"...Que no descubran tus manos" de Antares Danza Contemporanea cerró la XIX edición del Festival Nacional e Internacional de danza contemporánea Oc´-ohtic-lo bailamos, lo danzamos-. Un tributo a la memoria de Eduardo López Lemus.

In Memoriam a Eduardo López Lemus

Por: Roberto A. Valenciano Capín

Bajo el pretexto de la versión del drama shakesperiano, Romeo y Julieta,  el  coreógrafo y director de Antares Danza, Miguel Mancilla ofreció al publico yucateco su mas reciente trabajo coreográfico "...Que no descubran tus manos".

Una obra en dos actos en la cual entrelaza las ganas, los miedos, las posibilidades de las diferentes formas telúricas del amor, desamor, el deseo y la lealtad.

Mancilla también aborda esta capacidad de salvación a pesar del caos y el poder de creer con los ojos cerrados.

No solamente  logra este poder de transformación sino asume con aplomo el recaer en el mismo danzar, aunado a ser un tema que se identifica en la parte que "a uno le gustaría tener una historia de amor así de contundente, no importa la edad ni el momento que vives".

Así como ser testigo de su consistencia al abordar una temática que refleja la condición humana a partir de sus ambiciones creativas y mostrar sus puntos ciegos sin cortapisas.

Una obra de suma empatía y frenesí por el hecho mismo del ser y el estar a pesar de una  visibilidad deriva precisamente de esta incertidumbre de cuando nos prohíben algo.

A pesar de esta violenta confrontación tiene el acierto de la simultaneidad dentro de los parámetros de los deseos y el poder de confrontación a través de este acto de vulneralizarse pero a la vez existir el cobijo.

Una pieza llena de delirantes metáforas hechas movimiento, gran fluidez, gran fisicalidad de sus bailarines, las emociones a flor de piel que se congregan en un discurso sostenido gracias a esta discursividad  sustentada en sobreponer historias y de esta manera lograr ser estos vasos comunicantes de este despliegue en sus personajes y la infalible lógica dentro de los parámetros del concepto de familia-propiedad-identidad.

Un respiro, un intermedio y esa ausencia de energía electrónica en este espacio del teatro Armando Manzanero hizo que se acentuara este encantamiento a un espectador y participe de este juego propuesto por Mancilla.

Por encima de otrora final, Mancilla logra con acierto desplegar este premisa de las decisiones, las cuales serán las únicas que cargaremos siempre en esta vida.  

 

De esta manera ser la función que cierra con broche de oro esta XIX edición del Festival Nacional e Internacional de danza contemporánea Oc´-Ohtic-lo bailamos, lo danzamos-. Un tributo a la memoria de Eduardo López Lemus.