Entrañable noche de blues con Real de Catorce

Por: Roberto A. Valenciano Capín

"Imaginen las historias detrás de este momento, imaginen la historias después de este momento" Germán Romero.

Es así como en esta noche potosina quedaron constastadas estas innumerables expresiones de amor, respeto y agradecimiento hacia el Maestro José Cruz Camargo, imprescindible voz del blues latinoamericano, junto a sus Real de Catorce Cuarteto que  regresan después de varios años a estas tierras potosinas, para compartir estas canciones que no solo arropan sino también son parte de muchos.

Desde el formarse para ser parte de esta conmemoración musical, ya se decantaba esta sensación de no solo ser parte de esta experiencia sino también del  estar y cantar con el Mtro. Cruz.

Fotografía: Héctor Guevara/ Agencia Altiplano. Press

Es gracias al toque del poeta que cobija no solo a través de sus poéticas sino extiende su canto a través de las sonoridades de su armónica, para que el también contador de historias confluyan en este devenir del tiempo.

En esta noche se entretejen desde el blues y variables no solo estas historias sino también estos sentires que han quedadas plasmadas en: -Voy a morir-, -Lila-, -Esta noche-,-Besos de ginebra-,-El lobo-,- Malo-,-Suena el viento-, - El boxeador-,-Dorina y Abel-,- Mujer liviana-.

Como -Un par de ojos-,- Busco a mi padre-,-Sola-,- El Gargaras-,-El quinque-,-Llame por favor-,-No sot el hombre de tu vida-.

Fotografía: Héctor Guevara/ Agencia Altiplano Press

Entre el grito unánime de pedir que regrese al escenario a pesar de que no se sentía muy bien de salud, regresa para ofrecer-La venenosa- y la infalible- Ázul-, que estremeció a muchos.

A pesar de los gritos y exclamaciones de agradecimientos de su público que se dieron cita de varios estados y del extranjero.

Indudablemente, es sorprendente como varias generaciones se han unido y transitado para sin más establecer una relación muy significativa al ser parte de Real de Catorce. 

Lo cual lo confirman algunos de sus seguidores, que van  desde  el comentario de ser la oportunidad de ser una de la última vez de poder verlo en un escenario debido a su enfermedad, al agradecerle por sus canciones, como también reconocer que ya están en sus corazones, en momentos se volvían vidriosos sus ojos pero que lo compensaban con una sonrisa.

Fotografía: Héctor Guevara/ Agencia Altiplano Press

O el caso de estas historias de vida que gracias a sus canciones, textos y experiencias han permeado en otras vidas.

Esperan dos hermanos abajo del escenario, nerviosos  y con ls emoción a  flor de piel.

Al platicar que en su última visita hace diez años, asistirián con su padrastro que era muy fan de Real de Catorce falleció, y por lo tanto ya no pudieron asistir al concierto.

Pero al saber - sus hijos- que vendría de nueva cuenta Real de Catorce, como un acto de recordar a su padre, no solo con cantar, llorar y sentir cada canción que le gustaba, sino refrendar esta unión simbólica con Real de Catorce, buscaron la manera de que a través de una armónica de su padre fuera firmada por el maestro Cruz.

Una espera de estos jóvenes que culminó al recibir de gente de Real de Catorce  la armónica firmada por el Mtro. Cruz.

Los jóvenes con sus ojos llorosos, emocionados le agradecieron  por firmarle esta armónica.

O aquel que carga su libro -Yo creador me confieso- con mucho orgullo, esperando que le sea autografiado por el Mtro Cruz,  en su espera nos cuenta ser muy agradecido por sus palabras, ya que sus poemas como reflexiones le cambiaron su vida, al tatarear con tal emotividad -He perdido a mi padre-.

Indudablemente no solo fue un viaje sonoro, emocional, sino que dimos fé de la pasión, amor y entrega absoluta a la labor de crear hermandad.

Solamente resta decir... Gracias maestro José Cruz, Rodrigo Pratt en el bajo, Arturo Waldo en la guitarra y Alan López en la batería.

Así como a José Luis Sandoval Martínez, Morbid Productions como al público asistente.