Por Rosario Manzanos
Pequeña, esbeita, pero con una estructura física fuerte y expresiva, Graham ha sido considerada —aun muchísimos años antes de su muerte— uno de los pilares fundamentales de la danza moderna Su trabajo atraviesa todo el siglo XX como el de una verdadera revolucionaria contra el arquetipo del ballet clásico Graham es la pionera en la invención de un nuevo y formalizado vocabulario dancístico, al lado de un innovador sistema de entrenamiento que la colocan como una de las grandes figuras artísticas de nuestro siglo.
Técnicamente su trabajo implica la modificación del movimiento Para ella la danza es un elemento revelador que expresa la naturaleza real de lo que se oculta, expresión de las emociones cotidianamente escondidas y que no se pueden manifestar en palabras: “No quiero ser entendida sino conmover”, señaló en alguna ocasión.
En 1926 realizó su primera presentación como directora de un grupo, utilizandó una serie de elementos innovadores en nada parecidos a las enseñanzas de sus maestros Ruth Saint Denis y Ted Shawn, fundadores de la renombrada escuela Denishaw en Los Angeles, California Sus danzas incluían movimientos angulares y cortados, así como el uso del torso en planos horizontales, contrariamente a lo que hace el ballet, donde el torso se proyecta en planos verticales.
Pero su aporte principal fue la búsqueda de la concentración de la energía hacia el centro del cuerpo.
Sus clases en aquellos tiempos estaban dedicadas a la experimentación de nuevas formas de movimiento a representarse en el escenario Su punto de partida era el trabajo realizado en el piso; estiramientos con diferentes patrones de brazos, y la experimentación de la multiplicidad de significados en el movimiento Lo simbólico siempre por encima de lo descriptivo.
En 1927, la fundadora de la compañía que lleva su nombre, a través de una profunda concentración de la atención en sí misma, da a su entrenamiento otro matiz inducido por los cambios que se generan en el cuerpo a partir de la respiración: la convicción (exhalación profunda) y el release (inhalación profunda) aparecen como lo que será el gran hallazgo de la coreógrafía.
La contracción se genera básicamente en la zona de la pelvis es la exhalación profunda del aire y conseguir que el torso aaquiera una posición cóncava El release, al contrario es la profunda inhalación con el alargamiento del torso Para que una alumna suya lograra garra en este movimiento, Martha Graham le hizo una broma, sintetizando en ella lo que deseaba expresar: “Se danza con la vagina”, pidió la temperamental coreógrafa, según escribió Roger Garaudy.
Curiosamente Graham no se atribuyó la invención de estas acciones Para ella, “el release es el momento de la vida en el cual se inhala, cuando te quedas sin aire es la contracción Son el primero y el último momento de la vida, y yo, los utilizo como una técnica para incrementar la actividad emocional del cuerpo, de tal manera que le enseñas al cuerpo y no a la mente” comentó a una periodista neoyorquina en 1983.
Martha Graham, primero, encontró el movimiento para ser ejecutado en sus danzas y posteriormente, logró formalizarlo como una técnica de entrenamiento De aquellos momentos surgen las espirales que proyectan el cuerpo tridimensionalmente y las espectaculares caídas realizadas por sus bailarines, similares a caídas en el vacío, descritas por ella misma como “metáforas de estados emocionales”.
Con un carácter solitario y en ocasiones agresivo, Graham tuvo granaes dificultades en sus inicios para convencer a los críticos neoyorquinos de la importancia de su trabajo Dos biografías suyas, de consulta obligada, recogieron el itinerario apasionante de esta muier nacida en Pittsburg, Pennsilvania, el 11 de mayo de 1898, y fallecida el 1o de abril en su departamento de Manhattan: una escrita por Don McDonagh en 1973, y el ensayo de Marian Horosko, fronteras de la mente, aparecido en el Dance Magazine de Nueva York en 1989.
Fue una vida larga, pero también fructífera Bailó hasta los 75 años y creó más de 200 coreografías.
