Por: Virginia Bautista
Quince años de intentar derribar mitos y prejuicios en torno al cuento, de promoverlo y darlo a conocer a través de la voz de sus autores, de estimular la imaginación de sus lectores, de demostrar que el género breve es “resistente y hospitalario”.
El cuento goza de buena salud y posee una mejor presencia y reconocimiento en el mundo del libro en castellano de los que tenía hace diez o 20 años”, afirma el escritor Alberto Chimal (1970).
Tan antiguo como la especie humana, el cuento difícilmente se extinguirá. Ha demostrado que es resistente y hospitalario y permite decir muchas cosas”, agrega en entrevista con Excélsior.
"Eso de que es un género difícil y que no todos le entran al cuento tiene algo de verdad, pero también una parte de prejuicio. Es una noción que está presente desde los años 90, cuando se asentó la idea de que era un poco tóxico, radioactivo, dañino a la economía de las editoriales porque no vendía. Ahora, eso se está derrumbando”, añade.
El coordinador del Encuentro Internacional de Cuentistas de la FIL Guadalajara, que cumple 15 años y ha dado espacio a 109 de las plumas más destacadas del género, comenta que “lo que ofrece el proceso mental de la lectura del relato es una mayor sensación de rapidez y una invitación enfática y clara a la imaginación.
"El relato, sabemos, está en toda nuestra prosa, y es esta esencia la que queremos dejar en claro ofreciendo al lector una muestra desnuda y grande de lo hoy se escribe en este ámbito”, señala.
Fundado y dirigido durante una década por el narrador Ignacio Padilla (1968-2016), el foro convocará del 2 al 4 de diciembre a seis autores: la boliviana Magela Baudoin, la colombiana Andrea Mejía, el español Carlos Castán, la ecuatoriana Mónica Ojeda y los mexicanos Eduardo Antonio Parra y Cecilia Eudave.
Chimal considera que “la discusión de las categorías de los géneros y subgéneros es engañosa porque los lectores van por los temas o personajes que le interesan. Hoy puedes encontrar en las plataformas digitales todo tipo de historias cortas y la gente no se pregunta si está leyendo cuento o novela corta, simplemente las lee.
"Y los jóvenes escritores atienden menos a la forma que al contenido, están usando diferentes tipos de narración para abordar los temas de les preocupan: la reivindicación de las mujeres, la descripción de la violencia, la autoficción o los reversos de la vida pública y privada”.
Para el cuentista, el Encuentro “cada año es una gran experiencia, no sólo para los escritores que participan, sino para el público. Lo cierto es que no falta material y grandes ejemplos de autores que están explorando el género.
"No me interesa fijar tendencias, sino mostrar un panorama tan variado como sea posible. En ocasiones, las propuestas de los cuentistas son semejantes y otras opuestas, lo principal es que den a conocer su trabajo”.
Y, para festejar al foro quinceañero, detalla, la FIL Guadalajara publicará en su página de internet, a más tardar el 27 de noviembre, los Apuntes sobre el arte de escribir un cuento. Antología de credos cuentísticos, una selección de 45 de los textos que han entregado cada año los participantes de las distintas ediciones.
"En el texto comparten sus principios para escribir un cuento, su método, lo que será muy útil para los nuevos narradores y se podrá descargar de manera gratuita”, destaca Chimal, quien confiesa que le gustará incluir para las próximas ediciones a autores “más allá del castellano” y dar a conocer la producción cuentística de escritores reconocidos por sus novelas.
"A diferencia de los otros géneros, el cuento permanece, subrepticio y sólido, inmutable casi, constituyendo el pilar de la narrativa y recordándonos que todo cuenta y que todo ha sido contado desde que el mundo es mundo”, concluye.
No hay comentarios:
Publicar un comentario