sábado, 9 de agosto de 2014

Plática con un profesional del triángulo sobre el instrumento más simple del mundo

 
Por: Dan Wilkinson
 
Pocos instrumentos se han ganado tan mala fama como el triángulo. Honestamente, éste es considerado como el patito feo del mundo de la música, incluso estando en una categoría por debajo del cencerro. 
 
Eric Hopkins, percusionista de la Sinfónica de Utah, piensa diferente.
 
Maestro en el sublime arte del triángulo, él cree que el instrumento pitagórico merece una mejor reputación. Y para demostrarlo creó una guía con 17 pasos para convertirse en un sensei en este arte y demostrarle al mundo que la pequeña pieza metálica merece respeto. 
 
Me puse en contacto con Eric para averiguar más sobre el instrumento más débil de la música clásica y por qué todo el mundo debería ser más tolerante con él.
 

 
 ¿El triángulo es realmente tan difícil de tocar?
Eric: Sí y no. Mi primera experiencia tocando el triángulo fue en la Philharmonic Youth Orchestra de Nápoles. Durante seis meses trabajamos en una pieza orquestal que sólo tenía una nota de triángulo. Esta nota forte (fuerte) debía sonar literalmente entre cientos de compases, lo que hacía que fuera muy difícil de acertar. Durante un ensayo me las arreglé para perder la cuenta del compás y cuando llegó mi momento, toqué la nota con una probabilidad de 1 entre 950 de acertar. Luego me senté en mi silla sin nada más que hacer pensando en lo idiota que era. El director no se detuvo, yo creo que ni siquiera se dio cuenta, pero no me importó. Pensé: "Conduzco hasta aquí el fin de semana por un camino de terracería, vengo desde más lejos que cualquier otra persona solamente para llegar a este maldito ensayo y quedarme sentado aquí como un idiota para esperar a tocar una sola nota". Dejé aquel ensayo y nunca volví.
 
¿Esto detuvo tu carrera musical con el triángulo?
Sí, dejé el triángulo y saqué lo mejor de mí. No volví a tocarlo hasta la universidad. Ahora que soy un profesional, esa obra todavía representa el mismo peligro para mí. Si la toco de nuevo y me olvido de esa nota en un concierto, a mí me seguirán pagando lo mismo, pero la vergüenza de que salga mal siempre estará ahí.
 
Suena como a vivir bajo el constante acecho de un montón de presión. ¿Cómo debes prepararte para tocar bien este instrumento?
Mira esta analogía: cualquier violinista de secundaria puede tocar "Mary Had a Little Lamb", pero ¿cómo se compara un estudiante de secundaria con Jascha Heifetz tocando la misma melodía? Es fácil de tocar, pero engañosamente difícil de dominar.
 
En tu blog especificaste los pasos para alcanzar el éxito tocando el triángulo. ¿Cuáles dirías que son los más importantes?
Para que quede claro, nadie gana un salario significativo tocando únicamente el triángulo. Eso hay que tenerlo en cuenta. Y continuando con el humor, las tres claves para alcanzar el estrellato tocando el triángulo son:
1. Adquirir un triángulo, baqueta, y un clip para colgar el instrumento.
2. Desarrollar bien los músculos de la mano y los dedos para ganar velocidad, agilidad y consistencia.
3. Ser un chingón.
 
¿Cómo han reaccionado las personas a tu guía?
Los personas que no son músicos encontraron el texto realmente divertido. A los músicos les pareció divertido, educativo y un poco exagerado (me imagino sus ojos dando vueltas ahora), un compañero percusionista no estaba de acuerdo conmigo, decía que en realidad sólo tienes que golpear la maldita cosa.
Estoy de acuerdo con la filosofía de no pensar demasiado las tareas simples, ése es mi lema, pero creo que es productivo observar al triángulo en acción por diversos motivos.
 
Es cierto, ¿hay en realidad algún famoso virtuoso del triángulo?
Bueno, yo soy el único que ha dado una lección de triángulo en NPR News Weekend Edition. Aparte de esto, probablemente Ed Grimley.
 
¿Qué es lo que hace del triangulo un instrumento único?
¡Un montón de cosas! El triángulo tiene un equilibrio único, acústicamente hablando. Todas las partes que forman un triángulo de calidad son concebidas para que este se funda con cualquier tonalidad de la orquesta. Un mal triángulo suena como una campanilla. Un buen triángulo, sin embargo, tiene un complejo conjunto de matices y produce un sonido rico, con brillo.
 
¿Cómo reaccionan las personas que no son músicos cuando se enteran de que tocas el triángulo?
Se ríen, obviamente, o si son educados simplemente no dicen nada y se quedan confundidos.
 
¿Qué pasa con los otros músicos de la orquesta?
Probablemente piensan algo como “¿A mí me pagan lo mismo que a él?”
 
¿Veremos alguna vez una igualdad de instrumentos en la orquesta?
Bueno, a todos nos pagan lo mismo tocando un instrumento u otro. Aparte de esto, supongo que preguntar a todos si tienen la misma opinión es bastante aterrador.

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