Es un espacio que va en la búsqueda y a la vez de la difusion de aquellas voces creativas en cuanto al despliegue de su forma de ver y exponer el mundo en que vivimos. De ahí que hablen por si mismo, desde su trinchera que puede ser musical, dancístico como literario, no solamente en este no tan agreste terreno del Tunal Grande, sino más allende de...
jueves, 15 de septiembre de 2016
Literatura y Nacionalismo. Mendelssohn y Huízar: OSSLP
Por: Roberto A. Valenciano Capín
Aún cuando no fue una noche de verano, si lo fue con una tarde veraniega potosina en el Coloso de Villerías, en donde la Orquesta Sinfónica de San Luis Potosí, bajo la dirección del Mtro. José Miramontes Zapata dio inicio de la temporada Otoño - Invierno 2016.
Una tarde en donde se interpretó por primera vez en nuestra ciudad de la Sinfonía No. 4 "Cora" del compositor zacatecano, Candelario Huízar y ser complementado por una buena selección de -Sueño de una noche de Verano" del compositor alemán, Félix Mendelssohn
Con una selección de esta música escrita para el drama literario "Sueño de una noche de Verano" de William Shakespeare, un acierto en cuanto a esta selección de piezas que hace al escucha poder viajar por está travesía musical: Obertura, Scherzo, Intermezzo: final del segundo acto (Allegro Apassionato), Nocturno y Marcha Nupcial.
Considerado Candelario Huízar García de la Cadena como uno de los compositores más influyentes del llamado nacionalismo musical mexicano y un orquestador de primer nivel. Nació el 02 de febrero de 1883 en Jérez de García Salinas, Zacatecas y falleció el 3 de mayo de 1970 en la Ciudad de México.
Con esta pieza sinfónica, le apuesta a la deconstrucción musical a partir de capas sonoras, cuya materia se entreteje a partir de este misticismo y la belleza de sus paisajes que se conjuga en estas tierras del Nayar, de esta manera lograr describir con tal puntualidad las festividades y la riqueza de la cultura Cora y su mestizaje.
Fue tal la contundencia de esta obra sinfónica que incidió en un acucioso aplauso del público, para provocar el salir tres veces al director de la Orquesta Sinfónica potosina, quien ofreció como agradecimiento-encore-, el cuarto movimiento: Largo Allegro moderado de la Sinfonía No. 4 de Candelario Huízar.
Siendo testigos de este hecho histórico musical en estas tierras potosinas, familiares de este fundamental compositor del devenir de la música nacionalista de concierto.
Para el musicólogo, Luis Fernando Padrón Briones considero que " el patrimonio sonoro mexicano es muy muy grande, sino nos atenemos a una centuria de solamente el siglo veinte, tenemos no menos de quinientas obras sinfónicas de las cuales conocemos cinco o quizás diez y de autores muy seleccionados; conocemos algo de la obra de - Carlos-Chávez, algo de la obra de Revuelta, algo de la obra de -Pablo- Moncayo y algo de la obra de-Blas- Galindo solamente".
Al aseverar que tenemos autores tan importantes como Candelario Huízar, quien nos ocupa. "Sabemos que es el más grande orquestador que ha tenido nuestro país, al que todos le consultaba, al que todos le pedían algún consejo, una corrección a sus obras; esto lo sabemos si leemos las cartas del mismo Moncayo, de Blas Galindo o de todo este grupo que para nosotros son como los nacionalistas más importantes".
Destacó que este compositor zacatecano es " un autor atemporal, porque lo puedes ubicar dentro de un discurso nacionalista, como la generación de Carlos Chávez, como la generación de los Moncayo y los Galindo, pero también es un hombre que está insertado en las músicas viejas del siglo XIX y que se está abriendo a las músicas contemporáneas del siglo XXI, a pesar de que su espacio - tiempo no es tan delimitado, ya que el maestro vivió lo suficiente y no murió tan pronto como Moncayo; quizás si Moncayo hubiera vivido más tiempo, hubiera ido a otros discursos. Que si la producción de Candelario Huízar es muy extensa, si, pero tenemos que descubrirla, pero si nosotros comparamos con los años que vivió es una cantidad mínima de música, ¿porqué?, porque no empieza a componer en un primer momento; él tiene todo un proceso como ejecutante, empieza en las bandas de su pueblo, se va tanto a una banda militar como una banda presidencial, ingresa al Conservatorio de Música, comienza a dar clases de percusión y comienza a dar clases de solfeo, entonces el tiempo que le queda es más reducido y más corto, pero aún con ello el catálogo es inmenso en el sentido tiempo. Si tú ves en el sentido calidad, yo creo que si hubiera escrito está obra -Sinfonía No.4 "Cora", ya tendría un lugar importantísimo dentro de la música sinfónica en el siglo XX, no mexicana, sino de la música sinfónica del siglo XX a la par de compositores que estaban trabajando de nuevo ya no en un nacionalismo sino el retomar al valorar las danzas y, empiezan a llevarlas a un discurso contemporáneo. De ahí que Huízar sería una figura del sinfonismo del siglo XX, al cual hay que valorarlo desde está estética, -abogó - vamos a quitarle esta estética nacionalista que tiene y es muy importante, pero hay que colocarlo en la estética de la música sinfónica del siglo XX, para poder equipararlos con estas figuras y darle el lugar no que merece sino, el lugar que tiene porque la música ahí está, hay que escuchar su música, sí".
