lunes, 11 de abril de 2022

Pregunta a Cuatro Ciénegas y contribuye a su conservación

En las pozas de Cuátro Ciénegas habitan especies microbianas que habitaron hace millones de años. Cátedra Bergman


Como una estrategia cultural para la preservación de Cuatro Ciénegas, el programa Teatros del Paisaje ha realizado una convocatoria para sumar a la sociedad en una dinámica digital que consiste en hacer una pregunta.

El proyecto de La Compañía Opcional es organizado por Cultura UNAM a través de la Cátedra Extraordinaria Ingmar Bergman en cine y teatro, en colaboración con Teatro UNAM y la Casa del Lago y en el marco de El Aleph. Festival de Arte y Ciencia.

Hasta el 20 de abril, la convocatoria invita a ingresar al enlace de www.catedrabergman.unam.mx para escribir una pregunta que gustaría hacerle a las criaturas de Cuatro Ciénegas. “Recopilaremos todas las preguntas y las haremos llegar a las y los pobladores del valle de Cuatrociénegas para que le pidan a las especies más antiguas del mundo que las respondan”, refiere la institución en un comunicado.

“Durante el mes de mayo del 2022 podrás encontrarte con algunos regalos enviados desde el valle, respuestas a las preguntas recibidas, con las que intentaremos entender qué puede decirnos el paisaje de esta región”.

ÚNICO EN EL PLANETA.

Mucho tiempo atrás, el desierto que rodea a Cuatro Ciénegas en Coahuila, era un enorme mar. Gracias a los movimientos tectónicos, su suelo poroso salió del agua para formar las sierras que hoy rodean la región. Porciones de ese mar quedaron atrapadas bajo tierra, guardando en su interior a los seres que las habitaban. Con el correr de los siglos, esas aguas saladas se tornaron dulces y sus criaturas encontraron maneras de sobrevivir en su nuevo ambiente.

En Cuatrociénegas un río de lava corre a diez kilómetros bajo el suelo. Cuando la lluvia se filtra por las montañas, su calor la evapora, regresando a la superficie en forma de pozas. A su paso el agua arrastra bacterias y componentes químicos del sedimento, devolviéndolos a la superficie. De alguna forma el antiguo mar que inundaba este paraje sigue allí.

Al interior de la montaña, nada ha cambiado. La vida es exactamente igual que hace millones de años. Las bacterias que allí viven son las mismas porque su entorno permanece intacto. Esto hace que en Cuatrociénegas habiten seres únicos que explican cómo se originó la vida en la Tierra. Sin embargo, siendo uno de los lugares más importantes para la biodiversidad en el mundo, sus especies excepcionales están a punto de morir.

Su preservación depende, en buena medida, de la manera en que apreciemos su valor y tengamos la capacidad de imaginar su existencia en el futuro. ¿Qué podemos preguntarle a los seres que dieron origen al mundo antes de que desaparezcan? ¿Somos capaces de reconocer lo mucho que todo cambió allí? ¿La cantidad de veces en que la vida estuvo a punto de dejar de existir y comenzó de nuevo?.

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