jueves, 29 de septiembre de 2022

Ser sobandera, es un don de Dios: Aida Candelaria Carrasco



Por: Roberto A. Valenciano Capín

Sin escatimar esfuerzos, la tradición de la cultura huasteca sigue más que presente en esta 25 edición de la Fiesta de la Huasteca en el Pueblo Mágico de Aquismón.

Ya que hablar de los huastecos, es hablar de  la fraternidad, de diversidad cultural, orgullo y riqueza que se vio presente no solo en la velaria colocada en la plaza principal que se resguardan estas sonoridades de la banda de viento que se extienden a través de zapateo, su alegría y vida.

Mientras tanto, en una de las bancas de la plaza de este Pueblo Mágico, hace gala de su talento de sobadora  Aida Candelaria Carrasco, quien confirma que este es un regalo de Dios que le fue dado.

Cande, como también se le conoce, originaria de Xicotepec de Juárez, Puebla, quien porta con orgullo su vestimenta tradicional, en conjunción de su alegría,  siempre estar sonriendo con su gran humor, como también siempre esta dispuesta a echar la bailada.

Mientras relaja con sus dedos aquellas tensiones que se reflejan más en las expresiones del sobado, ante las preguntas pertinentes de la tradicional sobandera con más de diez años de experiencia en dar a Dios este regalo de ser sobadora, o como un doctor le atribuyerá  esta dioscidencia a la también peregrina de la Virgen de Guadalupe de Xicotepec de Juárez, Puebla.

Quien reconoce y a su vez es agradecida con su madre , doña Felipa Gayoso Villar, quien también es una sobandera tradicional con aproximadamente cuarenta y cinco años de trabajar en  la sobada, como también ser una partera tradicional que utiliza mucho de lo que se ha hablado hoy en día sobre las hierbas, al hacer referencia a la presentación editorial -Herbolaria de los Tének de Veracruz- en este Festival de la Huasteca. Así como comentar que viene de una familia de sobandores. 





De hecho, "el sobar es para acomodar, reorganizar,  volver las cosas a su lugar, en este caso, un hueso de un brazo dispado, una contractura muscular que se te inflama, si la columna se te desvío, ponerla en su lugar". 

Al aclarar que la sobada implica masaje que lo realiza en un tapete de palma soportada por una colchoneta, un bote de crema y sus habilidosas manos.

Comenta que “hay masajistas que te hablan de salud y de todo eso. En mi caso, yo soy sobandera tradicional y mucha gente tradicional usa crema caliente, tú servidora no, porque yo aprendí en la peregrinación vamos expuestos ya que empezamos a caminar a las dos o tres de la mañana,  vamos en la lluvía y en el frío y no puedes usar cremas calientes, entonces uso mi crema y mis dedos, de hay que su sobada tradicional es hacer una especie de masaje de manera circular en su caso, quien no usa más que la palma de la mano”, de hay que refrenda su anuncio de masajes suaves y profundos, luego meter los dedos pulgares, meter el muñeque que vienen siendo los otros cuatro dedos para poder disolver la parte más dura, ya que Dios es él que te inspira y es él que te va dictando que hacer "

Por otra parte, comenta que no solo es la práctica misma, sino también se ha documentado, "he leído, ahorita ya no pude tomar un curso que iba a tomar por que ya me iba a venir había un curso en línea de la técnica del rebozo, yo lo se hacer de una manera práctica", pero sigue aprendiendo de esta técnica del rebozo tradicional, al probar que el rebozo tiene la misma consistencia que contiene ese caríbolo, como contiene una respuesta para mantear a las personas, para mantear a los niños, a las embarazadas, para mantearlas e ir acomodándoles el bebé, para apretar a las niñas que tienen  problemas de menstruación,  al reconocer que no sabía en cuanto a este problema de la menstruación y que la práctica se lo hizo saber.

Para finalizar esta amena charla, recomienda plenamente la sobada "que me perdonen mis niños que están estudiando terapia física, pero si ellos combinarán terapia física con el manteado del rack del rebozo y la sobada tradicional ya están del otro lado, nada como una sobada porque en las terapias te dicen cinco, diez sesiones y el gasto que hacen en las sesiones, por eso en una, dos, tres sobadas ya quedaste, pero yo te garantizo que a la primera quedas. Bueno, no es cuestión de jale, es cuestión de Dios, de diosito que nos va a ayudar".

Recoge sus cosas y sin más se despide para irse a cambiar para estar lista para la huapangueada, no sin antes sonreirte e ir trazando  camino para lo que sigue.

1 comentario:

HECTOR A. GUERRA dijo...

Excelente Mujer, Maestra, Sobadora,Huapanguera y una grandiosa Amiga!!!!!!