Fotografías: Cortesía del IPBA / Analucina Garza
Por: Roberto A. Valenciano Capín
Lo primero que hicieron
los niñ@s fueron dirigirse a esta mesa en donde se encontraban expuestos los
libros de Vivian Mansour a pesar de las ordenes de las maestras que tomaran
asiento. Todo esto se dio en torno a la puntual presentación de los libros
"Había una vez, pero al revés y Lotería de piratas" de la escritora
oriunda de la CDMX, en la galería Antonio Rocha Cordero del Instituto Potosino
de Bellas Artes.
Todo gracias al
incansable trabajo de la promotora de la lectura infantil y directora del Taller editorial Letras con más, María Eugenia Urbina, quien no
solamente busca que los niñ@s tengan este hábito a la lectura y por tanto a
este imaginario que dan estas lecturas, sino también han darle un lugar a la
presentación de literatura infantil que ha sido un tanto delegada.
Así como también al
trabajo de Saúl Castro, responsable del área de literatura del IPBA.
Pequeños un tanto
inquietos pero participativos de las escuelas Ignacia Aguilar y Montessori al
momento de la presentación, quienes la disfrutaron, gracias a que su autora,
Vivian Mansour hizo una divertida travesía al narrar en su propia voz, algunos de sus libros como: El peinado de la
tía Chofi, ¡Fuiste tú!, Había una vez pero al revés.
"Me gusta mucho
leerlos a los niños para que conozcan las construcciones, ya que la narración
oral es muy importante y también es importante que vean la construcción de las
oraciones".
Así como considero que
también hay historias que se huelen y no solamente se ven y se escuchan, como
lo fue el cuento ¡Fuiste tú!, por cierto, muy celebrado por los pequeños.
De ahí que sus historias
son de situaciones que le pasa o ve que se le hace interesante escribirlos, las
cuales recrear y las escribe, de ahí que no les gusta las moralejas. "Mis
cuentos no tienen algún tipo de enseñanza ni moral, ni ecológica, ni religiosa.
Si de repente un niño capta un mensaje en una historia me parece valido, pero
nunca es mi objetivo principal o ideal que tenga una enseñanza. Yo creo que en
el acto de ver en sí mismo entraña una enseñanza conjunta, si el niño se pone a
leer ya será algo benéfico para él".
Eso sí, "con el
ánimo y la ambición de que un niño que en la tarde se dedique a leer y que vean
que el libro es un disfrute; está bien que jueguen videojuegos, que estén
chateando, que jueguen en el celular, todos lo hacemos, pero que no se pierdan
la maravilla de contarse con la única magia de las palabras que se conecte con
alguien que no conoce".
Entre sus libros que más
le gustan se encuentran. -El enmascarado de Plata-, inspirado no solo en el
Hijo del Santo sino también ser una gustosa de la lucha libre. -El peinado de la Tía Chofi-, fue el primer
cuento que escribo y por tanto le tiene un especial aprecio, aunado a que fue
el que le marco finalmente su decisión a dedicarse a hacer cuentos para niños y
- Había una vez pero al revés- son historias en donde los adultos se comportan
como niños y los niños como adultos.
Una de las partes más
interactivas fue el invitar a dos pequeños para actuar entre sus risas
nerviosas el cuento -la decisión de la abuela-, además de contestar a estas
interesantes preguntas de los niños, como ellas las definió, por cierto, se llevaron
como regalo un libro firmado por la autora.
A pregunta expresa de si
es oportuno de apostarle a la lectura de novelas cortas para los niños, al
saber que abundan los cuentos.
"Creo que depende
mucho de cada niño, por ejemplo, algunas editoriales las clasifican como este
libro es para niños de 7 a 11 años, esas clasificaciones son muy relativas
porque depende de cada niño, de cada lector. Hay niños muy chicos que ya pueden
leer una novela más extensa, ya que tienen el grado de concentración más consciente
para entender una trama más larga y más complicada y a lo mejor hay niños más
grandes que no tienen el tipo de atención para leer una trama más compleja,
entonces les va muy bien los cuentos cortos. depende de cada lector y de su
propia formación y relación con los libros".
Quien reconoce que muchos
de sus libros son leídos también por adultos, "no solamente es literatura
infantil o juvenil, sino que sea buena literatura, que sea honesta y lo que
quieras decir parta de la sinceridad y honestidad y por tanto, no importa al
público que vaya dirigido".
Al destacar que sino
fuera escritora hubiera sido perfumista ya que tiene muy buen olfato, quien no
niega que ama ser escritora en especial para niños, ya que desde niña
disfrutaba la lectura y su inspiración fue gracias a Italo Calvino con “Si una noche
de invierno un viajero” y a las aventuras y los cuentos que le hubiera gustado
vivir y leer.
¿Cuáles serían estos
libros que conformaran una biblioteca para niños? . "Bueno para mí -Las
Mil y unas Noches, me parece un libro increíble, un libro que también adopta
mucho leyendas y tradiciones orales. De los actuales, Francisco Hinojosa con la
-Peor Señora del Mundo-, Toño Malpica en particular -Ulises 2300- es un gran
libro, -Alicia en el país de las maravillas-, un libro totalmente disparatado y
muy atrayente, que dentro del absurdo los niños comprenden muy bien este tipo
de cosas desenfadadas, -Moby Dick, -Tom Sawyer".
Entre sus proyectos se
encuentra la publicación de su primer libro para jóvenes, "me interesa
mucho el público juvenil porque el público infantil ya tenemos muchas
colecciones para ellos, pero perdemos mucho por los adolescentes, porque los
adolescentes tienen que estar sentados, desconectándose, en su silencio, con o
sin sus amigos y tomar la decisión de leer de un adolescente es difícil y
también es un público muy importante que no debemos de perder, que además
cuando eres adolescente y tienes una lectura apropiada y con la contundencia
emocional propia de la época, puede ser algo afortunado y muy enriquecedor para
su vida como adolescente, ojala logre el cometido de este".
Al finalizar la lectura
Vivian Mansour no solo firmó los libros con un mensaje especial para cada
lector, sino hasta se tomó fotos con ellos.
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