Por: Yair Hernández
El Multiforo Alicia lleva 26 años trabajando a favor de la cultura independiente del país, aunque este compromiso no es visto con agrado del lado gubernamental, por lo que el espacio, harto del poco respaldo y las constantes obstrucciones para su quehacer artístico, anunció que el próximo diciembre, al cumplir 27 años, cerrará sus puertas.
Pero en entrevista con MILENIO, Ignacio Pineda, gestor del icónico lugar ubicado en el 91-A de avenida Cuauhtémoc, en la colonia Roma, revela que el foro podría seguir abierto si se configura como una "cooperativa o asociación civil, si el colectivo lo decide; yo me puedo salir y quizá el Alicia pueda seguir si ellos deciden hacerse alguna de esas dos opciones".
Sobre el anuncio de cierre que hizo el pasado 27 de diciembre de 2021, el melómano considera que "es un buen momento para retirarnos, Alicia tiene buena salud. Es el momento de que otros colectivos hagan, que lleguen las nuevas propuestas. Quizá el concepto del Alicia ya quedó atrás".
"Pensamos que, como los grandes rockeros, los 27 es la edad adecuada para retirarnos, es el número cabalístico".
También reconoce que la situación económica a partir de la llegada de la pandemia de covid-19 "está muy fuerte, es mucha lana manejarse dentro de la escena musical. Hay agencias que manejan una buena cuenta bancaría y vemos que no hay un camino para la cuestión alternativa de la música, cuestiones de conciencia y crítica".
Sin una ley que cobije a los espacios independientes
A Ignacio le causa tristeza saber que no existe "una ley que nos ampare como espacios culturales, no hay una ley que de cobijo jurídico a la cultura independiente de esta ciudad. Desde que iniciamos el Alicia, al año siguiente comenzamos a hacer reuniones para pedir que se nos contemplara como espacios culturales y no como bares o restaurantes".
"(Las autoridades) manejan que es la capital mundial de la cultura, pero yo no les creo. Te ven que haces tus cosas sin necesidad de ellos y no les gusta. Si te pones a ver la cartelera oficial del gobierno, es la misma que manejamos los espacios, son los mismos artistas; deberían estar contentos que estamos sacando propuestas artísticas, pero nos ven raro, yo creo que no nos quieren", asevera.
Sobre la Ley de Espacios Culturales Independientes, el gestor señala que "está enlatada porque está mal hecha, no toca los puntos claves de la cultura independiente. En lugar de ser para los espacios, es una ley de fomento económico, es para la gente que baja financiamientos".
Pineda cuenta que, como integrante de la Coordinadora de Espacios Culturales Independientes (CECI), acudió a algunas mesas de trabajo de esta Ley, pero pronto retiró su apoyo porque "excluye totalmente a los espacios que manejen alimentos y bebidas alcohólicas".
"A veces las bandas nos otorgan un 30 o 40 por ciento de las entradas, pero en otros lugares piden el 100 por ciento. Entonces, esos lugares tienen que recurrir a la venta de alimentos y de bebidas alcohólicas para poder pagar rentas, sueldos, equipo".
Además, señala que esta Ley, que en su momento impulsó Gabriela Osorio, en ese entonces presidenta de la Comisión de Derechos Culturales del Congreso de la CdMx, implica "pedir un montón de permisos: a la Alcaldía, en la Secretaría de Cultura, en el Instituto de Derechos Culturales... cada vez se hace más burocrático; si haces 3 o 4 eventos por semana, te la tienes que pasar en las oficinas pidiendo permisos. No nos tienen confianza: es tan sencillo ir y ver lo que se cobra, lo que se hace, lo que se produce, es fácil descubrir que un espacio es cultural".
Inmuebles abandonados y el sueño de un centro social
Durante sus recorridos por la Ciudad de México, el habitante del barrio El Coyol, en la delegación Gustavo A. Madero, nota la gran cantidad de inmuebles abandonados que existen, por eso busca "que los entreguen a la comunidad cultural, no que hagan espacios semi ocupados donde mucha gente solo va a usar las computadoras"
Y afirma que el Multiforo Alicia también podría seguir vivo si se le brinda uno de estos espacios, pues "siempre nos gusto la idea de tener un espacio grande donde no únicamente hiciéramos música, sino tener una sala para proyectar cine, una videoteca, una biblioteca, un comedor y hasta un consultorio".
"He juntado discos desde mis 14 años, eso ha sido mi vida; todo el dinero que ganaba era para comprar libros y discos, y digo: '¿Para qué los quiero en mi casa?'. Me hubiera gustado tener un espacio donde llevar toda mi música y que la gente, con una memoria, hiciera peticiones, que la música corriera. Que si tengo una biblioteca, darle uso, que la gente vaya y lea, que la gente pueda fotocopiar. Me gustaría hacer un centro social".
Además, Pineda reconoce que le gustaría dar talleres, por ejemplo: cómo sonorizar una banda, cómo usar el equipo, sobre iluminación y sobre cómo manejar un espacio. "En 26 años algo hemos aprendido".
"Nosotros como espacio estamos abiertos a las propuestas, podemos sentarnos en una mesa a trabajar y que escuchen todas las ideas que tenemos. Cada seis años viene un nuevo administrador de la cultura a nivel político y se va perdiendo todo lo que hemos platicado. Lo mejor sería hacer mesas de trabajo, que sepan lo que la comunidad quiere y piensa", concluye.
El éxito de un recinto independiente
Ante la duda de qué volvió al Multiforo Alicia tan entrañable para la comunidad artística del país, Pineda responde que "nunca quisimos ser un bar de moda, siempre quisimos ser un espacio para la banda; nuestros primeros precios eran de 10 o 15 pesos, porque la idea era que la gente de la ciudad llegara al Alicia".
"Alicia nunca fue para la colonia Roma, fue para toda la Ciudad de México. Nunca optamos a la máxima ganancia, de ver cuánto puedes sacar por un evento. A la par, el Alicia a veces cede sus instalaciones a colectivos sociales, culturales o políticos para que la gente se organice y hagan eventos para ellos".
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