Por: Fernando Huacuz
La comunidad El Cerrito, ubicada en Tecpan de Galeanala, en Costa Grande de Guerrero, fue el lugar donde el INAH descubrió un asentamiento prehispánico denominado "La casa sobre el agua".
El descubrimiento sucedió luego de que habitantes del municipio Tecpan de Galeana alertaron sobre la existencia de montículos prehispánicos. Enseguida, arqueólogos del INAH acudieron para realizar las primeras indagatorias.
Apancalecan, cuyo topónimo nahua es “La casa sobre el agua”, está referido en el códice Matrícula de Tributos como pueblo cabecera
Apancalecan, cuyo topónimo nahua es “La casa sobre el agua”, está referido en el códice Matrícula de Tributos como pueblo cabecera Frédéric Henri Jean-Marc Bochet./INAH
Los especialistas de la citada institución dieron a conocer los detalles sobre este asentamiento, el cual está distribuido en 29 hectáreas donde yacen 26 montículos, altares y estructuras alargadas que, de acuerdo con los especialitas, se encuentran en buen estado de conservación.
Por si fuera poco, los arqueólogos detallaron que las estructuras en cuestión delimitan plazas, áreas residenciales y canchas de juego de pelota. Además, la zona es semajante a la Zona Arqueológica Soledad de Maciel, en Petatlán, Guerrero.
Por otra parte, Rodolfo Lobato Rodríguez, responsable del Museo de Sitio de Xihuacan, detalló que estos conjuntos están distribuidos de manera periférica a un montículo de gran dimensión. Su base mide aproximadamente 73.5 metros por 60 metros, y 25 metros de altura, donde se registraron dos estelas lisas, dos afloramientos rocosos con pozuelos y pocitas.
Además, en en interior del complejo se descubrieron cavidades que se conjugan con las estructuras alargadas, posiblemente asociados al almacenamiento de agua y represas, pues el lugar "tiene un emplazamiento estratégico a 850 metros de la margen oriente del río Tecpan y a un kilómetro de la laguna de Tetitlán", añadió.
El espeleólogo Frédéric Henri Jean-Marc Bochet contribuyó a este mapeo con un recorrido periférico y una inspección aérea, en la cual se descubrió un altar con dos estelas gemelas en la cima del cercano cerro del Mono. Es en este punto donde está orientado el principal montículo del asentamiento recién descubierto.
A partir de este hallazgo, Lobato Rodríguez, plateó la posibilidad de que el sitio podría corresponder al antiguo pueblo cabecera de Apancalecan, el cual se hace referencia en el códice Matrícula de Tributos, que tras la invasión española se transformó en Tequepa.
Por otra parte, Lobato también habló sobre el significado del vocablo nahua de Apancalecan conformado por apan (apantli, canal de agua acequia), calli (casa) y can (locativo), por lo que se ha traducido como “Lugar de la casa con canales del agua” o “lugar de la casa con techos”.
“Por las características del material cerámico recuperado en superficie, entre las que destacan soportes anulares de estilo teotihuacano, pensamos que el sitio fue habitado desde el periodo Clásico (200-650 d.C.), siendo contemporáneo de Cihuatlán, otro importante asentamiento de la Costa Grande de Guerrero, y que tuvo continuidad hasta el Posclásico Tardío (1200-1521 d.C.)”, añadió el arqueólogo.
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