Lacrimosa en tierras potosinas

   ,                          Fotografías: Cortesía de Cineteca Alameda /Alex Domínguez

Por: Roberto A. Valenciano Capín

Con un contundente Tilo, Tilo Wolf, que salía entre las sombras, entre este cruce de luces y bajo la complicidad de este imagen de un ángel caído llorando, es así fue como fue recibido por su grey potosina, quien agradeció al juntar las manos y hacer una pequeña reverencia, quien junto a Anne Nurmi y bajo su Tour Testimonium. Lacrimosa confirma el porque es considerada como una de las mejores bandas de metal gótico.

En su segunda visita a estas tierras potosina y tener como escenario la Cineteca Alameda a pesar de no llenarse, pero aun así logró convocar una buena asistencia de todos los gustosos de este estilo musical.

Una noche que en si misma forma parte de ser un tributo a los humanos, las almas y el diario de la pena y la muerte

En esta ocasión, Tilo Wolf  tuvo más una interacción tanto con sus seguidores en relación a su primera visita en donde estuvo mas pasivo, debido a que se encontraba postrado en una silla, al tener enyesada una pierna. En contraparte, Anne Nurmi solamente se le pudo disfrutar en la ejecución de los teclados y privarnos de su voz debido a una cuestión de salud, pero que aun así fue arropada con los gritos de sus seguidores.

Indudablemente, de nueva cuenta se disfruto de un buen show, incluyente a pesar de algunos problemas técnicos, pero que pasaron tan desapercibidos para sus seguidores que escuchaban hipnotizados no solo esta particular tesitura de voz, en momentos era de tal suavidad para volverse desgarrada, en momentos de una grave-dad con sumos matices y ser coronado por este singular acento teutón, reflejas en estas canciones que lograron desanudar muchas ataduras emocionales y sentires, que por ahí nos recuerda en momentos con algunas tesituras a uno de sus héroes personales como es el gran cantautor canadiense, Leonard Cohen, aunado este lenguaje corporal de Tilo, para darse este empoderamiento inmediato del escenario.

Como comentaría en una entrevista dada a un medio local. " Cuando estoy en el escenario, estoy completamente en mi música de la que puedo reunir toda la energía. Esta energía que doy a la audiencia y de la audiencia nos devuelve su energía en el escenario, todos levantamos."

Siempre acompañado de Anne Nurmi en los teclados, Jay Peter Genkel en la guitarra, Yenz Leonhardt en el bajo, Henrik Flymann en la guitarra y Julien  Schmidt en la batería.

A pesar de ser una gélida noche, no fue impedimento para ofrecer por casi dos horas un puntual recorrido por todas aquellas imprescindibles canciones y así como de su más reciente producción discográfica - Testimonium -, a la que considero Tilo como "uno el álbum más importante que ha hecho nunca, el cual combina la idea original de Lacrimosa con la consecución de toda la evolución de Lacrimosa", para darle más esta sustancialidad y constancia de sus veintisiete años de esta banda germana.

Pero no solamente quedo en esta noche fría y una noche de trazos góticos, sino ser la oportunidad de este encuentro más cercano tanto con Tilo como Anne y demás integrantes, gracias a este Greet/Meet, el cual tuvo una buena respuesta de sus seguidores.

Este concierto fue gracias a la apuesta hecha por  Cantodea Productions, quien cerro este productivo año con importantes conciertos de calidad y profesionalismo, ahora y en espera de los conciertos que tienen programados para este 2018.