Fotografía: cortesía de Edgar Gutiérrez Calvillo / FIDLL
Por: Roberto A. Valenciano Capín
Nasty (2018). Una propuesta dancística que sin más exigió esta atención ante su propia rigidez a partir de los límites del cuerpo que van siendo trazando estos estadios, ante las afrentas mismas de las propias estructuras sociales en que vivimos.
A partir de la cual, este quinteto de bailarinas inciden en este concepto de hasta donde el cuerpo es mecánico, gracias a este envolvente y reiterativo habitus, tedio, a pesar de en momentos se desvanecen los cuerpos para luego transfigurarlos en otra naturaleza, aun así, bajo esta infalible discursividad de lo femenino que inquiere, confronta, en momentos reta y evidencia este imperceptible estado de gracia a pesar de su inherente fragilidad.
De esta manera, a pesar de este constante tedio, inquiere que el espectador genere esta codificación para dialogar y ser parte con lo propuesto por la coreográfa finlandesa Susanna Leinonen, al recibir del restante público que finalizo esta densidad dancística, con este respetuoso y frío aplauso, siendo testigo, el centenario Teatro de la Paz.
Bailarines: Emmi Hakala, Tiia Huuskonen, Maria Nurmela, Tatiana Urteva y Elisa Tuovila
De esta manera dio inicio escénicamente, esta trigésima novena edición del Festival Lila López.
A partir de la cual, este quinteto de bailarinas inciden en este concepto de hasta donde el cuerpo es mecánico, gracias a este envolvente y reiterativo habitus, tedio, a pesar de en momentos se desvanecen los cuerpos para luego transfigurarlos en otra naturaleza, aun así, bajo esta infalible discursividad de lo femenino que inquiere, confronta, en momentos reta y evidencia este imperceptible estado de gracia a pesar de su inherente fragilidad.
De esta manera, a pesar de este constante tedio, inquiere que el espectador genere esta codificación para dialogar y ser parte con lo propuesto por la coreográfa finlandesa Susanna Leinonen, al recibir del restante público que finalizo esta densidad dancística, con este respetuoso y frío aplauso, siendo testigo, el centenario Teatro de la Paz.
Bailarines: Emmi Hakala, Tiia Huuskonen, Maria Nurmela, Tatiana Urteva y Elisa Tuovila
De esta manera dio inicio escénicamente, esta trigésima novena edición del Festival Lila López.
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