Por: Roberto A. Valenciano Capín
Parafaseando a esta icónica canción de Soda Stereo: "De aquel amor de música ligera. Nada nos libra, nada mas queda", es así como se degustó de una noche de rock con esta Retrospective Tour, que ofrecieron este colectivo de músicos de lo mejor del rock nacional, para esta ocasión se tuvo como artista invitado al cantauror londinense Tony Lewis (bajista y vocalista de The Outfield), que en esta noche compartieron en la Plaza de Toros El Paseo.
Si bien, abrieron esta noche un tanto fría este colectivo de rock nacional, en donde no solo se dieron cita contemporáneos tanto de estas bandas mexicanas como inglesa, sino también de pequeños que disfrutaron en forma conjunta con sus padres.
Más que un concierto que no solo se ciñó lo sonoro, sino más bien volverse en esta fiesta musical, propuesta por César López "Vampiro" en la guitarra, Mauricio Clavería (La Ley) en la batería, Héctor Gómez (Monoplasmas), para irse uniendose sus compañeros, Xava Drago (Coda), Kenny Avilés y Edgar Carrum (Kenny y los eléctricos) y Jorge Guevara ( Caos y Elefante) que compartieron tanto sus canciones que con el tiempo no se han avejentado, sino más bien siguen siendo coreada no una, sino muchas veces por los fanáticos; indudablemente ya son parte de estos soundtracks de muchos de los que se dieron cita a este concierto histórico.
Ataviado de una patriótica chamarra que lucía los colores de la bandera nacional mexicana, subió al escenario un ameno y bromista Tony Lewis, arropado por su banda, integrada por dos guitarristas, un baterista y una excelente tecladista.
Quien transitó por estos caminos de compartir su peculiar voz y una contagiosa sonoridad que confirma lo que nos comentó en su momento en la rueda de prensa, en donde apeló que prefiere hacer música que la gente cante y la disfrute, y a través de sus letras despertar sentimientos en las personas.
De hay ser una noche en donde imperó la sensación refleja en esta eufórica chica portando una pancarta con imágenes de la banda inglesa, el cual le fue agradecido por el originario de la East End en Londres, como aquel que gritaba su nombre y a su vez en una de sus manos portaba un disco- Play Deep-, como espectadora, la esposa de Tony Lewis, como el disfrute de varios de los músicos que integran este colectivo de rock en español.
Todo esto convergió en un set de casi dos horas, con canciones: -61 seconds-,- I don´t You to loose to love tonight-, -Along with you-. -All the Love-, -Everytime you cry-, - For you-, -Here are now- Since you´ve been gone-, In to the light- y muchas más canciones, para despedirse con -In to paradise-.
Quien también reconoció el talento de sus músicos, como fue los excelentes solos tanto del baterista como la tecladista, se dejo entrever este fraseo evocando al gran Gershiwn y sin más interpretar -Cielito Lindo- y provocar este mediato canto del público, para ser agradecida con un extensivo aplauso.
No sé si cumplió cabalmente las expectativas de Tony Lewis, esta empatía con el público potosino, esos si, se confirma a través de este extendido aplauso y el grito de su nombre, de ser experiencia única al poder disfrutar de cada una de sus canciones que han logrado trascender el tiempo de una de las leyendas emblemáticas del rock: Tony Lewis.
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