Por: Roberto A. Valenciano Capín
El contrabajista, compositor y educador musical Richye Vega, estrenó su" Suite "Siete Lamentos" para quinteto dw cuerdas en el vestíbulo del Museo Francisco Cossío.
"Cuando ella murió tenía que hacer algo al respecto, una composición, ok, eso es de acá y de acá- al señalar tanto la mente como el corazón, respectivamente",
Así como reconoce que es su primera vez que tocaba una obra como instrumentista de cuerdas percutidas.
En el doceavo nivel escalón fue instalado este sencillo pero significativo altar dedicado a su madre, como también abuela, tía y amiga.
Al inicio de esta sobria escalera se encuentra el contrabajo del músico y compositor Richye Vega, a ambos costados se encuentran sus cómplices musicales: Ekaterina Kuznetsova en la viola; Roberto Goméz Argüelles en el violoncello, como Essel Velez Flores, en el primer violín y Miguel Fajardo Vega en el segundo violín.
En el estreno de la obra" Siete Lamentos". Quinteto para Cuerdas. In memoriam a su madre, más bien, "este homenaje a su memoria, a su pasión y a su entrega, a esa bella mujer, a mi madre".
Entre la formalidad y la emoción, el contrabajista, compositor Richye Vega agradece el asistir y estar en este momento tan importante, para él y su familia, al comentar " mi árbol genealógico data de un gran número de músicos, por lo cual mi entorno siempre fue rodearme de un sinfín de aventuras musicales, por un lado, la familia de mi padre en donde predominan los músicos y por el otro la familia de mi madre en donde predominan los cantantes.
Esa pasión me la fueron inculcando poco a poco hasta el momento en que yo comencé a formar parte de su dueto, aprendiendo el amor por la música y las notas que llegan al corazón.
Mi madre fue siempre una enamorada de la música romántica y puedo presumir que cuando interpretaba esas bellas melodías, claro... vestida siempre cómo una diva, podía hacer vibrar los corazones de aquellos oídos que la llegaban a contemplar, siempre con el respaldo de las armonías de mi padre. Disfrutamos siempre de su bello canto e interpretación llena de pasión y madurez musical, lo disfrutamos hasta el día de su partida.
Es por ello que hoy soy".
Para así mostrar claramente los diferentes estadíos de sensaciones a través de los pasajes suscritos bajo esta narrativa sonora que despliega estas primeras notas que se dejaron más que escuchar, sentir estas profundas, conmovedoras e introspectivas a través del contrabajo.
Al platicar el let motif de esta crónica / pasajes, más que lamento, es conmemorarla.
Un primer pasaje - inimicus (Enemigo) que decanta la enfermedad que la lleva a perder la vida.
Continúa con este segundo pasaje y que da título a la suite- Siete lamentos, que plasma con tal delicadeza de este pasaje entorno a la hora de su muerte.
Un tercer pasaje -Madera Negra- en donde hace referencia al ataud.
Su cuarto pasaje que nos remite con un marcado carácter espiritual/ religiosas con -Kirie Eleison-, plasma la entrega de su alma a Dios.
Un quinto pasaje- Los humos de David, en donde hace referencia al momento de su cremación, al preguntarle al encargado de dicha cremación, su nombre, al responderle David, de hay el nombre de esta pieza.
-Un sexto pasaje -Ascención, que es cuando su alma empieza a elevarse al paraíso.
Y este séptimo pasaje -Edén, es cuando el alma llega al Recordar Richye como ella expresaba como era Dios.
Entre un suspiro y este nudo en la garganta.
Para así dar tiempo a disfrutar de ese mágico silencio final.
Al definir la esencia de su propuesta musical en ofrendar a
Para cambiar de escenario como comenta Richye para tocar algunas piezas que a ella le gustaba y que cantaba, como "un homenaje a ella se las dedico".
Para ponerse bohemios, al invitar al escenario al guitarrista Mauricio Barbosa para interpretar juntos, - Unicornio Azul- del gran Silvio Rodríguez.
Invita a unirse su padre en la guitarra y Miguel Fajardo en el violín para interpretar- La gata bajo la lluvia- de Rafael Perez Botija Garcia.
Incidir en estas lágrimas que son contenidas en la palma de la mano, como alzar la mirada al cielo, suspirar y dejarse envolver por la música.
Un aplauso que se volvió en un respiro en este emotivo concierto.
Y así confirma que además de tener una familia y amarnos como tal, "nuestra unión trascendía más allá de una familia común, éramos compañeros, cómplices, arcángeles de este bello arte", comenta.
Siempre agradecido tanto a los asistentes, como a Ekaterina Kuznetsova (viola) Roberto Argüelles (Cello) Miguel Fajardo (Violín) y Essel Vélez (Violín) por vestir esta música y convertirla en ese instante sonoramente maravilloso, a los integrantes del Museo Francisco Cossío.
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