Por: Virginia Bautista
"La buena música no tiene fecha de caducidad”, afirma la pedagoga y cantante Genoveva Tort Ortega a propósito de la vigencia del famoso método de educación musical para niños que creó en 1965 su padre, César Tort (1925-2015), y que continúa aplicando con éxito en el Instituto Artene, del que es directora académica.
"Las características del método son el rescate de la música tradicional y la adaptación de instrumentos, pero el eje está en la música misma. Él era básicamente un compositor e ideó un método con el que podía enseñar e hizo música para niños.
"Y su vigencia radica en la adaptación que hemos hecho de esa música, para trabajar con niños nacidos en los años 60 del siglo pasado hasta los actuales. Tenemos formación de músicos y educadores musicales, y siempre estamos en cursos. La música y la educación musical es infinita, nunca terminas de prepararte”, agrega.
En entrevista con Excélsior, acompañada de los maestros Rocío Del Valle, Leticia Tlaseca e Itzaind Jiménez, la egresada de la UNAM destaca que lo más importante del Método Tort es que “los maestros capacitados forman sus propios criterios de educación musical, sus métodos y su música. Hubo un cambio de mentalidad sobre el maestro de música”.
En uno de los salones del Instituto Artene, creado por César Tort en 1974 para la enseñanza y la investigación de su propuesta, y que actualmente atiende a 324 niños de entre tres meses y 13 años, la directora detalla que la escuela se ha consolidado durante sus 48 años de vida, que los alumnos han acudido a encuentros nacionales e internacionales y han sido reconocidos y aplaudidos.
"Tenemos pendiente impulsar más la investigación de manera formal y este año buscaremos una certificación de la Secretaría de Educación Pública, con valor curricular para los maestros formados con nuestro método”, dice.
Por su parte, la saxofonista Rocío Del Valle añade que “la música es parte del ser humano; y el método se basa en esta premisa, que todos somos musicales, no se clasifica a los niños. Es importante el desarrollo musical en el niño, porque si no se hace se pierde”.
La maestra en Educación Musical Infantil explica que aprender esta disciplina trae un beneficio cognitivo para el niño. “La música despierta todos nuestros sentidos: debes estar atento, escuchar, interpretar la lectura, se forma la facultad de entender mejor, el aprendizaje de un idioma es más fácil porque escuchas bien, adquieren mejor coordinación cuando tocan un instrumento y aprenden a trabajar en equipo; además, te despierta el sentimiento de logro y pertenencia, la música te da disciplina y sensibilidad hacia la naturaleza”.
Leticia Tlaseca comenta que don César Tort “creó este método pensando en escuelas públicas, cuando la música no tenía un papel importante y los maestros no sabían qué hacer; por eso escribió partituras que van de lo sencillo a lo complejo”.
La violonchelista especifica que el método consta de varios géneros musicales. “Empezó con el ritmo: hizo unas 70 piezas para ser tocadas sin instrumentos, las que se agruparon en un libro que tiene 44 lecciones; creó unas 80 obras para coro y orquesta, para niños de maternal hasta los 12 años; para coro solo, rescató las tradiciones navideñas, las posadas, y escribió unas 40 piezas; además de 14 obras de música moderna”.
Y el cantante Itzaind Jiménez confiesa que “he tenido la oportunidad de investigar otras maneras de dar clase, otras técnicas; pero siempre regreso al Método Tort, porque es muy completo, te ofrece todos los recursos para desarrollar las habilidades de los chicos y te da mucha creatividad y libertad. Los niños aprenden a tocar un instrumento, cantan, leen partituras y trabajan con orquesta”.
Ubicado en Coyoacán, el Instituto Artene, dice Genoveva Tort, se prepara para festejar sus 50 años en 2024 con un trabajo más profundo y cercano en las escuelas públicas de la ciudad.
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