jueves, 24 de diciembre de 2020

“Nos hace falta el escenario”: Javier Camarena


Por: Juan Carlos Talavera

A una semana de que Javier Camarena retome su actividad en el Metropolitan Opera House de Nueva York, el 31 de diciembre, asegura que está listo y que ha superado la lesión que lo mantuvo en silencio algunos meses.

Reconoce que el año 2020 ha sido complicado para todos y “en el caso de los artistas hubo cancelaciones de muchos teatros y para alguien que trabaja como yo, por contrato, representó un impacto económico muy fuerte, aunque tengo la fortuna de contar con una esposa que es bastante previsora”.

De todas maneras, nos hace falta el escenario”, expresa a Excélsior, “y aunque el panorama no se ve muy alentador en el futuro próximo” Camarena ya tiene agendados algunos compromisos en Montecarlo, Alemania y una gira por España, en la Sala Mozart de Zaragoza, el Teatro Real de Madrid y el Palau de la Música Catalana, con aforos reducidos.

Mientras tanto, el 31 de diciembre cantará, vía streaming, al lado de las sopranos Pretty Yende y Angel Blue, y del tenor Matthew Polenzani, donde ejecutará arias de Donizetti.

Estoy preparando el concierto de fin de año que organiza el Metropolitan Opera House, el cual será transmitido online desde

Augsburgo, una ciudad muy cerca de Múnich, Alemania. El concierto será a puerta cerrada y será transmitido para todo el mundo a través de la red del MET Opera”, comenta.

Después, el 7 de enero, bajo la dirección artística de Gianluca Capuano, se presentará con la Sala Garnier de la Ópera de Montecarlo, donde cantará arias de ópera de Gioachino Rossini y

Niccolò Antonio Zingarelli.

Después, realizará su gira por España, en la Sala Mozart de Zaragoza (enero 12); el Teatro Real de Madrid (enero 15), donde interpretará arias y escenas de Don Pasquale, La favorita, La hija del regimiento y El elíxir de amor, de  Donizetti.

Así como en el Palau de la Música Catalana de Barcelona, el 19 de enero, y el Teatro Arriaga Antzokia, de Bilbao, el 21 de enero. Y mantiene sus compromisos para el 6 y 11 de marzo, donde protagonizará Rigoletto con la Ópera de Berlín, y el 20 y 23 en la versión de ópera concierto de Lakmé.

Y a mediados de julio pisará el Gran Teatro Liceu con el montaje de Lucia di Lammermoor, de Donizzetti, con seis funciones programadas, al lado de la soprano Nadine Sierra.

Sin embargo, detalló que hace unos días Rolando Villazón le escribió de parte del Festival de la Semana Mozart, en el cual le notificó que se cancelaba la función que estaba prevista para el 27 de enero.

¿Cómo ha tomado las cancelaciones? “Me han dado la oportunidad de estar en casa, con mi familia. Normalmente estoy aproximadamente dos meses al año en casa y puedo decirte que hacía diez años que no pasaba tanto tiempo en casa”.

Es un tiempo que me hacía falta y que lo hemos disfrutado en familia, con todo y lo feo que puede sonar, porque sé la tragedia que ha significado esta pandemia para muchas personas y que es de lamentarse en ese sentido. Por ahora, el panorama no se ve muy alentador en el futuro próximo”, reconoce.

¿Cómo definiría el 2020? “Como un año que nos ha impuesto uno de los más grandes retos que pudiera haber. Es imperativo que sigamos pensando en comunidad y no en unidad, porque enfrentar la pandemia sólo se resuelve en comunidad y en unión, con empatía y compartir la responsabilidad. Afortunadamente, en Suiza, con mi familia hemos procurado estar el mayor tiempo posible en casa”.

LESIÓN EN LA CUERDA VOCAL DERECHA

Javier Camarena habla sobre la lesión vocal que lo mantuvo tres meses fuera de los escenarios. Asegura que, como cualquier deportista de alto rendimiento que se lesiona, un cantante está expuesto a lo mismo sin que eso signifique que sea un mal cantante o tenga una mala técnica.

Retomé el trabajo en agosto pasado, confiando en mi técnica, pero el canto es una actividad física y (al volver) me costó una pequeña lesión en la cuerda vocal derecha.

"Tuve una pequeña hemorragia en uno de los vasos capilares que están dentro de la cuerda y ese pequeño vaso, que estaba cerca del borde de la cuerda, provocó una inflamación y las cuerdas no podían cerrar de manera apropiada. Entonces vino un proceso (médico) de guardar silencio absoluto para sanar la cuerda, Ahora ya estoy en el fortalecimiento y la resistencia de mis cuerdas vocales”, afirma.

"Si un jugador como Rafael Nadal tiene una lesión, nadie dice que es un mal tenista o que no sabe jugar. Pero con los cantantes de ópera se opina que esto sucede porque no saben cantar o porque se sobreexcedieron y no es así”, concluye.

No hay comentarios: