Un escenario tipo dark iluminado con veladoras, un audio digital que emulaba el maullido de un gato, la imagen de un cráneo y un gato en un proyector, la voz de una narradora (Diana Escutia), una actriz principal (Mary Hernández), otro actor (Adrián Gutiérrez), vino tinto y mezcal, fueron los elementos presentes durante la lectura dramatizada de la obra Autorretrato de un paisaje en tinieblas, de Violeta García Costilla, que se llevó a cabo este jueves 27 de septiembre en el Centro de las Artes de San Luis Potosí Centenario.
Posterior a la lectura dramatizada, Violeta García Costilla presentó su libro Autorretrato de un paisaje en tinieblas, publicado por Paso de Gato, la editorial mexicana con más presencia en el ámbito de publicaciones de dramaturgia en el país.
Durante el evento realizado en la Sala 2 de la Plaza Centenario del CEART, la escritora explicó parte del proceso creativo al que se enfrentó para escribir esta obra, que representa su primer acercamiento al teatro.
Dijo que antes de escribirla asistió a cursos y talleres con dramaturgos como Alberto Villarreal, Edgar Chías y Luis Mario Moncada, "mi acercamiento al teatro fue un poco por casualidad, ya que antes solamente había escrito narrativa, sin embargo, quizás en este libro hice un poco de trampa porque no es, en el sentido más puro, dramaturgia, hay prosa poética y a la vez un híbrido entre el teatro y los estilos narrativos que más me han marcado".
En Autorretrato de un paisaje en tinieblas, según se lee en el texto del escritor Josué Sánchez que aparece en la contraportada del libro, se encuentra un dispositivo donde el suicidio, blackouts, la amnesia y la sensación de irrealidad son pretextos para hablar de los límites del lenguaje en el arte.
En este sentido, la autora de Relatos Urbanos (Ediciones Sin Nombre, 2009, cuento) y Mitología de una Ciudad Enferma (Editorial Ponciano Arriaga, 2011, cuento), dijo que "hacer un producto artístico es una manera de sublimar, transformar algo que pudo ser doloroso en algo que pueda ser positivo, o en algo que pueda provocar empatía con el público".
Para la escritora Nuria Káiser, quien fue la encargada de los comentarios durante la presentación del libro, estos elementos y el cruce de estilos literarios agregan riqueza al texto "porque se trata de un antimonólogo donde el personaje femenino cruza muchas huellas de dolor y encuentra respuestas precisamente en ese dolor, en esa belleza del dolor que está presente en toda la obra", dijo.
Además de escritora, Violeta García es artista plástica y cuenta con cuatro exposiciones individuales Erótica Profana (2011), El Amor que no se atreve a decir su nombre (2011), En busca de los Paraísos Artificiales (2012), y Obsesiones (2013). Con Autorretrato de un paisaje en tinieblas, Violeta García obtuvo el Premio Manuel José Othón de Literatura 2017 del Certamen 20 de Noviembre, en la categoría de dramaturgia.
El libro se encontrará disponible a la venta en el catálogo de la editorial Paso de Gato y en librerías de todo el país.
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