Por: Patricia Curiel
Lucrecia y el canto de los dudasaurios, de la compositora mexicana Nur Slim, es una ópera con la que su creadora busca llamar la atención de las niñas y los niños hacia este género e invitarlos a descubrir los elementos que lo conforman.
“Por eso elegí el tema de los dinosaurios, era como quitarle esa solemnidad a la ópera; quiero que les cause emoción para que la próxima vez que vean ópera les den ganas de ir porque ya les dejamos una buena impresión”.
A través de la historia de Lucrecia, una pequeña dinosauria T-Rex, y tres dinosaurios hervívoros —explica Nur Slim— los niños podrán descubrir los diferentes instrumentos de un ensamble de música de cámara y el papel vocal que desempeña una soprano, una mezzosoprano, un tenor y un barítono.
La ópera infantil también enseñará a los niños que existen diferencias entre cada ser vivo y la importancia del respeto hacia las preferencias y gustos de quienes los rodean para una mejor convivencia. Además de buscar fomentar en los niños que hagan uso de su derecho a expresarse libremente.
“Cuando hice la ópera mi primera intención era que fuera didáctica y que ellos también pudieran participar. Para mí hacer música para niños es buscar la manera de que ellos participen, que no estén sentados, sino que estén activos totalmente y que sea algo educativo que no sólo sea una manera de entretenimiento, sino que sea también algo pedagógico con algún mensaje”.
Para Nur Slim era muy importante que la obra fuera nombrada como ópera pues tiene todos los elementos de la misma. Los cantantes la interpretan sin micrófonos y las arias, aunque están compuestas con arreglos musicales que les dan un tono más de canciones, tienen los elementos técnicos característicos de una ópera.
La compositora mexicana también ha impartido una serie de talleres llamados Animalezas sonoras —desde 2016— en donde busca “que los niños aprendan el sonido de todos los instrumentos de la orquesta, que aprendan a componer y a transcribir sus emociones a través de los dibujos, de la música y de la creación”.
Lucrecia y el canto de los dudasaurios, igual que sus proyectos anteriores, es una forma de impulsar la creatividad de los niños. El espectáculo no será representado con grandes botargas, explica Nur Slim, “lo que queremos es despertar la creatividad de los niños. La escenografía y el vestuario están elaborados con trozos de tela, gorras y cartón para que los niños puedan recrear todo lo que vean en sus casas".
El estreno de la ópera forma parte de la campaña "Volverte a ver". Las funciones se llevarán a cabo en el Teatro de las Artes del Cenart el sábado 10 y domingo 11 de abril, a las 12:00 y 14:00 horas. El aforo será limitado a 150 personas.
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