Arturo Jiménez
La figura y el espíritu de Esperanza Iris, La Tiple de Hierro, La Reina de la Opereta, emergerá de nuevo en el teatro que fundó en el México turbulento de hace 90 años, el Teatro de la Ciudad, para responder, como dijo ayer el actor Héctor Bonilla, a la urgencia de "recuperar la memoria de este pueblo desmemoriado" y de difundir los "auténticos valores" de figuras fundamentales, sobre todo ante la "crisis de falta de liderazgos" que padece el país.
Durante dos noches "especiales y trascendentales" , como las calificó la actriz Elsa Aguirre, sentada al lado de Bonilla y quien interpretará a la protagonista, esta "gran mujer y artista" será convocada para que ella y su teatro sean objeto de un homenaje mediante la biografía, la historia, la actuación, la música, la danza y los cuplés, tonadillas y canciones diversas durante el espectáculo “Gala de opereta y zarzuela Iris de Esperanza”.
El viernes 24 y el domingo 26 Esperanza Iris (1888-1962) seguramente emergerá del foyer de ese teatro, que cumple nueve décadas, donde residió durante varios años y desde el cual solía asomarse y aplaudir a sus compañeros cuando no actuaba, o desde el palco que ocupaba como espectadora y desde el cual aclamó, por ejemplo, a Enrico Caruso o Ana Pavlova, que ella misma trajo como empresaria teatral.
En la gala, que muchos esperan "histórica", actuarán siete sopranos o tiples: María Luisa Tamez, Lourdes Ambriz, Regina Orozco, Irasema Terrazas, Yvonne Garza, Verónica Murúa y María Katzarava; dos tenores: Alejandro Villeda y Alejandro Coreño; tres actores: Aguirre, Bonilla y Hernán del Riego, y una pareja de danza española: Marisol Moreno y
Raúl Salcedo.
En la dirección de escena figuran José Antonio Morales y Rosa Blanes Rex, mientras James Demster dirigirá como invitado a la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México y Leonardo Villeda, al Coro Cantus Hominum.
Con un entramado de ficción teatral, la gala estará conformada por fragmentos de obras fundamentales en la vida y la obra de Esperanza Iris: Duquesa del Bal Tabarín, El conde de Luxemburgo, Doña Francisquita, La Gran Vía, El niño judío, Agua, azucarcillos y aguardiente, La viuda alegre, Eva, El rey que rabió y Gigantes y cabezudos.
Serán dos noches inolvidables
En 1918, Esperanza Iris entró acompañada del presidente Venustiano Carranza para inaugurar el teatro que, con mucho esfuerzo, la famosa tiple y promotora cultural había logrado construir en un año, evocó en conferencia de prensa Nina Serratos, coordinadora del Sistema de Teatros de la Secretaría de Cultura del gobierno capitalino.
Luego de toda una existencia ligada a la historia de la capital y del país durante el siglo XX –Revolución Mexicana, regímenes posrevolucionarios, movimiento del 68, terremoto de 1985, abandono de dos décadas y resurgimiento en manos del gobierno capitalino–, este teatro ahora alberga los "miedos", la "energía incontrolable" y la "plena ilusión" de José Antonio Morales, director de escena.
También presentes en la conferencia de prensa, realizada en el escenario del teatro, que antes sólo llevaba el nombre de la cantante y actriz y desde hace algunos años se llama Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, las tiples Tamez, Orozco, Garza y Terrazas destacaron la exigencia vocal e histriónica de los géneros, nada menores, de la opereta y la zarzuela, y compartieron su gozo por participar en este proyecto.
"Es importante que todo mundo sepa quién fue Esperanza Iris", agregó Terrazas, quien sintetizó su respuesta al describirla como "una figura histórica". Y Elsa Aguirre ofreció: "Serán dos noches inolvidables" .
Aunque la Gala de opereta y zarzuela Iris de esperanza sólo tendrá dos funciones, en el foyer del teatro permanecerá hasta diciembre la exposición El Iris: un teatro en la ciudad, que mostrará objetos y fotografías en torno a la vida y obra de la legendaria Esperanza Iris.
