Por: Georgina Olson
Un Bosque del Futuro en el que conviven hermosos tulipanes, hongos silvestres y lagos con puentes incluidos, todos construidos con desechos de plástico de colores, está creciendo en el Jardín Botánico de Chapultepec, a través del trabajo creativo de un talentoso escultor danés, Thomas Dambo, famoso en Europa por sus gigantes esculturas de hombres y gnomos de madera.
Cómo invitado especial del Festival de Flores y Jardines que dio inicio este 20 de abril, Thomas está usando desechos de plástico de la ciudad de México para construir su Bosque del Futuro, con su equipo de 9 escultores, 800 estudiantes de la UNAM, alumnos de primaria y adultos mayores.
“Normalmente cuando empiezo a construir un proyecto voy y busco algunos materiales en el lugar donde estoy trabajando, y aquí en la ciudad de México fuimos a un enorme tiradero y encontré estos desechos de plástico. Cuando vi estos botes azul turquesa, pensé ‘estos podrían ser hermosos pétalos de las flores” explicó Thomas a Excélsior.
Mientras habla de su trabajo, Thomas muestra una flor cuyo tallo está elaborado con cubetas multicolores, con hojas enormes, y centros construidos con lo que alguna vez fueron escurridores de cocina, en tonos blanco, amarillo y rosa.
La flor mide unos tres metros de alto y en 5 días de trabajo han construido ya media docena de ellas. Al caminar por este Bosque del Futuro en proceso de construcción, uno llega hasta un riachuelo hecho con botellas verdes de refresco, y en medio se levanta un hermoso puente de madera.
“Aquí vamos a construir una tortuga gigante” dice Thomas mientras sube al puente, y esboza una sonrisa gigante al pensar en el resultado final que tendrán tantas horas de trabajo.
Y siempre pensando en la siguiente figura que va a hacer, de pronto toma una pequeña botella de plástico color rosa del piso y dice al vuelo “esto podría convertirse en un ratoncito, si le encontramos unas orejas adecuadas, y ojitos”.
Todos los integrantes de su equipo son habitantes de Copenhague, capital de Dinamarca, y se les ve muy concentrados, algunos usando gogles para proteger los ojos.
Por momentos usan taladros para colocar una tapa de refresco que hará las veces de centro de una flor, para después ir colocando los pétalos que son tapas de botes de yogurt, y así van construyendo su bosque.
Detrás de todo ese esfuerzo creativo de Thomas y su equipo, también hay un poderoso mensaje: “Si seguimos tirando basura por todos lados, así se va a ver el paisaje en el futuro. Todo lleno de basura”.
Thomas tiene una profunda consciencia sobre los objetos que usamos a diario, la posibilidad de reciclar, y la necesidad de dejar de usar tantos objetos de plástico que después se podrían convertir en enormes islas de desperdicio.
Y siempre pensando en la siguiente figura que va a hacer, de pronto toma una pequeña botella de plástico color rosa del piso y dice al vuelo “esto podría convertirse en un ratoncito, si le encontramos unas orejas adecuadas, y ojitos”.
Todos los integrantes de su equipo son habitantes de Copenhague, capital de Dinamarca, y se les ve muy concentrados, algunos usando gogles para proteger los ojos.
Por momentos usan taladros para colocar una tapa de refresco que hará las veces de centro de una flor, para después ir colocando los pétalos que son tapas de botes de yogurt, y así van construyendo su bosque.
Detrás de todo ese esfuerzo creativo de Thomas y su equipo, también hay un poderoso mensaje: “Si seguimos tirando basura por todos lados, así se va a ver el paisaje en el futuro. Todo lleno de basura”.
Thomas tiene una profunda consciencia sobre los objetos que usamos a diario, la posibilidad de reciclar, y la necesidad de dejar de usar tantos objetos de plástico que después se podrían convertir en enormes islas de desperdicio.
“Mis padres eran hippies de los años sesenta y ellos aplicaban en casa todo el tema de reciclar las cosas” platica durante la entrevista.
A un lado del bosque en construcción, hay varias docenas de cajas con desechos de plástico cuidadosamente clasificados por tamaños y colores, sin embargo Thomas aún necesita muchos más desechos de plástico para terminar su obra de arte.
Y le dice a nuestros lectores: “si ustedes tienen desechos de basura que nos puedan donar, por favor mándenos una foto a la cuenta de Instagram @thomasdambo y nos pondremos en contacto con ustedes”.
Después de participar en el Festival de Flores y Jardines en la ciudad, Dambo irá a Chicago a construir otras seis esculturas gigantes, y después lo esperan en Beijing, donde realizará otra instalación gigante.
Un Bosque del Futuro en el que conviven hermosos tulipanes, hongos silvestres y lagos con puentes incluidos, todos construidos con desechos de plástico de colores, está creciendo en el Jardín Botánico de Chapultepec, a través del trabajo creativo de un talentoso escultor danés.
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