Por: Roberto A. Valenciano Capín
El patio de los Desconocidos del Museo Leonora Carrington fue el escenario de la tercera peña flamenca presencial "Canela Surrealista" de El Centro de Arte Luna Cabal, así como conmemorar el día internacional del pueblo gitano.
Como se sabe no solamente esta noche de La Peña flamenca potosina es una iniciativa en la que coincidimos aficionados al flamenco y alumnos del Centro de arte Luna Cabal, para compartir un espacio de manera recurrente en el que aprendamos más de este arte que nos apasiona
Como también se busca ofrecer esta parte académica, al ofrecerse una interesante conferencia a fin a esta temporada de Semana Santa " Apreciando la saeta” por la cantante y saetera Denise Martínez.
Al reconocer que no se considera una experta en la saeta, aun así compartió los orígenes de la saeta, Salmodia, canto Almuédano, para llegar a las Saetas primitivas que aparecen en 1840, para llegar a la Saeta Flamenca que atesora una raíz espiritual en el alma gitana, así como hace un recorrido por otros rincones de España en donde se gesta y cantan esta diversidad de saetas, al destacar que se canta más la saeta con Seguiriya en la tradicional Procesión de Silencio en esta capital potosina.
Al considerar que cantar saeta es una experiencia espiritual muy fuerte. Al principio fue muy difícil, ahora que lo cantó con todos los momentos que he vivido difíciles y buenos y ahora que soy madre ya entiendo mucho y me pongo en el contexto de la virgen, entender que tu hijo pase por estas circunstancias, para mi es más fuerte, y es también ofrecerlo y entregarle todo de corazón.
Como bien dice que saeta viene de Saggita, flecha, "es lo que viene del corazón, puedes entregarlo todo hay, puedes pedirle gracias por lo que esta pasando, pedirle con una intención, es también una declaración de amor, es algo muy profundo, es una experiencia muy enriquecedora y cada día lo vivo más".
Al platicar que su primer encuentro con la saeta fue por medio de Sara Ramírez, al contactarla con Lupita Romo porque había estudiado baile español. En ese entonces no era tan fácil conseguir información, de hay que para nosotros fue un reto y así fue este andar en el canto de la saeta.
Como bien apunta la Mtra. Lizette Barón, un tablao en donde se expone el trabajo de las alumnas de este Centro.
En esta sesión compartieron las bailaoras: Natllely Torrencillas compartió su baile con una potente Farruca, como Yumei Cordero lo hizo con Tarantos, por cierto, de buena factura y pulcra ejecución, ahonda en este baile fuerte, sentido y sostenido, así como destacar que el vestuario de ambas fue de la creación de Natllely Torrencillas.
Para cerrar esta noche con la presentación de Luna y Cantera, integrado por las bailaoras y maestras Lizette Barrón y Paulina Chuck, que decantaron el porte regio hilvanada en ritmo e intensidad en conjunción de una portentosa y técnica impecable, acompañadas por el cante de Denise Martínez, Laura Zavala y Gisela Marin en las palmas, Guillermo Barrón en la tabla, Jorge Cabal en la guitarra y dirección musical.
Para unirse al tablao tanto Yumei Cordero como Natllely Torrencillas y de esta forma dar por concluida esta peña flamenca
Así como anunciar de las actividades académicas que tendrán para el mes de mayo y junio.
Con la master class y la jam session que ofrecerá el músico cubano Alain Pérez, bajista del músico y compositor español Paco de Lucía, este 11 de mayo, así como vendrá a compartir sus conocimientos la bailora sevillana Carmen Ledesma, una voz autorizada para comprender lo que es la clásica escuela sevillana.
Carmen Ledesma (Sevilla, 1956) baila flamenco. Pero flamenco puro. Lento, como Dios manda. A compás. Por derecho. Sin artificios. El flamenco que araña las mallas del alma. Por eso le llaman almas flamencas de medio mundo para que les enseñe a bailar.
Por su parte, Alain Pérez. Pocos músicos han estado en el corazón del sonido de artistas como Chucho Valdés, Celia Cruz, Issac Delgado, Los Van Van, Enrique Morente y Paco de Lucía; Alain Pérez es uno de ellos.
Nació en Cuba en el año 1977 y se convirtió en un destacado bajista, cantante, compositor, arreglista y productor musical. En La Habana se graduó en guitarra, bajo y dirección coral. Fue bajista y director musical del grupo de Issac Delgado, participó en los conciertos de Team Cuba y luego se trasladó a Madrid, ahí cambió el ritmo de esa ciudad en la que cubanos y flamencos se entendían y practicaban un lenguaje común más allá del jazz, del son y de la bulerías. Alain armó la banda europea de Celia Cruz y se ganó ser parte de África-Cuba-Cai. Paco de Lucía le invitó a grabar el CD Cositas buenas y desde entonces se convirtió en el bajista de la última banda del afamado guitarrista español. En la actualidad, el músico cubano promociona el CD El cuento de la buena pipa, al tiempo que trabaja el espectáculo de latín jazz El viaje.
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