La figura y el espíritu de Esperanza Iris, La Tiple de Hierro, La Reina de la Opereta, emergerá de nuevo en el teatro que fundó en el México turbulento de hace 90 años, el Teatro de la Ciudad, para responder, como dijo ayer el actor Héctor Bonilla, a la urgencia de "recuperar la memoria de este pueblo desmemoriado" y de difundir los "auténticos valores" de figuras fundamentales, sobre todo ante la "crisis de falta de liderazgos" que padece el país.
Durante dos noches "especiales y trascendentales" , como las calificó la actriz Elsa Aguirre, sentada al lado de Bonilla y quien interpretará a la protagonista, esta "gran mujer y artista" será convocada para que ella y su teatro sean objeto de un homenaje mediante la biografía, la historia, la actuación, la música, la danza y los cuplés, tonadillas y canciones diversas durante el espectáculo “Gala de opereta y zarzuela Iris de Esperanza”.
El viernes 24 y el domingo 26 Esperanza Iris (1888-1962) seguramente emergerá del foyer de ese teatro, que cumple nueve décadas, donde residió durante varios años y desde el cual solía asomarse y aplaudir a sus compañeros cuando no actuaba, o desde el palco que ocupaba como espectadora y desde el cual aclamó, por ejemplo, a Enrico Caruso o Ana Pavlova, que ella misma trajo como empresaria teatral.
En la gala, que muchos esperan "histórica", actuarán siete sopranos o tiples: María Luisa Tamez, Lourdes Ambriz, Regina Orozco, Irasema Terrazas, Yvonne Garza, Verónica Murúa y María Katzarava; dos tenores: Alejandro Villeda y Alejandro Coreño; tres actores: Aguirre, Bonilla y Hernán del Riego, y una pareja de danza española: Marisol Moreno y
Raúl Salcedo.
En la dirección de escena figuran José Antonio Morales y Rosa Blanes Rex, mientras James Demster dirigirá como invitado a la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México y Leonardo Villeda, al Coro Cantus Hominum.
Con un entramado de ficción teatral, la gala estará conformada por fragmentos de obras fundamentales en la vida y la obra de Esperanza Iris: Duquesa del Bal Tabarín, El conde de Luxemburgo, Doña Francisquita, La Gran Vía, El niño judío, Agua, azucarcillos y aguardiente, La viuda alegre, Eva, El rey que rabió y Gigantes y cabezudos.
Serán dos noches inolvidables
En 1918, Esperanza Iris entró acompañada del presidente Venustiano Carranza para inaugurar el teatro que, con mucho esfuerzo, la famosa tiple y promotora cultural había logrado construir en un año, evocó en conferencia de prensa Nina Serratos, coordinadora del Sistema de Teatros de la Secretaría de Cultura del gobierno capitalino.
Luego de toda una existencia ligada a la historia de la capital y del país durante el siglo XX –Revolución Mexicana, regímenes posrevolucionarios, movimiento del 68, terremoto de 1985, abandono de dos décadas y resurgimiento en manos del gobierno capitalino–, este teatro ahora alberga los "miedos", la "energía incontrolable" y la "plena ilusión" de José Antonio Morales, director de escena.
También presentes en la conferencia de prensa, realizada en el escenario del teatro, que antes sólo llevaba el nombre de la cantante y actriz y desde hace algunos años se llama Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, las tiples Tamez, Orozco, Garza y Terrazas destacaron la exigencia vocal e histriónica de los géneros, nada menores, de la opereta y la zarzuela, y compartieron su gozo por participar en este proyecto.
"Es importante que todo mundo sepa quién fue Esperanza Iris", agregó Terrazas, quien sintetizó su respuesta al describirla como "una figura histórica". Y Elsa Aguirre ofreció: "Serán dos noches inolvidables" .
Aunque la Gala de opereta y zarzuela Iris de esperanza sólo tendrá dos funciones, en el foyer del teatro permanecerá hasta diciembre la exposición El Iris: un teatro en la ciudad, que mostrará objetos y fotografías en torno a la vida y obra de la legendaria Esperanza Iris.
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