Por: Juan Carlos Talavera
El investigador y periodista Mario Casasús descubrió un texto manuscrito inédito de Ignacio Manuel Altamirano (1834-1893).
Se trata de un prefacio que el autor de El Zarco escribió para la segunda edición de su libro Paisajes y leyendas, tradiciones y costumbres de México, el cual nunca se publicó.
Dicho manuscrito, hallado por el investigador en la biblioteca de su madre –Rocío Casasús, hija de Mario Casasús Altamirano, quien fuera nieto del autor de La Navidad en las montañas–, coincide con el aniversario 129 del fallecimiento del escritor y poeta, que se cumplió ayer.
Lo siguiente, dijo Casasús a Excélsior, será buscar que el documento se incluya en la actual edición del mismo título que publica, desde 1974, editorial Porrúa en su colección Sepan Cuantos, y concluir el registro del archivo que en próximos días donará al Archivo Histórico Genaro Estrada de la Secretaría de Relaciones Exteriores.
“Mientras estaba ordenando el archivo para la donación, encontré esta página y al cotejarla con las obras completas y consultar con el experto Manuel Sol, notamos que es un texto inédito”, relató.
El documento, signado en 1884, dice así: “La singular bienvenida con que ha sido recibida la primera serie de estos artículos que vio su luz pública en un tomo, a mediados del presente año, tanto por la prensa de México, como por el periódico en general, me obliga antes del tiempo que había determinado aguardar para seguir publicando esta selección, aprovecho el ofrecimiento de mis buenos amigos los redactores de La Prensa para imprimir en el folletín de su periódico la segunda serie que es la que hoy sale a la luz”.
Y agrega: “En ella reproduzco lo mismo que en la primera, artículos que ya se habían publicado en varios periódicos, pero agrego algunos que permanecían inéditos, esperando que mis lectores acepten este nuevo tomo, con la misma bondad que han dispensado al primero”.
¿Qué nos muestra este texto?, se le pregunta. “Me despierta la idea de que Altamirano siempre estuvo pensando y revisando sus proyectos, tratando de perfeccionarlos, es decir, en este prefacio él asume la responsabilidad de seguir aumentando su libro a partir de textos inéditos que quedaron en el tintero.
“Además, es un saludo al lector y un agradecimiento a sus amigos que se interesaron en que se hiciera la segunda serie que, al final, no se concretó”.
Y agregó: “Nadie conocía este manuscrito porque permaneció doblado dentro de un libro, es decir, nunca lo mandó al periódico, a sus amigos ni está recopilado en sus obras completas y es un dato que revisé y consulté con el investigador Manuel Sol”.
DONACIÓN DE ARCHIVO
Mario Casasús también informó que realiza el registro fotográfico del archivo documental que donará próximamente a la cancillería, el cual se sumará al acervo que, desde 1989, resguarda dicha sede. Aquel conjunto, compuesto por 100 documentos originales, 27 diplomas de masonería y de grados académicos de Ignacio Manuel Altamirano, fue donado por León Casasús Montagnier, y podría servir de base para las conmemoraciones del bicentenario de su nacimiento en el año 2034.
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