El Ballet Folclórico de Jalisco, que por 31 años ha sido considerado emblemático y representativo de la Entidad, acusa a través de sus integrantes y maestros de la Escuela de Danza del Instituto Cultural Cabañas (ICC) el “desconocimiento” que la Secretaría de Cultura de Jalisco (SC) ha hecho de la agrupación, así como la falta de apoyo que, aseguran, se ha agravado en los pasados meses y es prueba de que, como dice Jerome Dávila, “quieren desaparecer el ballet”.
La compañía, que ha representado al país en 30 giras por el extranjero, los 32 estados del país y distintos municipios de Jalisco, ha sido “un actor protagónico de la cultura nacional ante el mundo, un referente en la Entidad”, refiere Dávila.
Dávila —miembro del ballet y profesor en el ICC— afirma que a él y al director del grupo, Everardo Hernández, se les ha pedido “que abandonemos las instalaciones y la SC no reconoce acuerdos ni se ha acercado para solucionar el conflicto; así, tras afirmar: “los artistas no tenemos apoyo”, el maestro refiere que la propia titular de la Secretaría de Cultura, Myriam Vachez, alegó durante la pasada glosa del pasado informe de gobierno que se había llegado a un acuerdo con el grupo, “pero a nosotros no nos llegó ningún documento oficial”.
SC es “elitista”
En estos términos, como “representación visual de las tradiciones y cultura” que representan a Jalisco “ante el mundo”, Jerome Dávila señala que la SC se comporta de forma “elitista” y se ha tornado más una “compradora de eventos” que no trabaja “en la creación y difusión de la cultura jalisciense”; el ballet, integrado por 25 alumnos y dos maestros, denunció también las condiciones en que se encuentra la Escuela del ICC, donde las instalaciones son insalubres y están en mal estado, el sonido es deplorable y los espacios insuficientes.
La última actuación del ballet fue en diciembre de 2014, en Cihuatlán, Jalisco, pero en los pasados dos años sólo se han presentado en siete ocasiones; ahora, la SC afirma que no les puede facilitar las instalaciones y, ante ello, se manifestaron por igual algunos padres de familia que aseguran cumplir con las cuotas para la escuela pero no comprenden por qué quiere la SC “desaparecer” actividades “que dan tanto a los alumnos”, señaló Haydée Quezada.
Finalmente, Dávila hizo lectura del pliego petitorio que presentó el ballet ante el Congreso del Estado; “sé que me expongo a represalias, pero si no hacemos nada el riesgo es que el ballet enfrente su pronta desaparición; pero no descansaremos”.
La compañía, que ha representado al país en 30 giras por el extranjero, los 32 estados del país y distintos municipios de Jalisco, ha sido “un actor protagónico de la cultura nacional ante el mundo, un referente en la Entidad”, refiere Dávila.
Dávila —miembro del ballet y profesor en el ICC— afirma que a él y al director del grupo, Everardo Hernández, se les ha pedido “que abandonemos las instalaciones y la SC no reconoce acuerdos ni se ha acercado para solucionar el conflicto; así, tras afirmar: “los artistas no tenemos apoyo”, el maestro refiere que la propia titular de la Secretaría de Cultura, Myriam Vachez, alegó durante la pasada glosa del pasado informe de gobierno que se había llegado a un acuerdo con el grupo, “pero a nosotros no nos llegó ningún documento oficial”.
SC es “elitista”
En estos términos, como “representación visual de las tradiciones y cultura” que representan a Jalisco “ante el mundo”, Jerome Dávila señala que la SC se comporta de forma “elitista” y se ha tornado más una “compradora de eventos” que no trabaja “en la creación y difusión de la cultura jalisciense”; el ballet, integrado por 25 alumnos y dos maestros, denunció también las condiciones en que se encuentra la Escuela del ICC, donde las instalaciones son insalubres y están en mal estado, el sonido es deplorable y los espacios insuficientes.
La última actuación del ballet fue en diciembre de 2014, en Cihuatlán, Jalisco, pero en los pasados dos años sólo se han presentado en siete ocasiones; ahora, la SC afirma que no les puede facilitar las instalaciones y, ante ello, se manifestaron por igual algunos padres de familia que aseguran cumplir con las cuotas para la escuela pero no comprenden por qué quiere la SC “desaparecer” actividades “que dan tanto a los alumnos”, señaló Haydée Quezada.
Finalmente, Dávila hizo lectura del pliego petitorio que presentó el ballet ante el Congreso del Estado; “sé que me expongo a represalias, pero si no hacemos nada el riesgo es que el ballet enfrente su pronta desaparición; pero no descansaremos”.
El Informador
No hay comentarios:
Publicar un comentario