Por: Ricardo Quiroga
En su mensaje en ocasión de los primeros 100 días del tercer año de gobierno, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, desde Palacio Nacional, apenas incluyó a la cultura, y lo hizo de manera tangencial. Sobre ciencia y tecnología, nada.
Destacó que este año se preparan magnas conmemoraciones por los siete siglos de la fundación de México-Tenochtitlan, los 500 años de su caída por la invasión española y el bicentenario de la independencia del país.
“Para nosotros la historia, como diría Cicerón, es la maestra de la vida. Y las culturas heredadas de nuestras grandes civilizaciones han sido siempre nuestra salvación ante agresiones, huracanes, temblores, inundaciones, incendios, sequías, epidemias, malos gobiernos, saqueos y otras desgracias. Por eso no debemos olvidar nuestro pasado. Sus enseñanzas son la base para edificar un mejor porvenir”, declaró como parte de los alrededor de 40 minutos de mensaje a la nación.
Acto seguido mencionó que, para vestir este año de conmemoraciones, durante los meses próximos se tienen programadas exhibiciones de piezas arqueológicas y códices, así como la participación de delegaciones artísticas de varios países, con la asistencia de mandatarios o líderes sociales. Dijo que también se llevará a cabo la reedición de 2 millones 100,000 libros escritos por 21 autores, dijo, “que han dejado constancia de la grandeza cultural de México”. Los ejemplares serán distribuidos de manera gratuita.
Entre las obras destacan El laberinto de la soledad, de Octavio Paz, Balún Canán, de Rosario Castellanos; Canek, de Emilio Abreu Gómez; Paseo de la Reforma, de Elena Poniatowska; Los de abajo, de Mariano Azuela, Apocalipstick, de Carlos Monsiváis, Muerte en el bosque, de Amparo Dávila e Y Matarazo no llamó…, de Elena Garro, entre otras.
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