Por: Roberto A. Valenciano Capín
No solo fue pasar la imponente puerta que sirve de antesala para disfrutar de la belleza arquitéctonica del Centro Cultural Muiniciapal, para sin más remontarnos a las épocas del barroco con el gran estupor de la forma de concebir la vida, que va desde el vestuario, maquillaje, atuendos y demás artilugios, sino que también conlleva el esplendor de la música, siendo uno de sus máximes representantes, Antonio Vivaldi a través de sus cuatro estaciones, al compartir en esta ocasión su estadio con las contemporaneidad pero llenas de virtudes que conlleva al creador latinoamericano Astor Piazzola y dar como resultado un concierto muy su generis titulado "ocho estaciones" a cargo de la orquesta Viva Vivaldi bajo la dirección del Mtro. Miguel Meissner.
Al destacar en su momento el profesor Michael Talbot, uno de los más eminentes estudiosos de la vida y de la obra de Antonio Vivaldi, nos dice que: “muchos oyentes deben haber descubierto que es mucho más fácil confundir una composición de Vivaldi con otra, que identificar erróneamente a su autor”.
Como se dicen por ahí la tercera es la vencida, pues así sucedió después de que varias veces fue pospuesta por situaciones ajenas a mabas instituciones culturales, aun así se gestó y se realizó este magnífico concierto que resonaron y llenaron de musicalidad del patio que integra el Centro Cultural Municipal.
Al iniciar su repertorio, el conjunto ataviado a la usanza de Vivaldi al abrir con la resonancia de la primavera del genio italiano para después interpretar esta misma estación bajo el sentir del toque sureño de Astor Piazzola.
Para proseguir con las demás estaciones de forma intercalada, destacándose la excelente interpretación de esta agrupación de 13 solistas especializados en música barroca , así com0 los arreglos hechos expresamenta a las cuatro estaciones porteñas a cargo del Mtro. Meissner.
Con mucho optimismo y cordialidad por parte del Mtro. Meissner, tuvimos la oportunidad de tener esta amena plática, mientras algunos de sus púpilos daban los toques a su instrumentos, en cambio otros disfrutaban en una pequeña sala un partido de fútbol. Esto fue lo que nos comento.
¿Cuál ha sido la magia que tiene este programa al enfrentar a un Vivaldi ante un Piazzola?
"Bueno empezando por el título -ocho estaciones-aunque sabemos que existen cuatro, pero juntando las famosas cuatro estaciones de Vivaldi con las cuatro estaciones porteñas de Astor Piazzola ya dan ocho e intercalar Piazzola con Vivaldi da una mezcolanza de estilos y sentimientos muy lindos que el público les fascina esta fusión".
Hay que recordar que esta fusión se dio por que Piazzola en los noventas hizo un homenaje a Vivaldi, él con sus cuatro estsciones porteñas en donde nuevamente incluye en varias partes motivos de las cuatro estaciones de Vivaldi, en su manera de una forma no original de su citación pero si en forma de trabajo, sin embargo nunca sale de su ambiente de tango.Entonces son estaciones tangueras, lo cual es una buena alternancia con el barroco que explande Vivaldi.
Podemos hablar que este tipo de concierto puede ser un acercamiento a la gente que no este habituada a la música contemporánea, a lo que comento:
"Bueno muchos prefieren a Vivaldi u otros que les encant el tango, e incluso escuchando a muchos se les va la onda y ya no saben que están escuchando si Vivaldi o Piazzola.Nosotros tocamos con todo este vestuario histórico que incluye pelucas y no esta tan fácil, al aclarar su director que no todos sus integrantes son músicos proefesionales así que inmediatamente distinguen música de siglo XX a una barroca".
Al destacar que sus presentaciones se vuelven más bien hoy en día sería un show audio-visual sin perder su magia, "porque no solamente los oídos disfrutan de un concierto normal sino también los ojos, con toda esta vestimenta y el ambiente, el cual realmente se vuelve en un viaje al pasado muy lindo para el público".
A pesar de su formación académica como violinista fue parte vital el vivir con Vivaldi, para el Mtro. Meissner es sin embargo un talante en sus primeros estudios en serio, al destacar "que así como hay conciertos muy fáciles como muy difíciles te acompañan durante toda tu vida y desde los sesentas, setentas y ochentas del siglo pasado hubo un gran resurgimiento de tres representantes del barroco como Nicolas Anojud que empezaron a tocar con un estilo diferente, como ellos dicen- más original-, en cierta manera tienen razón pero a ciencia cierta nadie sabe".
Continúa: "Empezando con el speech si el La estaba en 440 o más bajo o más alto, pero ahí muchas opiniones encontradas.Pero todo esto no importa, lo que importa es que esta música no se quedo en los armarios, sino otra vez es gran hito y un gran deleite para cada público porque es música propositiva y no conflictiva que te carge de conflictos emocionales como las grandes sinfonías románticas co n Mahler , sino es música que parte de una actitud muy positiva de representar algo lindo, algo virtuoso y alegre, yo creo que por eso tiene un éxito con todos los públicos".
En cuanto a Piazzola dijo: "es el tango y también hay una gran moda hacia el tango pero no tan larga como la modade la música barroica, epro sobre todo Piazzola revivió el tango y lo llevo a las salas de concierto en su forma virtuosa, bastante agresiva y ampliada e incluso le llamaron -el asesino del tango-, entoncesces son tangos pero ya no son tangos porque difícilmente alguien podía bailar sobre esta música.
"A pesar de preservar esta actitud virtuosa, sin embargo ha perdido toda esa esencia de la nostalgia de Buenos Aires, sus bares con sus prsotitutas, donde todo este ambiente nació el tango, sino se volvió por sus características rítmicas, armónicas, melódicas como un modelo de música de concierto y eso si gracias al gran maestro Astor Piazzola.
Si pusieramos a Vivaldi y Piazzola como imágenes dentro de su concepción de un show músico-visual, ¿Cuáles serían éstas?
"Yo creo que casi la imágen que presentamos en este concierto con músicos con esta vestimenta barroca, con las medias blancas, pelucas y como era en ese entonces los jeans de mezclilla de ahora, así todo el mundo andaba igual, pero cuando se trataba de conciertos de la corte, así se tenían que vestir por la imágen que tenemos".
"Hay que recordar que Vivali era pelirrojo, le llamaban el Prete Rosso-el padrecito rojo- pero en concierto tenía que ponerse su peluca. En contraposición a Piazzola que lo remonta irremediablemente al tango, esas películas del sur, con su noche, la nieblina, todo triste y con llovizna. este ambiente argentino con su matiz de estar en donde están pero siempre se sienten lejos de algo, así que nos volamos un poco, pero lo que es realmente el tango."
Para finalizar agradeció a la ciudad de San Luis Potosí, así como al H. Ayuntamiento Capitalino a través del Departamento de Arte y Cultura por ofrecer este tipo de conciertos.
Para más información de esta agrupación musical, pueden checar: http://www.vivavivaldi.com/
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