Por: Roberto A. Valenciano Capín
Fue estrenada la coreografia "Penumbra" por Unidanza Contemporánea de la Universidad Autónoma de San Luis, bajo la dirección del Mtro. Fernando Escalante Guevara en el Paraninfo Universitario Rafael Nieto.
En primera instancia, es su tercer trabajo coreográfico de largo aliento que se sustenta en los mitos que hay alrededor de los túneles de la ciudad, a partir del cual se crean esta narración de historias que muchas de ellas no pudieron salir a la luz y que se desarrollan en en este subterfugio, las cuales se entrelazan a partir de personajes como monjes, monjas, la feligresía, las puritanas, la iglesia y la muerte. Este continuo transitar entre el bien y el mal
A través de esta pequeña alma errante que transita de este inframundo al mundo terreno, es como se van llevando al espectador a este viaje en complicidad no solo estos túneles físicos sino de la interioridad en las historias de sus personajes.
Una propuesta escénica que aspira y se antoja más como una reflexión sobre la imposibilidad de evadir el destino y la comprensión del ser humano a través de sus historias. Cuerpo y memoria.
Una puesta en escena que en una primera lectura pareciera ser trazado desde esta literalidad, el cual si es así cumple su cometido, pero aun así, a pesar del infortunio de no ser tan dinámica la obra, a pesar de estar trazada en 14 pequeñas historias, una de las características de sus procesos creativos que ha distinguido a esta compañía de danza universitaria, que se conjuga con estos momentos muy bien logrados, como lo fueron algunas escenas bajo esta constante de la búsqueda de estas estéticas y plásticas imágenes en movimiento, aunado a la pauta de ser una obra que no esta basada en una situación histórica sino en una situación lúdica e imaginaria.
Una propuesta escénica que aspira y se antoja más como una reflexión sobre la imposibilidad de evadir el destino y la comprensión del ser humano a través de sus historias. Cuerpo y memoria.
Una puesta en escena que en una primera lectura pareciera ser trazado desde esta literalidad, el cual si es así cumple su cometido, pero aun así, a pesar del infortunio de no ser tan dinámica la obra, a pesar de estar trazada en 14 pequeñas historias, una de las características de sus procesos creativos que ha distinguido a esta compañía de danza universitaria, que se conjuga con estos momentos muy bien logrados, como lo fueron algunas escenas bajo esta constante de la búsqueda de estas estéticas y plásticas imágenes en movimiento, aunado a la pauta de ser una obra que no esta basada en una situación histórica sino en una situación lúdica e imaginaria.
Aun así, logran sus creadores: Cynthia Irurzo, Miriam del Pilar Morán, Fernando Escalante, Antonio Martínez e intérpretes conjugar el movimiento, el gesto, el ritmo y la intención de ir escribiendo con el cuerpo, no solo estas historias sino, este flujo de personajes que van y vienen, que aparecen y desaparecen, que avanzan y retroceden, absorbidos por ese devenir permanente de la vida, al ser solventado estas desavenencias gracias a una puntual iluminación y creo que una de las partes sustanciales que es el acercamiento a las artes escénicas a un público no conocedor.
Una coreografía que es apoyado por el Programa de Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias (PACMYC) el cual está orientado a desarrollar la cultura de comunidades y municipios, estimulando la participación local para fortalecer las expresiones comunitarias culturales.
Del cual para el Mtro. Escalante Guevara puntualiza que tanto para él como la compañía, “es un orgullo bien grande el haber sido acreedores de este apoyo y no de de la comunidad de la danza, ya que no estas con el gremio, con la danza, sino con otra parte en difundir la cultura para otros estratos y te ganas algo de danza, muy padre y un doble orgullo”.
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