Por: Roberto A. Valenciano Capín
De nueva cuenta la Plaza de Aranzazú fue nuevamente testigo de este grito unánime de solidaridad por defender de nuestra soberanía, patrimonio histórico y ecológico como es el cerro de San Pedro a través de una sonante voz de rechazo total contra la Minera San Xavier que se hizo presente en esta XIII edición del Festival Cultural Cerro de San Pedro.
Da la bienvenida, un corpo policiaco que da solamente acta de fe de lo que ocurre en el interior de esta plaza pública. Para apreciar las fotografías concursante que plasman desde su lente lo que es y será para mucho el todavía emblemático Cerro de San Pedro.
Una isla del equipo de sonido y alrededor de ella, el público que busca resguardarse un poco de este sol que ya quema o, simplemente de aquellos que lo afronta con cierta afrenta ante el refresco de esa brisa perdida que le da vida a una pasiva fuente.
Abre este segundo día de actividades musical, con un contagioso ska, la banda defeña Sonora Kriminal, sin mas incidieron ya desde temprana hora a un frenético slam, para proseguir esta inercia con este novel proyecto de metal progressive de Cydonia.
Bajo la poética de Fabio Amaro se arropa bajo el tiento del rock/blues de Blue Velvet, al desplegar canciones de su propia creación y por ahí un cover del gran Silvio Rodríguez.
Desde tierras del hard rock llegan los Argonautas del Terciopelo, al ofrecer canciones que se desprenden de su disco " 11:17 Capítulo 1", así como dos canciones de lo que será de su próximo disco.
Entre los gritos y las sonrisas de estos chavitos que corren libremente por la plancha de esta plaza y que de esta manera dan también la bienvenida a esta tarde-noche al aliento del blues y como bien lo apuntaba Rivelino de ser testigos de un hecho histórico al conjuntar a lo mas representativo del blues potosino en un solo escenario sino va un misma pulsación.
Bajo esta singular forma de no solo hacer canciones sino de saberlas compartirlas y transitarlas por este rúa de este sincopado soul. Ahora bajo el resguardo de sus inquilinos musicales que acompañan a Beto Blues Band, quien sin esfuerzo alguno logró convocar, incidir en convivir a través de sus espontáneas dinámicas de este karma para dos y, ser bien cobijado por un público que le agradeció con el aplauso o la sonrisa al darse cita en este espacio público en esta capital potosina.
Un blues mas en forma, lo ofrecen Los Bluserables quien extrae de la savia negra bajo el denominador común de la función básica de este halito musical para ofrecer en esta tarde noche desde una bien lograda poética aunado a este mensaje de conciencia e infaliblemente buscar la complicidad en cuanto a su identidad con la otredad de esta banda bajo la directriz de Roberto Rivelino, el cual compartieron canciones que se desprenden de su más reciente trabajo discográfico - Detrás de las sombras-.
Y cerrar una de las bandas que con el tiempo han sabido ganarse a pulso el respeto y el cariño de su gente, los Monroy Blues, bajo el timón de esta dualidad musical y creativa de Luis y la maga Martha Monroy, en donde a pesar de dejarse sentir un aire frio no fue impedimento para conectarse de ipso facto en esta travesía propuesta por esta banda oriunda de la llamada puerta de la huasteca, Ciudad Valles.
No solamente bastó subir sino también bajar del escenario para buscar ese infalible contacto con su gente. Cada pieza que interpretan fue creciendo y adueñándose no solamente del entarimado sino de su público que los arropo, como lo hizo su contraparte a través de una potente voz y entrega apasionada de Martha que se conjuga con esta segunda voz de Luis y la complicidad musical de Toño, Carlos, Roberto y Raúl.
Una travesía por sus ya impostergables clásicos y por ahí a petición del responsable ofrecer dos rolas mas. Quedar plasmado el incondicional apoyo que tiene esta banda de blues, quien viene ofreciendo su mas reciente trabajo discográfico "Orquestalmente".
De esta manera concluir con este halito del blues una edición mas de este Festival de lucha bajo el manto de la cultura por el Cerro de San Pedro.
Una isla del equipo de sonido y alrededor de ella, el público que busca resguardarse un poco de este sol que ya quema o, simplemente de aquellos que lo afronta con cierta afrenta ante el refresco de esa brisa perdida que le da vida a una pasiva fuente.
Abre este segundo día de actividades musical, con un contagioso ska, la banda defeña Sonora Kriminal, sin mas incidieron ya desde temprana hora a un frenético slam, para proseguir esta inercia con este novel proyecto de metal progressive de Cydonia.
Bajo la poética de Fabio Amaro se arropa bajo el tiento del rock/blues de Blue Velvet, al desplegar canciones de su propia creación y por ahí un cover del gran Silvio Rodríguez.
Desde tierras del hard rock llegan los Argonautas del Terciopelo, al ofrecer canciones que se desprenden de su disco " 11:17 Capítulo 1", así como dos canciones de lo que será de su próximo disco.
Entre los gritos y las sonrisas de estos chavitos que corren libremente por la plancha de esta plaza y que de esta manera dan también la bienvenida a esta tarde-noche al aliento del blues y como bien lo apuntaba Rivelino de ser testigos de un hecho histórico al conjuntar a lo mas representativo del blues potosino en un solo escenario sino va un misma pulsación.
Bajo esta singular forma de no solo hacer canciones sino de saberlas compartirlas y transitarlas por este rúa de este sincopado soul. Ahora bajo el resguardo de sus inquilinos musicales que acompañan a Beto Blues Band, quien sin esfuerzo alguno logró convocar, incidir en convivir a través de sus espontáneas dinámicas de este karma para dos y, ser bien cobijado por un público que le agradeció con el aplauso o la sonrisa al darse cita en este espacio público en esta capital potosina.
Un blues mas en forma, lo ofrecen Los Bluserables quien extrae de la savia negra bajo el denominador común de la función básica de este halito musical para ofrecer en esta tarde noche desde una bien lograda poética aunado a este mensaje de conciencia e infaliblemente buscar la complicidad en cuanto a su identidad con la otredad de esta banda bajo la directriz de Roberto Rivelino, el cual compartieron canciones que se desprenden de su más reciente trabajo discográfico - Detrás de las sombras-.
Y cerrar una de las bandas que con el tiempo han sabido ganarse a pulso el respeto y el cariño de su gente, los Monroy Blues, bajo el timón de esta dualidad musical y creativa de Luis y la maga Martha Monroy, en donde a pesar de dejarse sentir un aire frio no fue impedimento para conectarse de ipso facto en esta travesía propuesta por esta banda oriunda de la llamada puerta de la huasteca, Ciudad Valles.
Una travesía por sus ya impostergables clásicos y por ahí a petición del responsable ofrecer dos rolas mas. Quedar plasmado el incondicional apoyo que tiene esta banda de blues, quien viene ofreciendo su mas reciente trabajo discográfico "Orquestalmente".
De esta manera concluir con este halito del blues una edición mas de este Festival de lucha bajo el manto de la cultura por el Cerro de San Pedro.
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