jueves, 8 de agosto de 2013

Un Macbeth en su propia ciudad de insomnio, cerró esta XXXIII edición del Festival Internacional de danza contemporánea Lila López



En memoria del Mtro. Eduardo López Lemus

Por: Roberto A. Valenciano Capín

Bajo una lógica dramática predecible entorno a esta  infalible Macbeth, ahora bajo esta versión dancística de "Macbeth, ciudad de insomnio". Un trabajo multidisciplinario escénico es lo que ofreció la Compañía Apoc Apoc y  del Centro de Producción de Danza Contemporánea (Ceprodac) del INBA como parte de la clausura del  XXXIII Festival de danza contemporánea Lila López en el Teatro de la Paz.

La propuesta de A Poc A Poc tiene como propósito el estudio y transformación de las metáforas utilizadas por Shakespeare para la construcción de un espectáculo escénico, donde el público sea capaz de interactuar y decidir en cada momento.

Asentada sobre un espacio geográfico difuso y con la virtud de estas atmosferas propuestas bajo su puntualidad dramática y la lectura de una ubicuidad de estas desquiciantes, fulgurantes escenas.

Un Macbeth representado en esta bizarra faceta de rockstar, líder de una banda de rock con una diligencia mas  hacia el desenfadado glam y egocentrismo que la irreverencia misma, en conjunción con toda esta parafernalia tecnológica: la banalización de la existencia en programas de espectáculos televisivos y la violencia reflejada en el sonido estridente y escabroso de una banda de rock en vivo.

De esta manera, el espectador se enfrenta a una experiencia estética  con ciertas expectativas, mas sin embargo, con esta Lady Macbeth desnuda con una expresión corporal de fastidiada espera en uno de los balcones de este Coloso de Villerías, quien asume su pulso, para sin mas subir y gratificar el encuentro con su otredad Macbeth.

En una primera lectura se veía algo interesante, a pesar de llegar a escena uno de los personajes secundarios y empezar a cuestionar al público con una seriación de preguntas y después de ahí, bajo una serie de sortilegios o una línea pulsada y clara  que hará detonar y desentrañar esta dramaturgia shakespereana abordada desde la visión del coreógrafo, Jaime Camarena, en donde el movimiento surge como esa respuesta automática, sintomática de toda esta afluente de grotescos y sugerentes gestos que salen y se vuelven envolventes en su propia y asfixiante existencia.
 
En donde en momentos se destaca mas la fuerza de la imagen que en el mismo movimiento, a pesar del manejo de sus personajes entorno a estas celdas- habitus- en esta puesta en escena.


Textos fragmentados, insolutos en si mismos, a pesar de esta constante de increspar -cuestionar- al público,  denotándose mas una posición frágil, al colocarlos en un terreno que no dominan, el de la actuación, sintiéndose desarmados a pesar de la fuerza del ambiente creado.
 
Aun así, es de destacar la sobresaliente interpretación de Raúl Tamez, quien construyó a una Lady Macbeth delirante.

Un Macbeth enredado en su propio ego, su propio sentir que quedo autoexiliado de su ambición misma de poder, para naufragar en su propia enajenación.

A Poc A Poc surgió en 1994 en la Ciudad de México, ha participado en festivales de reconocimiento en México y en el extranjero.



La compañía fue seleccionada como integrante del mercado de las artes escénicas de la Association Performing Arts Presenters de Nueva York. Ha sido premiada dos veces con el Premio INBA UAM y una con el Premio Iberoamericano de Coreografía de La Habana, Cuba.
 

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