Para continuar con la programación virtual #CulturaVivaEnCasa que presenta la Secretaría de Cultura de San Luis Potosí durante la contingencia sanitaria, a partir del viernes 12 de febrero se recordará el programa de concierto realizado por la Orquesta Sinfónica de San Luis Potospi en el Teatro de la Paz en 2012 donde interpretó obras de Franz Liszt, Anatoly Liadov y una de las primeras compositoras estadounidenses: Amy Marcy Beach.
El programa inicia con "Apocalipsis", Op. 66, obra que escribiera el ruso Anatoly Liadov en 1912. El interés de Anatoly Liadov por la música folclórica rusa impulsó el movimiento nacionalista de su país, y aunque se reconoce un lenguaje personal, riqueza armónica y estilo elegante en su pluma, su excesiva autocrítica influyó en que su catálogo musical fuera magro. Esta pieza forma parte de un muy reducido catálogo del compositor, que por su gran calidad, se sigue interpretando continuamente en las salas de concierto en el mundo.
Luego vendrá el segundo de los cuatro “Valses de Mefisto” que cuentan, Franz Liszt escribió 20 años después del primero; está dedicado a Camille Saint-Saëns y lo comienza y termina con un famoso intervalo musical (un tritono que no resuelve) para representar al diablo.
Para cerrar este concierto de fin de semana, escucharemos una pieza de una de las primeras mujeres compositoras de Estados Unidos: Amy Beach, quien fue una niña prodigio (a los cuatro años comenzó a componer y a los 6, a estudiar piano) y una activa virtuosa pianista, que tuvo que centrar su actividad en la composición tras su matrimonio en 1885.
Se cuenta que tras escuchar la Sinfonía del Nuevo Mundo, de Dvořák, Amy Beach tomó cuatro sencillas melodías de su pasado irlandés para crear “el esqueleto” de su imponente Sinfonía “Gaélica” en Mi menor (1894), y es la primera sinfonía escrita y publicada por una compositora estadounidense.
La Sinfonía “Gaélica” se estrenó en 1896; y esta prolífica compositora escribió piezas para piano, coro, grupos de cámara y orquesta, además de ciento cincuenta canciones, algunas de las cuales fueron grandes éxitos en su época.
Tras la muerte de su marido en 1910, Amy Beach regresó a la actividad concertística en América y Europa, y aumentó su producción como compositora. En su música refleja su interés por las raíces de su cultura estadounidense y su pasión por la tradición europea, fundamentalmente por Brahms, Wagner, o Debussy, por lo que su estilo se encuadra en el romanticismo tardío.
No hay comentarios:
Publicar un comentario