los trabajos.

 

Una vez con ellos, informa Palomas, se licitará un proyecto ejecutivo y después se buscará a la compañía para las obras. Si el INBA aprueba la intervención en marzo, según se estima, podrían comenzar los trabajos en junio, ya con el proyecto ejecutivo listo.

 

 Al interior de todo el teatro se han realizado calas (rompimientos en la pared para conocer su composición) y se juzgó endeble la estructura. Por ello, la primera intervención deberá reforzar las columnas y muros, además de sustituir la techumbre.

 

Posteriormente, se deberán realizar adecuaciones arquitectónicas y, por último, colocar una maquinaria teatral más moderna. Todos los trabajos deberán estar supervisados por el INBA, que tiene catalogado el inmueble como de valor artístico.

 

Por el momento, se espera que los 20 millones alcancen para su reestructuración. Después se buscarán más recursos.

 

Si todo sale de acuerdo al plan, el Teatro Casa de la Paz podría reabrir por fin al público tras una pausa de prácticamente cinco años.