La Summa de la sombra del roble. Oc´-Ohtic 2015-tercera entrega-

 

Fotos: Cortesía de Karla Rodríguez Torres / Festival Oc`-Ohtic

 

Por: Roberto A. Valenciano Capín

In sempre memoriam de Eduardo López Lemus


 

Mérida, Yucatán. Afortunadamente no solamente quedo en buenas intenciones, aun así provoco en muchos de los asistentes estas legión de risas y el sumo aplauso en este icónico teatro meridano, Armando Manzanero,  al presentarse la coreografía - Buenas Intenciones en 01:19:00- de Tumáka´t danza contemporánea, bajo la dirección de Vania Durán en esta XXI edición del Festival Nacional e Internacional de danza contemporánea Oc`-Ohtic.

 

 

 

Una coreografía de Luis Bassioto.  Resultado de Innombrable, proyecto seleccionado para recibir el apoyo de Iberescena en 2014. Una coproducción entre el director y coreógrafo argentino Luis Biasotto, la compañía mexicana Tumàka’t  y la compañía panameña Gramo Danse.

 

Sustentada en esta libertad  de la  improvisación y esta mirada de cada uno construye un enfoque, a partir de estas experiencias, "sobre todo porque es el momento donde su archivo del cuerpo e ideas comienzan a llenar una especie de hoja en blanco escénica, su bitácora creativa, que es como la llamo", comento en una entrevista a un diario, su coreógrafo.

 

 

 

A partir de este planteamiento los intérpretes no solamente hay esta plena libertad de moverse en el espacio, sino también esta dramaturgia del cuerpo que está abierta a través de estos puntuales detonadores como son estos bocetos, pequeñas piezas, performance, ideas, danza de acción, acciones físicas  pero que todos convergen  en una danza en acción y pensamientos.

 

 

De ahí transitar  bajo este desapego en cuanto a la construcción/reconstrucción de estas escenas/ acciones en donde se vuelven territorios por explorar y habitar; aunado al  espacio que se vuelve no solamente en esta huella que se dibuja en el tiempo;  sino saberse que el tiempo no solamente se vuelve aliado, sino también se vuelve "traidor, burócrata, político, cruel, compañero, amigo/gran enemigo, donde un simple detonante puede cambiar radicalmente el curso de los hechos".

 

De ahí, este entrelazamiento que hace este permanente eco a partir de cada individualidad de los personajes para detonar estas variantes que congregan esta corporeidad como son los variados sentimientos que van desde la hostilidad, los celos, la rivalidad, la confrontación, el reencuentro, la amistad, la cordialidad, la ternura y el amor.

Indudablemente no hay dejo a esta intención de "lograr una especie de contagio en el espectador, que imagine cómo podría seguir lo que se iba construyendo/comunicando".

 

 

 

Una pieza que a pesar de causar esta contundente risa gozosa u nerviosa en su caso, se sostiene entre este imperante caos ante la incomodidad de algunos de los asistentes, aun así puede cumplir esta apremiante, desafiante y cautivante hecho escénico.

Co-creadores escénicos: Melisabel Correa,  Verónica Santiago, Manuel Fajardo, Melisa Queto y Tomás Gómez.

Música:  Gonzalo Cárdenas y Amaury León.

 

Dentro del compromiso que ha asumido este decano  festival danzario es de ofrecer y llevar propuestas dancísticas a otras espacialidades, en donde se busca converger y conferir este diálogo y conocimiento a través del hecho escénico. Por segundo año consecutivo  se gestó este encuentro en el Centro de Educación Artística Emilio Abreu Gómez CEDART, en esta edición se ofrecieron tres propuestas coreográficas y un taller.

En primera instancia, fue la propuesta coreográfica - Interplanetario. Danza de ciencia ficción- por Makina DT. Escena-Movimiento, bajo la dirección de Gervasio Cetto. Un proyecto interesado en la investigación y producción de propuestas escénicas transdisciplinarias.

 

Una propuesta sumamente  interesante, cuestionadora y a la vez provocadora.  Al no solamente plantear esta búsqueda de estos mecanismos para entablar comunicación con dos alienígenas, sino también generarse esta reflexión a esta infalible pérdida y esencial como es la decodificación y uso del lenguaje no verbal no solo en nuestra cotidianidad sino en el mismo hecho escénico.

 

Es así como a través de puntuales preguntas y bajo la conducción de dos investigadores es cómo se gestiona y se lleva a cabo este diálogo entre lo que pasa y lo que puede suceder en el entendimiento entre el comunicante y el comunicado.

 

 

Con antelación, un grupo de estudiantes a través de  preguntas dadas, sus integrantes realizan esta parte comunicante a través de su propio lenguaje corporal, para ser codificado y transmutado a través de esta serie de movimientos fluidos, cortantes y puntuales, comunicantes por parte de los extraterrestres y de esta manera volverse en este punto concomitante, sino también este universo simbólico y  entrecruce de universos para poder entrar en este mundo habitado y conformado por todas estas situaciones no verbales que determinan una relación con los otros y con la realidad que la conforman.

 

Para después realizarse un interesante conversatorio de los supuestos investigadores y los jóvenes estudiantes en cuanto si han sido contestadas plenamente cada pregunta que se les hizo. Así como si realmente comprendieron mi pregunta y por tanto,  comprendí su respuesta.

 

 

 

 

 

De esta manera, se generó esta reflexión  sobre este nada hipotética reconfiguración que actualmente vivimos, al transitar sustancialmente a través de lo visual y lo sonoro.

Co-creadoras escénicas: Melisa Quero y Andrea Urban.
Diseño Sonoro y sonorización en vivo: Teresa Novelo y Elías Puc Sánchez.


Así se unen a esta sombra,  abrigo y volverse esta ventana de este roble en  esta búsqueda de fortalecer los senderos del ejercicio  de acompañar a los creadores a desarrollarse y lograr este generador de encuentros entre el creador y el público, así como agudizar los sentidos a este bello y noble arte tepsicoriano en estas tierras meridanas-yucatecas.