Por: Arturo Garrido
En el 2013 un grupo de adolescentes funda el grupo “El árbol de neuronas” y produce, dirige y edita el cortometraje “El viaje” y el 2014 realiza la proeza de montar, escribir y dirigir la obra “Lecciones de vuelo para dinosaurios y cocodrilos”. Una verdadera lección de dramaturgia, dirección y puesta en escena. Después vino la obra coreográfica “Rio” y otras acciones.
Este es uno de los grupos jóvenes más inventivos de San Luis Potosí, que continúan haciendo sus experimentos y acciones creativas invisibilizados por la cultura oficial.
Las instituciones en México hablan y hablan de los jóvenes, hacen programas y gastan millones en los sueldos de la burocracia que tiene que atender las demandas, necesidades y proyectos de los jóvenes.
Pero cuando se hace necesaria la acción concreta, dan la espalda y son ciegas ante las acciones creativas de esos tan mentados jóvenes.
Frente a la indiferencia Institucional, aquí tenemos al “Árbol de Neuronas” accionando su creatividad permanentemente, sin que hasta la fecha ninguna institución de cultura haga justicia a sus propias palabras.
Frente a la indiferencia Institucional, aquí tenemos al “Árbol de Neuronas” accionando su creatividad permanentemente, sin que hasta la fecha ninguna institución de cultura haga justicia a sus propias palabras.
Sin embargo, pese a la dislexia de los discursos oficiales, el “Árbol de neuronas” continúa llenando de flores y hojas creativas sus verdes ramas.
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