Para Padrón Briones es fundamental esta necesidad que se legalice las orquestas que se manejan con recursos públicos y por tanto programen música mexicana, de ahí viene la primera necesidad u obligación y comentó "no es posible que se trabaje con fondos del erario público mexicano y solo se programe música europea".
De esta manera destacó más que un acierto de la Orquesta Sinfónica potosina en la ejecución de esta obra del Mtro. Candelario Huízar, al describir esta obra sinfónica como "un fresco estético-sonoro de México al menos del siglo XX; es como una instantánea de México, es como si te subieses a un satélite y le tomarás una fotografía de acercamiento a todo el territorio. Escuchas lo mismo las músicas del Norte que están ahí muy constantes, pero también escuchas un poco la música de la costa, un poco de la músicas marítimas o de las músicas marítimas del norte".
Una obra integrada por cuatro movimientos totalmente contrastados. "No hay un solo movimiento que sea igual, no hay una secuencia lógica por decirlo. Si tú escuchas el primer y el último movimiento puede que no haya una correlación directa, pero si escuchas el segundo y el cuarto mucho menos hay correlación".
Quien hace énfasis en el segundo movimiento, al hacerlo a través de una analogía, "es como irse a esos pueblecitos muy pequeños, muy pequeños- acota-. Yo use en específico Santa María del Río, como esta imagen, en donde vas con estas procesiones de entrada de cera para sus santos y que llevan estas músicas casi calladas, porque la música tiene que existir y que tiene que ir acorde con la piedad de la gente, ves la piedad reflejada en sus rostros y escuchas las campañas soñando de manera muy específica para llamar a la entrada de la cera. Creo que puede ser este fresco evocativo".
Fue muy claro, respecto a esta Sinfonía No. 4 "Cora", en volverse en una invitación a "conocer una obra importantísima de la musical nacionalista que-desafortunadamente- no se toca, el cual es un punto a vencer y a la vez inquirir en poder escuchar una música que no conocemos, pero aun así, se incide en provocar "vamos a conocer a como suena, independientemente de que sea buena o sea mala, no podríamos juzgarla porque no la conocemos".
Así como abogar por la estrategia de ser conocido y a la vez ser reconocido, sería el soltar -esta obra- a los grandes públicos, la cual fue previamente grabada, sin hacer dejo de esta premisa que la música en vivo es mucho mejor y por tanto es importante que "los grandes públicos lo escuchen y que digan que es eso, porque obviamente no todo el público estuvo en el concierto. Entonces que lo escuche y que digan ¿Qué es?, ¿Qué es eso que está sonando?.
Fue muy claro entorno a este desapego de los públicos, al preguntarse: ¿Quieren seguir escuchando la novena sinfonía de Beethoven, Carmina Burana de Karl Orff, obras muy específicas? a pesar de que no se tiene el interés de escuchar otro tipo de músicas o de decirse ¿a qué suena?.
Por consiguiente, cuestiona que quizás para los grandes públicos esta música ya no le resulte evocativa, porque no ya conoce su país, sin embargo "tienen un conocimiento muy superfluo de lo que es el país. Entonces tú quieres representar al país, volveré a lo mismo, con el Huapango de Moncayo y Sones de Mariachi, porque es lo que te representa hacia afuera; los sones veracruzanos y los sones jaliscienses".
Cabe señalar que durante esta temporada de Conciertos, la OSSLP alternará sus conciertos en el Teatro de la Paz con presentaciones en el interior del Estado, como en los municipios de Villa de Guadalupe, Matehuala, Soledad de Graciano Sánchez, Aquismón, Ciudad Valles, Tanquián y San Vicente Tancuayalab, además de que se tiene programada por primera vez una actuación de la OSSLP en el Teatro de la Ciudad "Fernando Soler", de Saltillo, Coahuila, el próximo sábado 8 de octubre.
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