Por: Roberto A. Valenciano Capín
Con una poética sustentada en su profundidad, su precisión y su gran musicalidad, para así convirtirse en esta experiencia vital y significativamente humana el conmemorar su primer centenario del nacimiento del poeta, filósofo y crítico literario Ramón Xirau, bajo la complicidad de los maestros Luis Fernando Padrón -Briones y la Mtra. Marú Urbina, como el Trío Musicalis y los asistentes que se dieron cita en la Sala de Profundis del Museo del Virreinato de San Luis Potosí.
Es bajo esta tesitura de una poesía muy sonora y conmovedora / cautivadora, al navegar esta noche a través de esta selección / lectura de 18 poemas de corto y largo aliento, y así sustentar este pequeño homenaje al nacido un 20 de enero de 1924 en Barcelona, y que adoptó la nacionalidad mexicana en 1955.
De hay que "no era una mera necedad de escribir en catalán, sino, para él era muy importante este vínculo, esta vinculación, porque Ramón decía, yo soy un catalán en México y un mexicano en Cataluña; él viajó después con mucha frecuencia a Cataluña en donde obviamente hablaba de la literatura mexicana al ser uno de los grandes difusores y defensores de la cultura mexicana".
Como lo apunta el Mtro. Padrón - Briones, "en su poesía hay mucha alusión musical, como hay muchas citas musicales".
Al compartir esta anécdota que tuvo el gusto de conocerlo en una de estas tertulias, al llamarle la atención al dejarse escuchar las primeras notas al.piano de una obra de Chopin y sorprenderse que estas sonoridades era producidas por el maestro Ramón Xirau.
Entre las poesías compartidas en esta noche en donde el público asistente disfrutó y decantó, se pueden destacar: -2 poemas del mar-, - Cerezas-, - Mozart-, - Origen-,- La Luz de la naranja-,- Cuando más perfecto es el artista-, por citar algunas.
Y como parte de este maridaje literario-musical, se contó con la presentación oficial del Trío Musicalis, integrado por Aída María Jorge Gómez en el violoncello, Marisol Sarahí Saucedo Silva en la flauta y Luis Lázaro Jorge Gómez en la viola, al ofrecer este puntual enroque sonoro a través de las obras del compositor zacatecano Manuel M. Ponce; - Vals lento-, Marchita el alma-,- Gavota-,-Intermezzo-,- Scherzino mexicano-, -Guateque- y- Estrelita-.
Es así como se le rinde este póstumo homenaje a quien se esforzó en demostrar la unión entre filosofía, poesía y religión, dado que el lenguaje, tanto conceptual como imaginativo, trata de desvelar las "cuestiones últimas". Para él, tan significativas son las expresiones emotivas como las conceptuales.
Así como ser uno de los estudiosos más prolijos de la poesía mexicana, y sus exámenes de la obra de Octavio Paz y Xavier Villaurrutia, sobre todo, son indispensables para entender no sólo a estos poetas, sino a toda una corriente del pensamiento nacional.
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