Por: Virginia Bautista
"Es un gusto, un honor, recibir este premio. Ahorita no podría decir más”, comentó ayer la escritora mexicana Margo Glantz (1930), quien está de viaje por Argentina, tras obtener el Premio Internacional Carlos Fuentes a la Creación Literaria en el Idioma Español 2022, dotado con 125 mil dólares.
Aunque, más tarde, apuntó en su cuenta de Twitter: “Gracias enormes a la UNAM, mi Alma Mater, y a la Secretaría de Cultura por este premio que me honra… Muchísimas gracias al jurado que decidió otorgarme este premio y a todos y todas quienes me han felicitado”.
Otorgado por la UNAM y la Secretaría de Cultura federal desde 2012, el galardón, integrado además por un diploma y una escultura diseñada por el artista visual Vicente Rojo, reconoce a escritores que, por el conjunto de su obra, “enriquezcan el patrimonio literario de la humanidad”.
El jurado, integrado por María Fernanda Ampuero, Liliana Weinberg, David Huerta, Pedro Ángel Palou y Diamela Eltit, consideró que la académica, crítica y tuitera “ha inaugurado nuevas rutas para la creación y la crítica, y mantiene una rotunda vigencia literaria e intelectual que confirma la centralidad del quehacer literario”.
Eligieron por unanimidad a la autora de Las genealogías, Apariciones y El rastro por “la calidad de su obra pionera que abrió el camino a las generaciones posteriores de escritores iberoamericanos, así como por su contribución indeleble a las letras y su inteligencia poética”, informan las instituciones convocantes.
La sorjuanista se convierte en la tercera mujer en obtener el Carlos Fuentes. Lo han ganado el Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa (2012), el nicaragüense Sergio Ramírez (2014), el poeta mexicano Eduardo Lizalde (2016), el español Luis Goytisolo (2018), la argentina Luisa Valenzuela (2019) y la chilena Diamela Eltit (2020). Desde 2019, el premio cambió su periodicidad de bianual a anual.
En noviembre pasado, Glantz abrió el Salón Literario Carlos Fuentes de la 35 FIL Guadalajara y recibió la medalla que lleva el nombre del autor de La región más transparente de manos de su viuda, Silvia Lemus, después de dedicar su conferencia a la novela Aura, de Fuentes.
Ahí, tras definirse como tuitera y “peleomilenial”, la novelista y ensayista de 92 años destacó que “la fragmentación con la que empecé escribiendo, por la que no me publicaban las editoriales, acabó siendo mi modelo más importante. Ahora mi escritura es la fragmentación de la fragmentación, que se volvió pulverización”.
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