Por: Roberto A. Valenciano Capín
Sin lugar a dudas, el tiempo se ha colapsado en sí mismo, pero aun así nos ha dejado entrever entre esas pequeñas fisuras, un tiento de tiempo que ha resultado confortable y a la vez alentador para muchos que por años hemos seguido con tientos, a pesar de que ese espacio-tiempo se ha vulnerado así mismo, pero aun así ha dejado escapar por su propio hálito un grito que se ha desentrañado por sí mismo, el cual se estremece, retumba y hace eco en un solo nombre, Los Angeles del Infierno-ADI-.
Bajo esta pertinencia del tiempo y su misma visceralidad nos conllevó a asistir a este espacio consagrados por unos, como es la catedral del metal potosino- la Huerta del S.T.I.C.-, para no solo disfrutar la esencia de esta banda de metal española que nuevamente piso estas tierras del tunal grande en conjunción con las bandas: Antares, Fate Destroyer y Voltax.
Dieron la bienvenida a este ritual del metal, la banda potosina de heavy metal, Antares con una propuesta muy bien argumentada bajo estos alientos, eso si, bien armadas sus canciones, exaltantes riffs y a la vez mostrar el talante de la experiencia, al presentarnos un set de rolas como: -alas de ángel,- mirada eterna-, luna fanatsmal- y -mares de guerra-.
Sin lugar a dudas, Fate Destroyers, fue la bandas que más sorprendieron en este festival, al reflejar esa urgente necesidad de comerse el escenario, claro, con la pauta de tener los argumentos musicales necesarios para hacerlo y dejar a un lado el pesar de la edad de sus integrantes, todo bajo el aliento del trash metal, potente, saturado de sus propias vivencias que hicieron detonar el lugar y lograr hacer sacudir la greña de muchos.
En donde los también ganadores del concurso organizado por Morbid Visions para ser la banda abridora a esta leyenda que se resume en ADI. Ofrecieron sus explosivas rolas como:- Metal maniacs-, -rotten soul-, -destroyer till death-, - against all-, -fill posers- y el cover de antiplash de Metallica y finalizar con- Toxic War-.
Después de esta alentadora hecatombe musical, ya entre los reacomodos dentro de la cuestión técnica, entra la banda defeña de Voltax, pero antes ser sacudidos por un cotundente ¡Angeles!, ¡Angeles! y siendo amainados por los primeros fraseos de un impostergable heavy metal de muy bien manufactura, y como siempre sufrir, las consecuencias de ser la banda abridora a la estelar.
Ante toda la parafernalia en cuanto a la presentación y esa interminable versión de su otro lado del silencio, que fue menguada paulatinamente con el grito de "Angéles", "ángeles", salen lentamente entre la penumbra y soportados por la iluminación los tan esperados Ángeles del Infierno, bajo la tutela de Juan Gallardo y Robert Alvarez sin hacer dejo de sus más integrantes, para decantar ese otro lado del silencio con -el principio del fin-a pesar de una mermada voz, la actitud y profesionalismo.
Para proseguir con un rotundo -Somos ángeles-, -déjalo-, -prisionero del amor-, - en momentos Gallardo soportó el quebranto de su voz e hizo en una forzada complicidad hacer cantar a sus seguidores que se dieron en buena cita en este espacio.
Aunque en momentos se percibió el porque fue considerada como una las mejores voces dentro del heavy metal, quedando refleja en la canción- hoy por ti- y -sombras en la oscuridad-.
Sin dejar pasar esa constancia como es saludar a su gente que lo ha mantenido en donde están, con un ¡Buenas Noches amigos de San Luis ! y complementarlo con un ¡Viva México! para acabar en desgarrar las gargantas de algunos y para otros la inminente desilusión de la decadencia de sus ADI, pero con el gozo en la piel de escuchar: - Rocker-, - vives en un sueño,- hasta morir-.
Uno de los momentos álgidos fue sin lugar a dudas cuando llegó el momento de un set de rolas imprescindibles para no solamente para aquellos seguidores de ADI sino, también para aquellos gustosos del Heavy Metal como son:- moriré con las botas puestas-, fuera de la ley-, -sangre- cara o cruz-, -666. y - marca mi número-.
Claro, muchos seguían esperando una de las rolas parteaguas para muchos, pero quedaron momentáneamente en el limbo, más al despedirse Gallardo y acompañado por su incansablel amigo, Robert Alvarez al decir " los queremos mucho San Luis , se los merecen y estar fuera de la ley" y dejarse escuchar de forma instrumental la obligada y esperada por muchos.
Para detonarla en todo su esplendor y ser parte indiscutible de ese otro lado del silencio que provocó no solo la euforia sino cierto paroxismo, más al volver a platicar con su público-¡Cómo etán mis amigos y sin más gritar-Maldito- y concluir este encuentro que fue desafortunado fue postergado por varios años, para despidirse a petición de su gente con-pacto con el diablo".
Desde aquí se agradece el apoyo a Morbid Producciones por las facilidades para cubrir este concierto y así como la gente de los ADI, claro sin olvidar a todos aquellos metaleros de corazón y persistencia.
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