Por: Roberto A. Valenciano Capín
Una de las funciones de danza que refrescaron esta trigésima edición del Festival Internacional de danza contemporánea Lila López con el montaje escénico en donde dialogan el ballet, la música y la ópera, "bajo la mirada de Carmen, 2019" propuesta por Ardentia Danza, en el marco de la trigésima novena edición del Festival Internacional de Danza Contemporánea Lila López.
Esta adaptación libre o libérrima, como apunta el programa, de la ópera Carmen de George Bizet, al tener como escenario uno de las explanadas del Teatro de la Paz, para esta ocasión se transformó en este foro a partir del imaginario creativo de esta obra creada en 1840, la cual ante todo sigue vigente y siempre latente.
Una puesta en escena bajo la dirección de la Mtra. Reyna Pérez, y destacar de ser una de la única obra programada al aire libre.
Una explanada de este centenario teatro que sin más no solo remonto al espectador a estas tierras sevillanas, a partir del mito de la cigarrera, con su gran belleza volvía locos de amor a los hombres, a partir del cual converge el deseo, la pasión y la muerte.
Será por todo ello que se vuelve en una inolvidable y congruente manifestación no solo escénica, sino volverse en una experiencia empática, de apropiación inmediata, gracias a la calidad de movimientos, sin abandonar la expresividad de sus personajes que catalizaron la intensidad y congruencia trágica de esta celebérrima ópera, como esta problemática que sigue latente, a pesar de las dificultades técnicas tanto por el espacio como por su interpretación. Aun así, fue muy agradecida por un cálido y extendido aplauso del respetable que lo disfrutó plenamente.
Aun así, queda esta impronta de esta versión en la memoria de los que disfrutaron esta tarde/ noche, así como gracias a los co creadores que le dieron sustancialidad a esta puesta escénica:
Una puesta en escena bajo la dirección de la Mtra. Reyna Pérez, y destacar de ser una de la única obra programada al aire libre.
Una explanada de este centenario teatro que sin más no solo remonto al espectador a estas tierras sevillanas, a partir del mito de la cigarrera, con su gran belleza volvía locos de amor a los hombres, a partir del cual converge el deseo, la pasión y la muerte.
Será por todo ello que se vuelve en una inolvidable y congruente manifestación no solo escénica, sino volverse en una experiencia empática, de apropiación inmediata, gracias a la calidad de movimientos, sin abandonar la expresividad de sus personajes que catalizaron la intensidad y congruencia trágica de esta celebérrima ópera, como esta problemática que sigue latente, a pesar de las dificultades técnicas tanto por el espacio como por su interpretación. Aun así, fue muy agradecida por un cálido y extendido aplauso del respetable que lo disfrutó plenamente.
Aun así, queda esta impronta de esta versión en la memoria de los que disfrutaron esta tarde/ noche, así como gracias a los co creadores que le dieron sustancialidad a esta puesta escénica:
Manuela Ospina Castro como Carmen.
Bryan Méndez como Don José
Genaro Sosa como Zúñiga
María José Monje como Micaela
Yessica González como Manuela
Arturo Velázquez como Torero
Irlanda Lara como la Gitana.
Paloma Ramírez, Jásea Velasco, Martha Cortázar, Madeleine León y Natalia Santillán como Cigarreras.
Sergio Orozco, Daniel Ballesteros y Eduardo Contreras como soldados.
Actores: Carlos Hendricks Hubar y José Nájeras.
Cantante: Jesús Murgía
Traspunte: Mtro. Guillermo Ríos
Iluminación: Griselda Ramírez.
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