SU INFLUENCIA
Y claro, consolidó la técnica más difundida en el mundo La mayoría de las escuelas y universidades la utilizan como enseñanza fundamental, vía la profesionalización, de bailarines de contemporáneo.
En nuéstro país todas las escuelas oficiales de danza la enseñan como materia formativa, compañías como Ballet Independiente Ballet Nacional y Ballet Teatro del Espacio, parten de ella Sin embarqo, alqunos de los discípulos directos de la Graham consideran que lo que se enseña en México nada tiene que ver con lo diseñado por ella.
Tim Wengerd uno de los principales bailarines de la compañía Graham, se convirtió en constante visita a nuestro país para impartir cursos profesionales sobre la técnica de su maestra y amiga, durante ocho años.
En una ponencia, presentada por él, en un Encuentro de Investigación de la Danza en México realizado aquí hace tres años, expresó su profunda preocupación por la forma en que la técnica Graham se enseña entre nosotros El ya fallecido bailarín y coreógrafo, sustentó:
“Siempre he entendido porque la técnica ha tenido tanta popularidad en su país Muchas de sus formas se pueden encontrar en esculturas precolombinas de México, fue la visita de Martha a México en 1935 la que le ayudó a focalizar sus energías y crear lo que ahora conocemos como su técnica Pero siempre me ha irritado el regresar y encontrar a mis estudiantes de Ballet Nacional y Ballet Independiente en un estado de endurecimiento, rigidez y shock mientras se encuentran en clase”.
Algo que para él nada tenía que ver con la técnica original.
Wengerd señala haber cuestionado tales prácticas y, al mismo tiempo “haber hecho todo lo posible para romper con esa clase de hábitos” Pero a cada uno de sus regresos durante los ocho ahos que visitó nuestro país afirmó, “encuentro siempre lo mismo: bailarines tiesos y envarados”.
La problemática, según Wengerd reside en creer que es la forma lo más importante dentro de la técnica, por lo que en su escrito enfatizó: “El utilizar formas estáticas en la técnica es conveniente para preparar a los principiantes en el conocimiento de la nueva manera de moverse, pero existe un gran peligro en dejar las cosas a ese nivel Realizar formas es parte de la danza pero es sólo una parte”.
Para muchos bailarines ésta es una de las razones por las cuales la técnica ha perdido popularidad en nuestro país: “es denigrante la forma en la que se enseña la técnica Graham en México”, afirma Jorge Domínguez, bailarín y coreógrafo de la compañía Cuerpo Mutable “Lo que se enseña aquía no es nada comparado con lo que uno puede aprender directamente con alguno de los discípulos cercanos de Graham”.
Uno de los puntos más fuertes dentro de esta discusión, reside en la posibilidad que deben o no tener los bailarines de entrenarse, además de la técnica Graham, con otras.
Para Jaime Blanc, coreógrafo y bailarín del Ballet Nacional, eso no es posible: “Considero que los bailarines deben de formarse dentro de una sola técnica y aprenderla de principio a fin, el problema con muchos de los bailarines actuales es que tienen un entrenamiento híbrido que no significa nada Si uno quiere tener bailarines bien formados debe de entrenarlos adecuadamente, sin permitir que se entreguen a un entrenamiento diletante”.
Pero Wengerd no pensaba igual, como dijo en la ponencia: “Yo nunca recomendaría que ningún estudiante al principio de su capacitación se entrene con la técnica Graham únicamente, no lo creo tampoco en el caso de bailarines profesionales Clases regulares de improvisacion y composición son fundamentales en el entrenamiento del bailarín”.
Concluye enérgicamente: “Si no existen en México los maestros suficientemente preparados, deben de crearlos Los estudiantes de danza deben de ser impulsados a pensar en lo que están haciendo y el por qué de realizarlo en determinada forma Si uno presenta el material de una forma creativa más que de una forma dogmática, el resultado inevitable sera bailarines capaces de contribuir en los procesos de creación”
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