Por: Roberto A. Valenciano Capín
Una décima edición del Festival de Música Libre que cierra con la participación de la Camerata de San Luis Potosí bajo la dirección del Mtro. Julio de Santiago y alumnos del área de Música del Centro de las Artes.
Sin la presencia de la directora Laura Elena González fue clausurada esta edición del único festival que ha permanecido /sobrevivido desde la apertura de este Centro de las Artes.
Para esta clausura se une la Camerata de San Luis a este acto solidario, como lo ha hecho por mas de seis participaciones en este esfuerzo de ofrecer estas posibilidades/ ofertas no solo sonoras sino esta interacción con sus ejecutantes hacia los alumnos.
En esta ocasión acompañó a tres jóvenes estudiantes de música de este Centro de las Artes.
El guitarrista Álvaro Medina Mendoza ejecutó el Concierto para guitarra y cuerdas en La Mayor de Antonio Vivaldi, quien ya había contado con esta experiencia de ser acompañado por la Camerata de San Luis, de ahí notarse esta interpretación mas resuelta y más limpia en su ejecución.
Bajo este temple de las cuerdas pulsadas, Héctor Arosqueta Granado interpretó el Concierto en La Menor para violín y orquesta Op. 3 No. 6 de Antonio Vivaldi. Una muy notable interpretación de este joven alumno. Por cierto, ambos son alumnos del Mtro. Francisco Sifuentes.
Por su parte, la pianista Lilia Estela Castellanos interpreto el Concierto en Re Mayor para piano y orquesta. No. 5 de Wolfgang Amadeus Mozart. Sobria y mucha claridad en su interpretación de la alumna del Mtro. Pedro Damián Martínez.
Y concluir este concierto de clausura con la Suite para Orquesta de cuerdas del compositor inglés, John Rutter. Una obra en donde muestra el compositor la capacidad de crear escenarios evocadores e inspiradores de melodías existentes y conocidas, haciéndolas exclusivamente suyas, la cual esta integrada por las canciones populares muy conocidas: A- Roving, I have a Bonnet trimmed with blue, O waly waly y Dashing away, siendo estas de inspiración tanto inglesa, escoceses e irlandeses.
Gracias a su sencillez y por su ecléctico y alegre estilo del autor cautivo al público y aunado a una destacada interpretación de la Camerata de San Luis.
De esta manera concluye una emotiva y a la vez reflexiva edición entorno de ver hacia donde transitara este festival que indudablemente ya ha logrado permear tanto en la comunidad estudiantil como en los potosinos.
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