La Compañía Mexicana de Danza Contemporánea, presentó en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, una Gala dancística In memoriam Guillermo Arriaga, tributo a esta figura imprescindible en la danza contemporánea mexicana, quien a sus 80 años de vida, y junto con Rodrigo González, fundó esta agrupación en 2007, misma que continuó dirigiendo hasta su fallecimiento el 3 de enero de 2014.
Rodrigo González, director de la Compañía Mexicana de Danza Contemporánea, detalló que más que un homenaje, será una celebración: “él recibió todos los homenajes que podía recibir en vida, afortunadamente. Para nosotros es un motivo de celebración poder seguir representando su repertorio, así como otras obras que él interpretó”.
De tal manera que para este programa la compañía montó las piezas La balada del venado y la luna, de Ana Mérida, con una recuperación de los diseños de Leonora Carrington y música de Carlos Jiménez Mabarak, para continuar con La danza de los desheredados, fragmento del ballet La Coronela, de Waldeen, que incluye un poema de Efraín Huerta. Asimismo, se interpretará Soy, última coreografía que compusiera Arriaga en 2008.
Como invitados estará el maestro Raúl Tamez con la obra Payaso Capital, pieza lúdica con una crítica social muy aguda, con elementos de clown, teatro y danza contemporánea.
Con estas piezas, aseveró el director de la compañía, el espectador pudo ver dos ángulos de la danza contemporánea: la primera con coreografías de los años 40’s o 50’s del siglo pasado, y la segunda será el contraste con la danza que se hace hoy en día.
“Para esta gala, la compañía no podía dejar de bailar Zapata, obra cumbre de Guillermo Arriaga de 1953, con diseños de Manuel Covarrubias y música de José Pablo Moncayo, en una versión orquestal poco conocida, dirigida por el maestro Armando Sayas”, añadió.
Asimismo, dijo, se contó con la presencia del maestro Domingo Rubio, uno de los grandes bailarines de México y el mundo, y de Luis Fernando Palatto. Para esta gala, la bailarina Cora Flores revisó personalmente algunas piezas en las que ella colaboró en algún momento.
La iluminación estuvo a cargo de Rafael Mendoza y un elenco conformado por Domingo Rubio, Miriam Gonzáles y Eduardo Flores, entre otros bailarines.
Guillermo Arriaga
Coreógrafo, bailarín, investigador, promotor cultural y autor de textos sobre danza. En su quehacer dancístico dejó un legado que mantiene viva la memoria, pues a través de la danza, registró y transmitió la belleza y el colorido del arte mexicano al tiempo en que continúo con la experimentación coreográfica.
Fue miembro de la Academia de la Danza Mexicana; primer bailarín, maestro y coreógrafo del Ballet de Bellas Artes; director escénico y maestro del Ballet Folklórico de México; presidente de la Sociedad Mexicana de Coreógrafos, y miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca).
Entre los más importantes reconocimientos que obtuvo se encuentran el Premio Nacional de Ciencias y Artes, en el área de Bellas Artes (1999); la Medalla de Oro de Bellas Artes (2003), y la Medalla Miguel Covarrubias, el año pasado.
Rodrigo González
Ha colaborado en agrupaciones como la Compañía Nacional de Danza Folklórica, la Compañía Nacional de Ópera, la Ópera de los Ángeles, el Ballet Independiente y en montajes internacionales con el Ballet Royal, el Teatro Regio di Parma, el Ballet de la Scalla de Millán y el Ballet Kirov del Teatro Mariinsky.
Su trabajo lo ha llevado por Argelia, Japón, Marruecos y Uzbekistán, tiene un acervo de más de 20 obras entre las que destacan: La Muerte del Quetzal, Altar Monumental y El Encuentro, estrenadas en el Palacio de Bellas Artes.
Es productor teatral de las obras La Cena del Bicentenario de Antón Araiza, Homo melodramáticus de Ignacio Flores de la Lama y es dramaturgo y director de la obra Voces e Imperio.
Fuente: Secretaría de Cultura de la Ciudad de México
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